Julia Sáez-Angulo
La invisibilidad de las mujeres–la transparencia dicen
algunas- ha sido una realidad a lo largo de la historia y se hace especialmente
patente en el arte. El grupo “Generando Arte” ha querido hacer una llamada de
atención en este campo, con la exposición “Permitido Indagar”, en la sala San
José de Carracciolos de la Universidad de Alcalá de Henares.
Cincuenta
artistas presentan cien obras en el precioso espacio de la iglesia, hoy
desafecta al culto, en homenaje, diálogo o contradicción con artistas
contemporáneas vivas que tienen una dilatada trayectoria plástica.
Pintura,
escultura, dibujos, vídeos, instalaciones… dan pie a un amplio discurso sobre
esa presencia o ausencia, sobre el necesario reconocimiento y/o homenaje.
Por
citar sólo algunos ejemplos: María Jesús Aragoneses, -comisaria junto a Concha Mayordomo- hace un reconocimiento en
su instalación a Yoko Ono, partidaria de la silent
revolution de las mujeres en la sociedad.
Asución Bau dialoga con el trabajo de la anciana
escultora valenciana Josefina Miralles (entrevistada en La Mirada Actual); Rosa Gallego ha hecho un magnífico dibujo a
lápiz y grafito con toques de rotulador blanco sobre la Gran Vía, homenaje a la
fotógrafa Ouka Lele; Natha Piña ha querido jugar con la iconografía de Yayoy
Kusama, con sus lunares, sus círculos representación del mundo en una
fotografía. Marisa Ruiz-Zorrilla homenaje a Marisa González; Patricia Fridman,
a la gran escultora Marisa Campoy; Susana Ribuffo, a Annie Leibovitz…
Interesante
el video “Cotas de infelicidad” (2014) de Esther Pérez de Eulate, donde una
gran mancha roja ocupa un amplio mapa. La misoginia global se extiende de modo
dramático. O el de Jasmina Merkus con su obra titulada “Noche”, en que el firmamento
de estrellas posa sobre un cuerpo femenino.
Buen
espacio continente, buen montaje, dispersión de materiales y géneros. Una buena
exposición, muy didáctica con cartelas amplias y explicativas junto al título.
¿Alguna objeción? Quizás haber centrado más los reconocimientos a las artistas
españolas y dejar las extranjeras para otra de sus exposiciones, como la
próxima que se llevará a cabo en la Residencia de Estudiantes.
Las artistas
desaparecidas también pudieran tener otro capítulo.
Quiero felicitar y agradecer este artículo y comentarios sobre la exposición "Permitido Indagar".
ResponderEliminarUn abrazo,
Patricia Fridman