sábado, 26 de diciembre de 2009

Antonio Alvarado, artista electrónico, expone en el Museo de la Ciudad

Julia Sáez-Angulo

       26.12.09  .- Madrid .-  Antonio Alvarado, artista cibernético, plástico y performer, con una obra abarca desde instalaciones, esculturas y música electroacústica a piezas concebidas para ordenador o para Internet, ha expuesto recientemente en una muestra colectiva en el madrileño Museo del Ciudad. Estas son sus respuestas a la entrevista concertada:

¿En qué consistió la exposición?
-Es una exposición de obras de arte sin una unidad ni temática de ni de formato. Participan artistas de distintas tendencias y con distintos conceptos de la creación artística. El único nexo que tienen es el deseo de mostrar su obra y a la vez ayudar económicamente a La Koma, ong que se dedica a la rehabilitación de drogadictos.

¿Qué otras exposiciones ha llevado a cabo?
-Exposiciones que puedan tener una importancia para mí, destacaría Art Tech Media. Puerto de la Cruz de Tenerife, octubre de 2008. Los códigos del bosque, individual en el Centro de la Villa de Móstoles. Las Opiniones del Paisaje en Camargo y El Ojo Atómico, en Madrid, 2005. Y Convergencias en el CAB de Burgos en 2004.

¿Qué aspectos del arte informático trabaja?
-Trabajos con todo tipo de medios que puedan estar a mi alcance. Tanto impresión digital como animación o instalaciones interactivas. Utilizo microprocesadores, sensores de todo tipo, proyectores, monitores, etcétera, También suelo crear las bandas sonoras de mis obras mediante la manipulación de sonidos captados del mundo real o producidos mediante los más diversos medios.

Colaboraciones y asesoramientos
¿Sólo o en equipo?
-Depende, según la dificultad de la obra, suelo solicitar la colaboración o el asesoramiento en la elaboración de software y de hardware a ingenieros electrónicos. Siempre en la parte técnica. No obstante en ocasiones he realizado obras colectivas con otros artistas, sobre todo en el campo de la electrónica.

¿A qué aspira en su manifestación artística?
-Aspiro a ayudar al progreso de la humanidad

¿Qué ideas, conceptos o filosofía le mueven?
-El arte es solo una forma de expresar el conocimiento; el arte siempre acompaña, a veces se adelanta, a los acontecimientos y descubrimientos científicos. En este sentido el arte es una ciencia con diferentes ramas, los grandes artistas siempre han mostrado en sus creaciones un conocimiento profundo de los descubrimientos científicos y de las ideas filosóficas de su tiempo. En este aspecto, busco abrir puertas que muestren al espectador la posibilidad de ver facetas de la realidad que desconocía y ampliar sus horizontes vitales de conocimiento y por tanto de gozo. El arte no busca interpretar la realidad sino desvelar aquello que permanece oculto, igual que la ciencia.

Lo suyo ¿es el arte del futuro?
-No lo creo, vivo y creo en el presente, con los medios del presente, no tengo ni idea de que arte se realizará en el futuro.

Maestros del arte electrónico
¿Cuál es el gran maestro español y foráneo del arte informático?
No se puede decir que haya un solo maestro dentro del arte electrónico, sobre todo porque es una faceta del arte que se encuentra en sus inicios y porque tiene muchas especialidades pero podemos hablar de Myron Krueger, Bil Viola, Jodi y dentro de España, Antoni Muntadas, Antoni Abad y naturalmente Lugán.

¿Qué opina de Lugán?
-Lugán es amigo mío y es una excelente persona, es uno de los padres del arte electrónico en España. Actualmente los dos formamos, con otros cinco artistas, un colectivo que se llama FASE. No puedo tener una visión objetiva.

