“Una habitación propia” y dinero son lo necesario para que se avengan mujer y creatividad

Clara Sanchís

Julia Sáez-Angulo

            “Una habitación propia” y dinero son lo necesario para que se avengan mujer y literatura, según dejó dicho la escritora británica Virginia Woolf en su célebre conferencia en la Universidad de Oxford en 1928. Del texto se desprenden las dos grandes lacras que siguen pesando como espada de Damocles sobre las mujeres: la pobreza y la misoginia global.

            María Ruiz ha hecho una versión para la escena, un largo monólogo que se representa en la sala María Zambrano del Teatro Español, con la actriz Clara Sanchís como intérprete. La obra, dirigida por la propia María Sanchís es una reposición en la que la representada Virginia Woolf imparte una conferencia ante mujeres y, ciertamente, la mayoría de las personas espectadoras eran mujeres.

            La mitad de la humanidad fue marginada en la historia, durante siglos y milenios, sin que nadie, ningún parlamento haya pedido perdón por ello, aunque se hayan pedido perdón a judíos o armenios, por poner algún ejemplo. Incluido el código de Napoleón consideraba a la mujer como una menor. Las leyes de sucesión en la Corona han sido sálicas o semi sálicas, esta última una contradicción por cuanto a falta de varón sí servía una mujer.

            La caracterización de Virginia es acertada, con atuendo de época en peinado, vestimenta y medias de costura. La  interpretación es correcta; el estilo combativo es contraproducente, el humor y la ironía son la salida, si bien la actriz adopta con demasiada frecuencia un estilo niñoide y gestual de graciosa, que puede poner algo nervioso al espectador y le resta seriedad al discurso. Clara Sanchís toca el piano bien, para cambiar o subrayar las situaciones  y esto es sin duda un acierto.

            La conferencia de Woolf se pronuncia al poco de lograr el voto en Gran Bretaña, o la posibilidad de poseer y administrar bienes, todo es muy reciente. Las humillaciones de facto continúan: no poder pisar el césped de la Universidad, no poder consultar la célebre biblioteca de Oxford, ciudad camuflada de Oxbridge en el texto, disponer de un condumio más modesto en el College femenino…

            Virginia Woolf fue una gran escritora británica, probablemente la mejor del siglo XX en su país, al decir de Borges. Su conferencia “Una habitación propia” es un hito y un texto fundamental en la historia de promoción y los derechos de las mujeres, una historia que como dice la autora no se sabe si son más importantes los avances logrados o las resistencias masculinas debidas a esa misoginia global porque creen que la promoción de la mujer los descabalga de su podio universal. Noles falta razón, la promoción de la  mujer avanza al ritmo de su tesón e inteligencia, pero no debe bajar la guardia.

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