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miércoles, 2 de abril de 2025

Exposición: Terrazas del Edificio Nouvel Museo Reina Sofía (Nuevo Espacio Expositivo)


Desde el 2 de abril de 2025   



  

Mayca NÖIS

    01/04/2025.- Madrid.- “Un orden distinto. Geometría utópica y arte cinético en las terrazas del Nouvel” bajo este título se exponen tres obras escultóricas de Jesús Rafael Soto, Martín Chirino y Edgar Negret, nunca antes mostradas en el Museo y que forman parte de su Colección con lo que se reabren las terrazas del edificio Nouvel. Lo que constituye una nueva sala de la Colección con un tipo de escultura inédita en las lecturas de los fondos del Museo. Este espacio expositivo es uno de sus más emblemáticos, tras una reordenación, que ahora incluye estas obras.

Suponen e ilustran la fuerza transformadora que supuso en el espacio público la escultura geométrica de los años sesenta y setenta del siglo XX del Museo. Es a finales de los años sesenta cuando el minimalismo dotó a la escultura de un repertorio formal basado en las formas geométricas elementales al mismo tiempo que dotaba de una nueva manera de entender la relación entre una obra de arte y sus espectadores con una apertura a su participación e interacción. Unos experimentos con la escultura geométrica que fueron fundamentales para construir una nueva visión utópica de la ciudad contemporánea y de sus transformaciones sociales alejadas de la apariencia en el presente con los residuos urbanos de la cultura corporativa que acompaña a los grandes rascacielos de muro cortina.

La nueva sala, al aire libre, presenta con estas obras la sensibilidad que supuso el trabajo de los grandes maestros tanto en España como en América Latina

En este caso son:

Jesús Rafael Soto (Ciudad Bolívar-Venezuela 1923/Paris(Francia)2005) uno de los artistas fundamentales del siglo XX en América Latina, con aportaciones clave desde los años cincuenta al arte cinético y a las nuevas visualidades que emanaron de la abstracción geométrica, con la vibración óptica como experiencia central. Exhibe “Penetrables” (1982) una de sus series esenciales que comenzó a realizar a finales de los años sesenta y que está realizada en aluminio y hierros pintados y tubos flexibles de PVC.

El propio artista definía “Ya no ha y espectadores, no hay sino participantes”(1983).Sometida su obra a los cambios en el paisaje de Madrid; diferentes situaciones lumínicas del día, las estaciones, y  posición en la terraza se estima que cumple con creces las expectativas del artista.

Edgar Negret (Popayán-Colombia 1920/Bogotá-Colombia 2012) La obra “Vigilante rojo” (1979), aluminio esmaltado y atornillado, vuelve al Reina Sofía, donde nunca se había expuesto, tras un periodo de exposición temporal en depósito en el Tribunal de Cuentas Europeo en Luxemburgo. Ha sido sometida a un largo proceso de restauración coordinado por el Departamento de Restauración del Museo

La escultura nos muestra, dentro del estilo de madurez del artista, un ensamblado que deja al descubierto pernos y tuercas en un acoplamiento que revela la operación de organizar cuerpos y acoplamientos. Cubiertos por  una capa uniforme de pintura industrial mate roja.

En la serie de “Los Vigilantes” a la que corresponde la obra es una de las más emblemáticas de su producción. Sus diez elementos columnarios en desplazamiento parabólico en los que cada una de las piezas verticales gira treinta grados respecto a la anterior para dar lugar a cinco estructuras gemelas contrapuestas con lo que la escultura tiene una secuencia genética que se aprecia al rodearla.

El escultor  vasco Jorge Oteiza expresó con respecto a Negret con sus experimentos escultóricos geométricos como uno de los exponentes fundamentales de la plástica en América Latina.

Martín Chirino (Las Palmas de Gran Canaria 1925-Madrid 2019) Uno de los fundadores del grupo El Paso, colectivo de vanguardia del arte contemporáneo que rechazaron las estéricas realistas a favor de una nueva materialidad dentro de la que Chirino en sus esculturas al paisaje y formas primigenias se ha merecido la consideración de ser uno de los escultores europeos de mayor éxito internacional en las últimas décadas del siglo XX.