¿Qué proyectos tiene en un futuro inmediato?
-Estoy trabajando en diversos vídeos, y estoy desarrollando los prototipos de una instalación interactiva controlada por placas Arduino, es un proceso lento por los costes y por las dificultades en el tema de la programación por lo cual estoy colaborando con distintos ingenieros. También estoy trabajando en un proyecto conjunto con el colectivo FASE, pero no puedo desvelarlo.

¿Qué libro está leyendo y qué música le interesa más?
-Realmente leo poco y casi todo son libros de programación o de electrónica. Actualmente tengo en manos un libro sobre Visual C++, pero es realmente mas un manual que un libro de lectura. Me interesa todo tipo de música que no sea machacante. En general prefiero la música clásica y la de vanguardia, entendiendo como música de vanguardia aquella que utilizando las herramientas actuales, desarrolla posibilidades sonoras inéditas o transforma modos ya conocidos dándoles una vuelta de tuerca. Aquello que, en un tiempo, fue llamado música ligera me interesa como medio de pasar el rato sin darle mayor importancia y rara vez la escucho en soledad y en casa. Autores contemporáneos pueden ser Luís de Pablo, Philip Glass o Luciano Berio, por citar alguno.


*****

Antonio Alvarado
alvarado@antonioalvarado.net
www.antonioalvarado.net

Su obra electrónica ha sido seleccionada para numerosos festivales internacionales como Art Tech Media. MAEM, Camargo Cibernético, 404, Ciberart, Confluencias, RFF4, Festival Internacional de Electroacústica, Arts Electrónica o Avam Musica y reconocida con la concesión de becas y ayudas a la producción por parte de entidades como el MediaLabMadrid. Su obra plástica ha sido expuesta tanto en una veintena de exposiciones individuales como en varias ferias internacionales y requerida para numerosas muestras colectivas. Es fundador de La Mano de la Luna, de La Factoría virtual y de FASE. Es también comisario de exposiciones y festivales.

Su obra se encuentra en colecciones privadas y públicas de España, Argentina, Holanda, Italia, Eslovenia y EE.UU.

• http://www.antonioalvarado.net/textos/curriculum/curriculum.htm

viernes, 25 de diciembre de 2009

Tecla Portela traduce y edita al escritor portugués Raúl Brandao



Las islas desconocidas
Raúl Brandao
Ediciones del Viento
La Coruña, 2009
Los pescadores
Raúl Brandao
Ediciones del Viento
La Coruña, 2009




Julia Sáez-Angulo

      25.12.09 .- MADRID .- (1867 – 1930) es uno de los nombres clave de la literatura portuguesa y la escritora y traductora María tecla Portela Barreiro ha llevado a cabo la traducción y edición de la novela “Las islas desconocidas”, así como “Los pescadores”, ambas publicadas por Ediciones del Viento en 2009.

Para Tecla Portela (Tomiño. Pontevedra, 1956) ambos libros contienen “las más bellas páginas del impresionismo literario escrito en portugués –no sólo marcaría un hito en la Literatura portuguesa sino que consagraría las Islas –y su desconocimiento- presentándolas como un lugar lejano y csi inaccesible –algo más que una cuestión de distancia física- en el que el color toma cuerpo y lucha con la luz –filtrada, tamizada, “colada” por nubes o por vientos en una orgía de cromatismo que deja a uno inebriado...”

Brandao comenzó muy joven a escribir en diversos géneros como narrativa, teatro, artículos... y nunca lo dejó pese a que se dedicara a la carrera militar. Entre sus obras destacan “Humus” (1917), la más célebre, “El-Rei Junot”(1912) y “Los pescadores” (1926).

“Era un contemplativo” dice Portela de Bandao, “y nunca pudo dejar de ser un pintor... (¡él, que había llegado a ser alumno del gran Columbano!) –pero de sus impresiones visuals cra cuadros cargados de trazos que van de lo más delicado a los más agresivo, de los tonos blanquecinos y perlados al negro arrancado a la roca que se funde en un charco de azul”.

