Julia Sáez-Angulo
31/12/23 .- Madrid.- Tiene la gentileza de citarnos a todos sus amigos a las 12 del mediodía del 31 de diciembre de cada año, para pasar del viejo al Nuevo Año, en su ático del madrileño Barrio de las Letras. Allí podemos ver, todavía en el estudio/taller, los recientes retratos que la anfitriona, Covadonga Leyva, granadina afincada en Madrid, ha pintado con su inconfundible y elegante estilo hiperrealista.
En el caballete, el retrato del poeta y filósofo Ilia Galán Díez, con gola cervantina y un soberbio tatuaje en el brazo izquierdo, que le hizo la propia pintora para la ocasión. Arte efímero, que se llama. Ilia no está este año en la recepción, supuse que andaba en su palazo toscano. No en balde él es autor del libro “Artes escritas en la Toscana”. Tampoco estaba el pintor Pedro García Molano, que lo está en su Córdoba natal. Como en Madrid vivimos los que nacimos en otra parte, al llegar las vacaciones, la mitad de los empadronados desaparecen de la Villa y Corte, para dejar espacio a los numerosos visitantes que petan la Puerta del Sol y aledaños.
Pero en la casa/estudio de Covadonga Sagarrúa Leyva (Almuñecar, Granada, 1956) -Covadonga Leyva para el arte- estábamos los que teníamos que estar: desde Luis F. Cifuentes, profesor de Literatura en Harvard, hasta el escritora Lucía Echebarría, pasando por el barman y escritor Alberto Gómez Font (su libro de cuentos “Cócteles tangerinos” va a por su tercera edición); Isabel Cantos, cantante de ópera y comentarista de arte; Jorge Sobredo, diplomático; Fernando Mier, Técnico Comercial del Estado; María José Valor; el arquitecto Luis Fernández; el empresario de espirituosos Carlos Morante; Sofía, Sara, el diseñador guineano John… Nos hicimos fotos de familia por separado -no sé por qué-, mujeres y hombres. Solo Covadonga hizo de nexo de unión.
Converso con la rusa Yulia Zorina, que va a ser comisaria de la próxima exposición de Covadonga Leyva. Ella es arquitecta de interiores y entendida en pintura. Está estudiando español en Madrid desde hace un tiempo y ha hecho un buen tándem con la pintora de los retratos hiperrealistas simbólicos, como le gusta de calificarlos. En realidad, son retratos con atributo, algo que viene desde los griegos, cuando representaban a Júpiter con un rayo, a Palas Atenea con un búho o a dios Hermes con el caduceo y alas en los pies y a Apolo, con la siringa. O en la iconografía cristiana: a Santa Lucía con los ojos en una bandeja, a Santa Águeda con los pechos cortados o a todos los mártires con la palma del martirio en la mano. Cada santo tiene su atributo por el que se le reconoce.
Los soberbios retratos de Covadonga Leyva, casi siempre sobre fondo negro acarrean un atributo que define al personaje o un elemento ornamental que lo caracteriza, a veces no exento de originalidad o extravagancia, como los sombreros con un ave en la copa.
El retrato de Ilia Galán va de caballero de la rosa, gola de escritor del Siglo de Oro y tatuaje con señorita danzante de plumas, para añadir un detalle "canalla". El retrato de García Molano, con una inquietante lagartija en el hombro, gorro negro, gafas oscuras de sol y escorzo notorio en la pose Los autorretratos de Covadonga Leyva van con tocado de papel burbuja o con sombrero de faisán. La pintora cree que el retratado en su pintura ha de aparecer como “personaje”, mucho más interesante, que en un retrato áulico, académico o formal, convencional y aburrido. Siempre de acuerdo con el modelo, naturalmente. Los retratos de los ángeles templarios se las traen por bellos y sobrecogedores.
Su pintura: el oleo, porque es pigmento eterno.
