Julia Sáez-Angulo
Se diría
que tiene un toque francés. Vailima, el nombre de un elegante Salón de Té y restaurante en la
calle Salustiano Olózaga, 18, muy cerca de la Puerta de Alcalá en Madrid. Clara
Piqueras y su hija Juana son las dueñas del caprichoso establecimiento.
Situado
en céntrica zona de funcionarios y despachos, en Vailima se puede ver un
público joven y activo de jóvenes directivos en la mañana y el atardecer. Sus
precios, como corresponde a los tiempos, razonables.
Luminoso
y encalado en sus paredes de ladrillos, Vailima ofrece sabrosos desayunos cada
día y selecto brunch en los domingos. La repostería, es un placer: además de
bollería, tratas y cakes. No falta el brownie o el pastel de zanahoria y el de
arándanos. Los macarons Vailima son una especialidad.
El plato
del día se ofrece único y abundante por diez euros cada día; la selección de
salados es a base de jamón de York y queso Edam, tomate, lechuga y mayonesa;
bacon ahumado y huevo; canónigo y queso de crema al eneldo; pollo al curry,
ensalada nicoise…
Las
tablas son jamón ibérico puro de bellota, de quesos franceses, camembert al
calvados… Cada semana Vailima selecciona los mejores quesos afinados en su
justo punto, para degustarlos con la cesta de pan de masa madre, mermelada de
tomate y mermelada de higos.
El servicio, atento y refinado. Vailima cuenta con una terraza al aire libre.
Más información
www.vailima.es
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