Las Azores y Madeira al descubierto

En “Las islas desconocidas” narra su viaje por las Azores y Madeira en 1924 y con este libro se conocieron mejor entre los portugueses, brasileños y franceses. El libro, que se publica por vez primera en español, es una joya de aquella mirada intensa del escritor a primeros del XX.

Por parte en el libro “Los pescadores”, Raúl Brandao cuenta cosas insólitas como la que sigue: “Hace cincuenta años que no se recuerda aquí a nadie que haya muerto de accidente en el mar. A veces la ola vuelca el barco, envuelve a los hombres y los deja sin sentido. Cuando los sacan por muertos, fuera del mar, los meten en sal como a las sardinas, “para apretarles los huesos”. Es gran remedio, dicen. El año pasado hubo uno que, después de estar en sal durante cuarenta y ocho horas, todavía volvió en sí.”

Tecla Portela, una de las mejores traductoras del portugués al español y viceversa, es a su vez escritora y ha publicado un libro de poemas.


jueves, 24 de diciembre de 2009

El Convento de las Comendadoras será restaurado

La Comunidad de Madrid ha firmado un convenio de colaboración con el Ministerio de Fomento por el que se financiará la primera fase de las obras de consolidación estructural de la iglesia, zaguán y torres del Convento de las Comendadoras de Santiago (en la ciudad de Madrid). El importe total del convenio asciende a 3.727.034 euros, comprometiéndose cada una de las partes a aportar el 50%, 1.863.517 euros.

Las actuaciones incluyen el control arqueológico, trabajos de consolidación de la estructura portante de la cubierta de la cúpula central, del entramado de madera de las cubiertas de los cuatro ábsides, de forjados y conexión con muros perimetrales, de encuentro entre murosperpendiculares y fachadas, así como la reparación de fisuras existentes, el ábside del altar mayor, y el acabado con revoco tradicional en toda la parte alta y exterior de la iglesia. El plazo para la ejecución de las obras es de 16 meses.

El Convento de las Comendadoras de Santiago data del siglo XVII y fue construido por los hermanos Manuel y José del Olmo, por encargo deMariana de Austria, para albergar a las monjas de la Orden de Santiago, las Comendadoras. En 1774 Carlos III encargó a Francisco Sabatini la construcción de un nuevo edificio que vino a completar la urbanización de la manzana. Lo más destacable del monasterio es la Iglesia, constituida por una planta de cruz griega, con las extremidades en semicírculo, y en elcentro, una cúpula sobre pechinas. El inmueble fue declarado Bien de

Interés Cultural en la categoría de Monumento en 1970, por lo que goza de la máxima protección jurídica prevista por la Ley de Patrimonio Histórico de la región.

Plan director para la restauración del conjunto monumental

Desde 1986, la Comunidad ha invertido más de 5,3 millones de euros en actuaciones de rehabilitación de esta joya del siglo XVII, que fue el primer convento, el primero construido en Madrid y el único conservado en su total integridad.

Además, en el año 2000 la Dirección General de Patrimonio Histórico de la Comunidad redactó el Plan Director para la Restauración del Conjunto Monumental de las Comendadoras de Santiago. Desde entonces, se reforzaron las intervenciones de rehabilitación en el inmueble y se aunaron esfuerzos para salvar este conjunto conventual madrileño, que sigue ocupando hoy en día una manzana completa del casco antiguo.

Todas las intervenciones, incluidas las que se realizarán en el marco del nuevo convenio, don gestionadas por Patrimonio Histórico. Con éste, ya son tres los convenios que la Comunidad de Madrid firma con el Ministerio de Fomento durante el año 2009: el convenio para la financiación de las obras de consolidación estructural y restauración delas Casas de Oficios de la Plaza de Fiestas del Palacio, en Nuevo Baztán, por un importe total de 883.698 euros, y el convenio para la financiación de las obras de recuperación paisajística de la llanura oriental – Parque de la Memoria del Castillo de Manzanares el Real, por un importe de 558.138 euros.