De Tánger a las Órdenes Militares
Lo bueno de una recepción es pulsar el tono y contenido de las conversaciones. Con Alberto Gómez Font hablamos de Tánger, esa ciudad marroquí, hermanada con Granada, donde comparte un pie a tierra con el escritor Farid Othmán Bentría Ramos y que visita con frecuencia. Tánger conserva todavía la plaza de toros que los españoles construyeron allí, durante el Protectorado. En la norteamericana Universidad New England de Tánger, se hizo recientemente un homenaje al arabista y profesor Bernabé López García, en el que participó su alumno Gómez Font. La amistad USA-Marruecos tiene una fuerte raíz, en el hecho de que Marruecos fue el primer país en reconocer a los Estados Unidos en 1777, y Washington le escribió al sultán Mohammed III en reconocimiento al tratado de paz y amistad firmado en Marrakech en 1787. Lo tienen muy a gala. Las primeras legaciones a Marruecos se establecieron en Tánger y más adelante pasaron a la capital, Casa Blanca. Y como el mundo es un pañuelo Alberto y yo descubrimos tener un amigo común, el historiador Carlos Sánchez Tárrago, autor del libro “El millón de Larache”.
Otro corrillo de invitados comenta las ventas de edificios a capitales venezolanos, argentinos, mexicanos... sobre todo en los barrios de Salamanca y Chamberí. Ellos suben los precios y pagan, a veces, por encima de mercado. Del asombro de los iberoamericanos en España por la enorme seguridad ciudadana, en comparación a sus países, que los niños puedan ir solos al colegio, salir por la noche sin miedo...pero como decía uno de los diplomáticos: "ellos tienen otra alegría de vivir, aunque para algunos la vida no tiene valor ninguno"
Con Carlos Morante hablamos de Ordenes Militares, Cofradías, Capítulos, Cortes de Honor… Existe una buena pléyade de todas ellas en España. Él pertenece a los Caballeros de la Orden de Malta, Orden hospitalaria, que dedica sus ingresos, principalmente a enfermos. Despende de la Santa Sede. Ahora la Orden de San Lázaro está muy en boga en Madrid, si bien, ésta no está sujeta al Vaticano y resulta más ágil. En la procesión del Corpus Christi de Toledo desfilan casi todas estas entidades con sus vistosas vestes. Son numerosos los prohombres iberoamericanos que vienen a España y desean ingresar en estas instituciones de honor.
Cada corrillo es un tema, un asunto de interés o de actualidad. Las estampidas del cava se escuchan de vez en cuando y alguien pasa rellenando las copas aflautadas o abiertas, art decó a la vieja usanza, por las que se escapan más rápidamente las burbujas. Covadonga Leyva se desliza etérea con su caftán negro y floreado entre los invitados. Me consta que ella tiene una buena remesa de caftanes en su vestuario, llegados de los más exóticos países de Oriente. A mí, por el contrario, Papá Noel me trajo una hopalanda de Austria, también elegante para estas fiestas.
Más información
Covadonga Leyva con el diseñador guineano John
Foto de damas, con Carlos Morante
Fotos de caballeros asistentes a la convocatoria de Covadonga
Foto de damas, con Carlos Morante
Fotos de caballeros asistentes a la convocatoria de Covadonga
ResponderEliminarNadia Chaviano : Mis mejores deseos querida Julia en el nuevo año 2024.
Mi profundo agradecimiento por permitirme estar actualizada con tus publicaciones.
Felicidades de corazón por la inmensa labor que realizas en pro del arte y la cultura. Mil gracias! Un abrazo!
Queridos amigos
ResponderEliminarSimplemente decir que me gusta el arte hiperrealista y me han gustado las imágenes. Nuevos saludos,
Raúl
Julia, gracias por tu trabajo, gran artículo, foto. Le deseo mucho éxito creativo en el nuevo año!
ResponderEliminarEstimada Julia,
ResponderEliminarAdemás de felicitarte la entrada de año 2024, agradecer estar incluida en el correo de tu blog. Es un verdadero placer leer tus artículos en los que encontramos personajes desconocidos y esta reunión anual que podría sentirse extemporanea, aunque más actual que nunca. Fuerte abrazo.