Obituario. Beatriz Guttmann binomio inseparable con Vilafamés

Miranda D´Amico

17.11.14.- Castellón.- Vilafamès y Beatriz Guttmann  durante muchos años han  sido un binomio inseparable para mí. Falleció el 23 octubre de 2014  en Castellón.

Nosotras fuimos entre las primeras artistas que arreglamos y habitamos las antigua casas, peculiares casas de escaleras y rocas de este pueblo del Maestrazgo. Allí, con la guía de Vicente Aguilera Cerní y con otros conocidos artistas, iniciamos a dar vida al primer museo de Arte Contemporáneo del País Valenciano.

   Eran los años 70. Beatriz ya con tres hijos, tuvo el espíritu de estudiar y de doctorarse en la Universidad de Bellas Artes de Valencia. Ella era incansable en su deseo de búsqueda de un lenguaje pictórico personal.

 Castellón donde vivía en aquellos años, era una ciudad mas bien cerrada, por esto yo admiraba la inquietud de Beatriz que la inducía a salir del propio entorno Yo solía atribuir a sus orígenes vieneses tanta voluntad y firmeza.

Nos encontrábamos mas durante el verano, En su  terraza o en la playa de Benicasim, con largas conversaciones sobre arte, sobre nuestros trabajos y exposiciones visitadas o las que pensábamos realizar…

Ella en particular iniciaba una extensa serie de exposiciones en España y fuera, a veces tan insólitas como la que realizó en la Rusia comunista, atravesando varios países hasta llegar a la mítica Samarcanda.También hicimos algunos viajes juntas, como miembros de las Asociaciones Española e Internacional de Críticos de Arte, AECA y AICA, en los congresos de Renne y de Zagreb.

  

Beatriz, además, ha sido siempre muy activa en el mundo de la comunicación del arte con artículos en periódicos y revistas.  Durante un periodo tuvo también un programa de radio en su ciudad de Castellón.

Fue muy  eficiente  como conservadora del Museo de. Vilafamés,  siempre dispuesta a colaborar. El libro que publicó en el 1995, a partir de su tesis sobre el Museo de Vilafamés, muy bien documentado,  interesante y válido, para conocer la historia de  un  Museo  de arte insólito por entonces…

Beatriz y yo hemos compartido trabajos, viajes, fiestas, sonrisas enfados, criticas y dudas… todo con una amistad sincera. Ahora para ti, Beatriz,  estos recuerdos.

Te echamos de menos.

                                                             .