Una original y novedosa antología de
los cuentos del gran autor portugués presididos por la perversión y la
locura
· Se reúnen cinco
relatos, uno de ellos inédito en español, y los demás sustancialmente
transformados por cambios y adiciones de las ediciones portuguesas más
recientes.
· Aparece en esta
antología desde el escritor deudor de Edgard Allan Poe al más brillante y
original Pessoa de "La hora del diablo".
L.M.A.
08/05/18
.- MADRID .- Fernando Pessoa es uno de los escritores más importantes de la
literatura universal, y nos ha legado una obra literaria proteica, que no
deja de crecer y modificarse con el tiempo, como la de los grandes clásicos
modernos. Esta antología, subtitulada "Relatos de la monomanía y la
perversidad", y traducida y presentada por Manuel Moya, pretende reunir
de forma coherente, y lo más definitiva posible, algunos de sus cuentos
maestros que abordan una temática central de sus escritos, la perversión,
la locura y el sinsentido.
«Allí
donde cales en la obra de Pessoa disfrutarás de horas plenas y de las
burlas de lo profundo… Cualquier fecha será excepcional si algún traductor
o editor lleva a los lectores un regalo tan generoso», decía George
Steiner
Se ofrecen aquí piezas fundamentales de la narrativa corta de Pessoa: el
poetiano «La puerta», «Los ojos o el Teatro de Ximéra» ( inédito en español
hasta esta versión), «Marcos Alves», «La educación del estoico» y «La hora
del diablo» (un relato sustancialmente modificado en esta edición).
Presentamos, por tanto, versiones nuevas y definitivas de cuentos ya
conocidos, alguno inédito hasta ahora, y otros con sensibles cambios de
extensión —mediante la ordenación y adición de fragmentos—, hasta ofrecer
una textura novedosa del acercamiento pessoano a la sinrazón.
«La tensión entre
razón y locura que comienza en esos tempranos años se convertirá en una de
las constantes
vitales y acaso en uno de los rasgos más evidentemente pessoanos. Pessoa se
autoubica a lo largo de toda su existencia en los linderos de la razón y la
locura. Raciocinio y locura serán los dos estrechos márgenes que marcarán
para bien y para mal una biografía y una obra en las que sobrevuela una
punzante y acaso reprimida sexualidad, una abierta atracción por tánatos y
un cada vez mayor impulso nihilista y autodestructivo. Su manera de luchar
contra estos impulsos que en él parecían ser naturales fue a través del uso
tal vez excesivo de la razón. Pocas veces hemos
leído a un autor más aferrado al racionalismo que Pessoa, pero pocas veces
hemos asistido a un hombre que bascule tantas veces en y desde los linderos
de la locura. »
dice Manuel Moya en la introducción.
Y
todo ello de la mano de Manuel Moya, experimentado traductor del clásico
portugués y autor, para esta ocasión, de un sabroso prólogo donde intenta
responder a tantos interrogantes en cuanto a la estos escritos: "¿Estaríamos
acaso ante una mera curiosidad íntima por los oscuros abismos de la mente?,
¿formarían parte estas lecturas obsesivas de lo que él entendía como una
rigurosa formación literaria en la que el conocimiento clínico de la mente
humana le parecía indispensable?, ¿se trataría más bien de una manera de
autoconocimiento o autoanálisis?". Y aclara Moya: "Muchos de sus
cuentos, sobre todo los llamados de raciocinio, se convierten en tratados
sobre fenómenos y anomalías psíquicas. Es obvio que pudieron influirle las
lecturas de Poe, Morrison o los escritores victorianos de suspense, todas
ellas «sobrecargadas» de angustia psíquica, que acaso comenzara leyendo por
un mero interés intelectual, pero es más que posible que esa incertidumbre
vital, unida a la crónica desconfianza en sí mismo, ya le estuvieran
marcando el camino incluso en las lecturas. Lo cierto es que durante toda
su breve existencia (murió con 47 años) siempre estuvo atento al sismógrafo
psíquico y le debemos decenas de confesiones en las que se incluye uno u
otro autodiagnóstico psiquiátrico."
Fernando Pessoa (Lisboa, 13 de
junio de 1888 - 30 de noviembre de 1935), poeta y escritor portugués,
considerado uno de los más brillantes e importantes de la literatura
mundial y, en particular, de la lengua portuguesa. De día, Pessoa se ganaba
la vida como traductor. Por la noche, escribía poesía y prosa con la voz de
diversos autores ficticios y heterónimos, diferentes en estilo, modos y
voces. Así nos dejó auténticos monumentos literarios como las obras
poéticas de Alberto Caeiro, Álvaro de Campos y Ricardo Reis, o la
descomunal prosa del Libro del desasosiego de Bernardo
Soares. Además, es autor de un conjunto muy disperso y amplio de cuentos
donde se incluye su célebre «El banquero anarquista». Murió por problemas
hepáticos a los 47 años en la misma ciudad en que naciera, dejando una
enorme obra inédita que todavía suscita análisis y controversias.
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Muy interesante e inteligente el artículo sobre el gran enigmático Pessoa.
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