L.M.A.
16/2/21.- Badajoz.- El pintor extremeño residente en Madrid, Damián Retamar ha presentado su cuadro sobre la pandemia que nos aflige en el Museo Luis de Morales de Badajoz. Al acto acudieron el presidente de la Junta, el alcalde de Badajoz, el presidente de la fundación Caja de Badajoz y la consejera de cultura de la Junta y miembros del Ayuntamiento pacense.
La obra mural “COVIDA” de Damián Retamar homenajea a las víctimas de la pandemia
El artista extremeño Damián Retamar presenta una obra mural dedicada a las víctimas de la pandemia provocada por el COVID-19. “COVIDA”, título del cuadro de más de cinco metros de ancho y dos metros de alto, se expondrá permanentemente a modo de homenaje en el Museo de la Ciudad de Badajoz “Luis de Morales”.
La inspiración de esta obra nace durante el confinamiento; el artista, con el objetivo de aportar su granito de arena a la sociedad, decide representar a través del arte la situación que estamos viviendo, a modo de homenaje y recordatorio a las víctimas mortales y sociales. Las obras de Damián Retamar son bien reconocidas a nivel internacional; sus dimensiones y relieves, aspectos que proporcionan a esta obra un realismo y una historia que te introducen en ella, hacen que sus cuadros estén situados en lugares de fácil acceso al público, hecho que el artista valora a la hora de compartir su arte. Tanto el artista como la Junta de Extremadura y Fundación CB, instituciones que han hecho posible que este cuadro vea la luz, han elegido el Museo “Luis de Morales”, en colaboración con el Ayuntamiento de Badajoz, como lugar para que la sociedad extremeña pueda disfrutar de él.
Precisamente ha sido la situación actual la que ha provocado que esta mañana el acto de presentación del cuadro se celebrara a puerta cerrada. A la inauguración han acudido el propio autor de la obra, Damián Retamar; la Junta de Extremadura, representada por su Presidente, Guillermo Fernández Vara, y la Consejera de Cultura, Nuria Flores Redondo; el Ayuntamiento de Badajoz, con la asistencia por parte del Alcalde, Francisco Javier Fragoso Martínez, y la Concejala de Cultura, Paloma Morcillo Valle; y Fundación CB, personificada por su Presidente, Emilio Vázquez Guerrero, y su Director, Emilio Jiménez Labrador.
Más información
https://lamiradaactual.blogspot.com/2018/10/retratos-damian-retamar-artista-sacro-y.html
Muchas evocaciones. Una muy conocida, la del hombre de Vitruvio de Leonardo da Vinci. La otra, quizá menos conocida, en la parte izquierda del cuadro, me lleva a los "paisajes corales" de Gerrrero Malagón. La idea, tan repetida en el Arte, del "tempus fugit".
ResponderEliminarEnhorabuena Damián
Felicidades, por la artística ejecución y por el “realismo” reflejado en la mirada de todos los protagonistas en sus diferentes cometidos, que conforman un “conjunto social”, ordenado y solidario, que nos abre la única esperanza para dar solución a éste y a cualquier otro problema que tengamos que afrontar.
ResponderEliminarSon miradas que denotan seriedad, abnegación, incondicionalidad, entrega, hermandad, compromiso, profesionalidad, respeto…, responsabilidad..., cualidades humanas que aún definen a la gran mayoría de españoles. Es un testimonio veraz, ¡tan distinto! a lo que nos ha ofrecido la propaganda oficial.
Este cuadro hace una inteligente lectura de la dualidad de la tragedia, al expresar con el cartel de “ABIERTO”, la indisoluble ligazón entre la salud y la economía. Un cartel que personifica el sentido del orden porque expresa un ferviente deseo de trabajar para que no se desmorone el andamio de nuestra estructura social.
Un cuadro que escenifica lo que aquellos que nos gobiernan, no han sabido (o no han querido) ver, pues en esta pintura, hasta los (merecidos) aplausos contrastan con la tristeza que se evidencia en la mirada perdida del vecino del 5º. Mientras, la cigüeña vuela fuera de sus contornos, consciente de la gran tarea que se le viene encima para llevar a cabo la urgente reposición de nuestro censo, tan enflaquecido en nuestro envejecido país por ésta, y por otras plagas precedentes.
Sería extenderme en exceso, al comentar las reflexiones a que me han obligado otros elementos de esta pintura, como son el árbol desnudo, reseco… muerto; la calavera, la vela recién apagada, el continente más atribulado –y nuestro país encima– en medio del globo terráqueo, el tiempo roto por un inesperado golpe en el minuto diez, la silla vacía… y el bastón de su ausente, como único vestigio de una vida ya inexistente.
¡Qué gratificante resulta comprobar el abundante talento que anida entre nosotros, ante evidencias como la que representa esta obra!
Muchas felicidades, y muchas gracias.
Carlos Uralde