“Mediterráneas” /1971) chapa de acero inoxidable pulida y soldadura, con acabados industriales, casi automovilísticos. Pertenece a la serie en el  número decimo de las colecciones del Edificio Chrysler de Nueva York o el Museo Middelheim de Amberes. La expuesta ingresó en 1975 procedente de la colección del predecesor del Museo Reina Sofia,el Museo Español de Arte Contemporáneo.

En el título se rememoran y remiten a viajes a Italia y Grecia. La estructura al ser expansiva con volúmenes huecos desplegados con su ritmo pendulante invaden el espacio. Adopta la forma de un paisaje, en acabado cromático que trasfiere la cualidad acuática que es una de las características en la condición artística del artista canario.

La vista panorámica y singular de la capital infieren al nuevo espacio expositivo una interacción especial para la contemplación recreativa con el arte. La nueva reordenación de la Colección permanente culminará en 2028 con el propósito de articular una colección sólida, perpetuamente revisable, a partir de los fondos del Museo.

viernes, 11 de febrero de 2011

América fría, “La Abstracción Geométrica en Latinoamérica (1934 -1973)” en la Fundación Juan March



“América fría”
La Abstracción Geométrica
en Latinoamérica (1934 -1973)
Fundación Juan March
Del 11 de febrero al 15 de mayo de 2011




Julia Sáez-Angulo


Dos acusaciones históricas, no siempre justas, han caído siempre sobre la abstracción geométrica: su ornamentalidad fría y su falta de compromiso. Muchos de los artistas geométricos vienen o van del diseño hacia el diseño y éste ha acabado formando parte de los museos de arte contemporáneo; respecto al compromiso, hay que decir que es sobre todo de la persona y no necesariamente de su arte.

Dicho esto pasemos a la exposición de la Fundación Juan March, que tomando el todo América para la sola parte de Latinoamérica –al revés de lo habitual- presenta 300 obras de 64 artistas latinoamericanos, además de los cinco europeos que tuvieron su contacto con los del movimiento geométricos de la zona: Josef Albers, Alexander Calder, Victor Vasarely, Max Bill y Ludwig van del Rohe.

Arte geométrico, sistemático, constructivo, arte frío, concreto de borde duro... denominaciones tangenciales para un movimiento, estilo o espíritu, en el que la fría geometría de borde duro marca de modo importante casi todas las obras.

La muestra de la Fundación March, comisariada por Osbel Suárez, ha querido establecer su propio discurso y no el de un coleccionista, como la que vimos el pasado año en Es Baluard de Palma de Mallorca. Tiene características singulares como es la de aportar la presencia de la arquitectura a base de hermosas fotografías, principalmente de la Brasilia de Niemeyer, o la Universidad de Caracas de Villanueva. En la muestra hay obra procedentes de colecciones privadas como la de Cisneros y también de los Museos Reina Sofía, MOMA, Georges Pompidou, entre otros.

Las fechas que abarca “América fría” están definidas por dos viajes de retorno de Europa a América: 1934,cuando Joaquín Torres-García regresa a Montevideo, y 1973, año de la vuelta del venezolano Jesús Rafael Soto, para la inauguración de su museo en su ciudad natal, Ciudad Bolívar. Javier Gomá, director de la Fundación Juan March y Manuel Fontán, director de Exposiciones, presentaron la muestra.

El discurso de los geométricos cubanos –el comisario lo es- se enfatiza porque ha sido descuidado en el pasado. Dos mujeres, Loló Soldevilla y Carmen Herrera destacan junto a las grandes piezas de José Mijares. A algunos nos hubiera gustado ver alguna obra de Waldo Balart (Cuba, 1931), residente en Madrid, con edad y obra suficientemente clave para estar dentro.

Se echa de menos al grupo colombiano de gran interés, con Negret como uno de los cabezas de fila importante, al que vimos en su día en el Palacio de Velázquez del parque del Retiro madrileño. El espléndido fotógrafo Leo Matiz representa a Colombia con soberbias vistas de la arquitectura.

