domingo, 5 de abril de 2015

Málaga capital cultural y joyel de museos. Los últimos: el Museo Ruso y el Centre Pompidou Málaga



Centre Pompidou Málaga



Julia Sáez-Angulo

         En menos de un mes, la ciudad de Málaga ha abierto las puertas de dos filiales de museos internacionales: el Museo de Arte Ruso, procedente de San Petersburgo y el Centre Pompidou Málaga, llegado de París. Ambos están bajo la dirección municipal del Ayuntamiento de la capital, que ha hecho una apuesta fuerte para que Málaga tengan un buen plantel de museos y ejerza una llamada especial a los visitantes interesados por la cultura y no sólo por las playas.

         A estos dos nuevos museos situados, el Museo de Arte Ruso, en el antiguo edificio de Tabacalera, y el Pompidou Málaga,  en un edificio de nueva planta denominado El Cubo en el puerto de Málaga, hay que sumar otros importantes museos como son el de la Fundación Casa Natal de Picasso, el de Carmen Thyssen-Bornemisza, el Museum de Jorge Rando y del Impresionismo; el de Revello del Toro y Pedro de Mena; el del Automóvil y la Moda, también en el edifico de Tabacalera; el CAC de la antigua Lonja o el de Bellas Artes que se abrirá, si todo va bien a finales del mes de diciembre de 2015.

         A todos ellos hay que sumar el proyecto de exponer nada menos que 120 murales del célebre artista norteamericano Sol Lewitt (Estados Unidos de América, 1928- 2007) y que, según fuentes municipales, se llevan a cabo conversaciones avanzadas para exponerlos después de las elecciones de mayo, en el mismo edificio de Tabacalera, donde quedan todavía muchos metros cuadrados libres para completar un espacio que será totalmente museísticos. (Algunos lamentan que faltan autobuses más frecuentes entre el centro de Málaga y el complejo museístico de la antigua Tabacalera).

Museo de Arte Ruso. Málaga

José María Luna: Proyecto ambicioso y oferta de primer nivel
         Después de Barcelona, Málaga es la provincia donde más crecen las pernoctaciones turísticas, de las que un 70% de las mismas, son atraídas por la oferta cultural, según las estadísticas de Turismo. De hecho durante la Semana Santa, más de diez mil personas han pasado por los nuevos museos.

         Para José María Luna Aguilar, director de la Agencia Pública de la Casa Natal de Pablo Ruiz Picasso y otros Equipamientos Museísticos y Culturales – comprendidos los dos museos recientes- asegura que “el proyecto de Málaga es ambicioso, por cuanto los nuevos museos irán incorporando un amplio programa cultural y educativo a base de cine, talleres, conferencias, mediación o intercambio de estudiantes malagueños y rusos, entre otras actividades”.

         Para el director, señor Luna, “la oferta que se ha querido y que se busca es de primer nivel, por ello se ha entrado en contacto con lo mejor. Y esto no es sólo para turistas o visitantes, sino para que se beneficien especialmente los malagueños. De entrada ya lo han hecho las personas que trabajan en los museos, a quienes se les ha preparado para ello.”.

         El Museo Ruso comprende una oferta de arte de cien obras que van,  desde los iconos del siglo XVI al siglo XX, con pintura figurativa fundamentalmente y de algunas piezas de las vanguardias, como una abstracción de Kandinsky o dos cuadros de Malevich. "La Época Diágilev" es el título de la exposición temporal hasta el mes de julio de 2015, que narra en pintura y fotografías, la vida del célebre oroductor teatral ruso.

El Centre Pompidou Málaga es la segunda filial del museo de París con el mismo nombre, y primera fuera de Francia. Está situada en el nuevo edificio denominado El Cubo y comprende obras de los vanguardistas históricos y radicales del siglo XX.

Algunos se preguntan por qué no se ha buscado una filial del Museo del Prado, algo que muchos visitantes extranjeros buscarían con ahínco, pero al parecer, nuestra primera pinacoteca no está por su expansión de sucursales, quizás por las experiencias difíciles sufridas para recuperar el denominado “Prado disperso”. El posible temor a los “Fuenteovejuna” locales ha podido desalentar el ánimo de los responsables del Prado. Una pena, porque de poco sirven los depósitos y almacenes abarrotados y no expuestos de los grandes museos. Tanto la Tate Gallery, como e Centre Pompidou entre otros han optado por la expansión y eso es un enriquecimiento para todos.


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