-->
Julia Sáez-Angulo
09/08/18 .- MADRID .- De Toledo y
con barba, su figura se me antojó salida del cuadro “El entierro del Conde
Orgaz” de Domenicos Theotocopulis, más conocido como El Greco. Cuando empezó a
hablar lo imaginé cantando gregoriano ante unos cantorales sobre un facistol de
la catedral toledana. No iba descaminada, porque él pertenece al coro Columbae , dirigido por Asunción
Paniagua, donde la voz grave del toledano es un activo en el mismo. Al
presentar un libro de Rogelio en la Asociación de Escritores, dije que tenía
“voz de facistol” y algunos asistentes se alarmaron creyendo que le estaba
llamando el aumentativo de fascista.
Para los que no conocen el
significado preciso de la palabra facistol, les contaré con el Diccionario de
la Real Academia Española que significa: atril
grande en que se ponen el libro o libros para cantar en la iglesia y que, en el
caso del que sirve para el coro, suele tener cuatro caras que permiten colocar
varios volúmenes.
Rogelio Sánchez Molero (Ajofrín,
Toledo, 1966) nació en un pueblo con título de Villa desde el siglo XV y Rollo
de Justicia, con Escuela de Música y cuna de grandes músicos como Jacinto
Guerrero, compositor de zarzuelas; Demetrio Ballesteros; Antonio Molero Sánchez, Fernando Moraleda o la soprano Josefina
Meneses, lo que pudiera explicar su buen sentido musical y su voz para entonar
canciones medievales y corales. En la Casa de Galicia improvisó un dúo junto a
Carmen Palomero, dirigido por Paco Recuero, que sorprendió gratamente a los
presentes.
De su familia, Rogelio cuenta la historia de su abuelo, que compró con esfuerzo una mula para trabajar en el campo, pero al poco, unos milicianos se la requisaron para la República en 1936. Su padre lloraba de niño al ver llorar a su abuelo por la pérdida de aquella mula.
De su familia, Rogelio cuenta la historia de su abuelo, que compró con esfuerzo una mula para trabajar en el campo, pero al poco, unos milicianos se la requisaron para la República en 1936. Su padre lloraba de niño al ver llorar a su abuelo por la pérdida de aquella mula.
Rogelio Sánchez Molero se gana la
vida como abogado y asesor jurídico en una Fundación de Toledo donde reside,
pero siempre a caballo –sin caballo, pero en AVE o en automóvil- con Madrid,
para seguir su vida cultural y, no nos engañemos, para ver y estar con Carmen
Palomero, incipiente narradora, que reside en la capital de España. Ambos
ensayan disciplinadamente todas las semanas en el coro común, que actúa de vez
en cuando en foros y auditorios.
La creatividad más íntima e intensa
del jurista está en la poesía, (una vez me reprochó un periodista italiano que
jurista era Justiniano y los de altura y que los licenciados en Derecho somos
solo eso: licenciados en Derecho, y que en español se utiliza con mucha
ligereza lo de jurista). Pues bien, el jurista tiene varios poemarios en su
haber, que ha presentado oportunamente ante el público toledano y madrileño,
haciendo recitales de los mismos con su voz de facistol en la Asociación
Española de Escritores y Artistas, AEAE, en la Tertulia “A Orillas de Ávila” y
en espacios de cultura de Toledo.
Los títulos de los poemarios de
Rogelio rezan así, entre otros: Memorial
de ausencias (2011), Surge la luz (2017),
editado por la Asociación Española de Escritores y Artistas… También escribe
cuentos y relatos breves –la diferencia entre unos y otros bien merece una
conferencia- y ha sido coordinador de la revista literaria Troquel, que dirige Carmen Silva, así como de libros de relatos. Actualmente
se trae entre manos uno, fuera de temporada, titulado provisionalmente: Cuentos de Navidad 2018, que saldrá el
próximo mes de diciembre, si Dios quiere, y que promete competir con Charles
Dickens, por la calidad de sus firmas y la cualidad de sus narraciones.
Su criterio es tan valioso y
ecuánime, que se cuenta con él en certámenes y jurados literarios. Desde que
hizo una presentación magistral de un libro en la Casa de Galicia, le llueven
solicitudes de diferentes escritores para hacerlo con sus libros, si bien el sabe administrar
con equilibrio su vida de jurista, de literato y de músico/cantor. Este año
obtuvo el Diploma de Honor Mayte Spínola por su trayectoria cultural. De
Rogelio se espera todavía mucha creatividad artística, por de pronto ya tiene
otro poemario en marcha y la intención de recopilar sus relatos en un solo
libro.
Más información
http://www.ajofrin.es/rogelio-sanchez-molero/
http://www.ajofrin.es/rogelio-sanchez-molero/
Rogelio firmando un libro (Foto: Rosa Gallego)
Amigos, es un honor contar cn vosotros en la gran familia que somos Troquel. Mi felicitación a los dos por vuestro bien hacer en pro de la cultura.
ResponderEliminarUn beso
May
Tanto Rogelio como su presentadora en esta "MIRADA ACTUAL" constituyen valores que enriquecen el quehacer cultural contemporáneo en nuestro entorno, por ello nos congratulamos todos los miembros de Troquel. !Enhorabuena! a ambos.
ResponderEliminarRamón L. Fernández y Suárez