Jesús Soto, sol entre las estrellas del arte geométrico, brilla con demasiadas piezas quizás, pero siempre es un gusto ver sus juegos ópticos de gran imaginación y belleza. Las mujeres están presentes en el movimiento abstracto geométrico y, además de las citadas, cabe mencionar a Mira Schendel, María Freire, Ligya Clark –espléndida brasileña- o Judith Lauand. Quedan bastantes por incluir.

Un buen trabajo de investigación
El enorme catálogo de la exposición responde a la línea de investigación rigurosa a que acostumbra últimamente la Fundación Juan March en sus publicaciones y da una información exhaustiva sobre movimiento latinoamericano de la abstracción, donde el grupo argentino Madi fue uno de los más relevantes. Los ensayos del catálogo no tienen desperdicio.

Se echa de menos al contemplar la exposición la nacionalidad y el año de nacimiento –y muerte en su caso- de algunos artistas. A medida que se pasea por el espacio, se querría saber de qué país es el autor, qué edad tiene y si sigue en este mundo, pero la cartela no informa de ello.

La sede de la Fundación Juan March se ha agrandado y acoge bien las 300 piezas si bien algunas son de pequeño formato, en respuesta a seguir el discurso más que la obra rotunda o espectacular de los artistas. Alguna pequeña objeción como la suciedad o falta de restauración de una obra de Espinosa, algo que choca en un arte en el que lo impoluto se requiere como requisito sine qua non.

En suma, una gran exposición para los que amamos este arte geométrico frío, que resalta el color y la forma por encima de la sensualidad de la naturaleza vegetal, si bien la geometría se encuentra muy visible en las manifestaciones minerales de la naturaleza y late por necesidad en la construcción de las cosas y del arte.











domingo, 11 de abril de 2010

Los sitios de la abstracción latinoamericana en Esbaluard de Palma de Mallorca


Los sitios de la Abstracción Latinoamericana
Museo de Arte Moderno y Contemporaneo Esbaluard
Palma de Mallorca
Del 27 de marzo al 20 de junio







Julia Sáez-Angulo


Se trata de la colección de Ella Fontanals-Cisneros especializada en constructivismo y cinetismo de Latinoamérica. Se expone en el Museo de Arte Moderno y Contemporáneo Esbaluard en Palma de Mallorca. La muestra está comisariaza por Juan Ledesma.

Con este movimiento geométrico, que tiene sus raíces en la Escuela del Sur en Uruguay de Joaquín Torres-García, se trataba de modernizar el arte del continente sur americano, después de unas manifestaciones plásticas figurativas anteriores centradas fundamentalmente en la literatura y la historia.

Argentina, Uruguay, Brasil y Venezuela dio nombres importantes como Julio Le Parc, Horacio Copola en fotografía o Cruz Díez, Jesús Rafael Soto, Helio Oiticica, Leon Ferrari, Mira Schendel, Lygia Clark, Lucio Fontana, Gego, Cesar Paternosto o Lygia Pape.

Un total de 132 obras de 66 artistas, datadas entre 1930 y finales del siglo XX, con especial hincapié en las décadas doradas del arte constructivista y cinético, las de los 50, 60 y 70. A partir de aquí el arte neo-geo se presenta con cierta periodicidad en el panorama artístico.

“Dibujo sin papel” es una sugerente obra de Gego en la que una serie de alambres manipulados y colgado en la pared, dibujan bajo la luz un dibujo de sombras, que trae a la memoria el mito griego del nacimiento de la pintura.

La colección de Ella Fontanals-Cisneros es realmente un gran colección en sentido estricto porque está articulada en torno a una idea central lo que la potencia frente a los conjuntos eclécticos de obras de arte como la cercana de Serra en el Museo Esbaluard.

El arte de Latinoamérica va ganando predicamento como lo demuestran las exposiciones de la colección Davos en Zurich, la mexicana en el Banco Bilbao Vizcaya y ahora la de Esbaluard. Lo importante es que no se haga gueto con este arte.