Ignacio Gómez de Liaño y Salvador Dalí (1978). Foto museo Reina Sofía
Julia Sáez-Angulo
9/5/21.- Madrid.- Volver a la poesía de adolescencia es una manera de buscar las raíces. El escritor Ignacio Gómez de Liaño (Madrid, 1946) lo lleva a cabo en su libro “Poemas de un adolescente (1960-1965), publicado por Turpin, editores de la calle Alondra.
En la presentación del libro, el autor va siguiendo los pasos de esa poesía suya preliminar en el tiempo, en la que se descubre los primeros pasos y balbuceos, la poesía surrealista, la concreta y espacialista, la experimental… Poemas públicos y aéreos en los Encuentro de Pamplona, actuaciones y experimentos en Ibiza y vuelta a la poesía discursiva.
Uno de sus primeros poemas en el tiempo dice:
Al atardecer,
cuando el crepúsculo hace
Su equilibro cromático
en el perfil de los montes;
cuando los ríos muerden estrellas
que sangran entre rumores
cuando el día se ha cansado
de trepar por la ladera del monte…
siento un hueco en el paisaje de mi alma
y acaso leve mi mirada colgando
de horizontes siderales…,
acaso.
(hacia 1960 o 1961)
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