El Nacimiento del Cristo, Gran Noticia para la Humanidad



Julia Sáz Angulo


Dios ha nacido entre los hombres hecho Niño. Cristo se abajó por amor a los hombres e hizo acampada entre ellos, según hermosas palabras de la Sagrada Escritura, que se rezan cada día en el Ángelus. Dios, Uno y Trino, el gran misterio de la Santísima Trinidad se hizo Hombre entre los hombres en la Segunda persona. Cristo, verdadero Hijo de Dios y verdadero hijo de María al tomar la carne en su seno virginal según nos cuenta el Nuevo Testamento. La llena de gracia, la sin pecado, fue concebida sin pecado original y el Espíritu Santo la fecundó con su sombra, según cuenta el Catecismo cristiano. Cristo es verdadero Dios y verdadero hombre con cuerpo y alma, como señala el credo del Símbolo Atanasiano.

La Navidad celebra el nacimiento de la encarnación del Señor en una virgen llamada María, junto a un varón reputado como padre: José. Cristo es de la tribu de Judá (no la más pequeña como señaló el profeta Miqueas) y de la estirpe de David. Es sacerdote eterno según el orden del Melquisedec (un personaje vetero-testamentario que no tiene genealogía ni antes ni después, como el mismo Dios). En esto Cristo se aparta de la clase sacerdotal de los levitas, descendientes de la tribu de Leví.

Con la presencia de Cristo se cumple la promesa de la salvación por parte de Dios que amó primero a los hombres desde la creación. Primero al decir en el “proto-evangelio” que una mujer aplastaría la serpiente del maligno; después con su promesa a Nó, renovada de manera personal con Abraham y sus descendientes; seguidamente con Moisés y el pueblo de Israel, escogido para llevar a cabo una misión. Con la llegada del Hijo se culmina la plenitud de los tiempos.

UN FUNDADOR DE IGLESIA QUE ES DIOS

Ningún fundador de una religión o una iglesia ha dicho de sí mismo que era Dios, salvo Jesucristo. Ahí radica su gran distancia con los otros. Para pertenecer al Consejo de las Iglesias Cristianas hay que creer en la divinidad de Cristo, como Segunda Persona de la Trinidad Santísima; a aquellos que sólo creen en Él como profeta no se les considera cristianos.

Católicos, ortodoxos, anglicanos, luteranos, calvinistas... todos creen en la divinidad de Cristo y todos celebran su nacimiento glorioso en el que ángeles, pastores y reyes van a adorarle como lo que es: el Mesías prometido, el Señor. Dios hecho Niño amoroso entre los hombres.

En la Navidad vemos a Cristo Niño nacido en un pesebre de Belén y en este hecho se traduce la cátedra de su enseñanza: nacer en una familia, con humildad y pobreza y sobre todo con la callada promesa de su futura Palabra, Pasión y Muerte para redención del género humano.

miércoles, 23 de diciembre de 2009

Cultural Rioja: Jornadas de Poesía en Español 2009

Undécimas Jornadas de Poesía en Español
Ediciones Cultural Rioja
Libro y DVD
Logroño, 2009


Julia Sáez-Angulo

Cultural Rioja celebra cada año una Jornadas de Poesía en Español, en las que además de poetas nacionales participan hispano-americanos. En el último certamen participaron los cubanos Rafael Alcides (1933) y Jorge Luís Arcos (1956); el colombiano Darío Jaramillo (1947); el argentino Alejandro Bekes (1959) junto a Andrés Trapiello (1953).

Paulino Lorenzo, coordinador de las XI Jornadas de Poesía en Español, correspondientes a 2009 escribe en el prólogo del libro que recoge los versos de los citados poetas:
“Con la segunda venida a Logroño del poeta Rafael Alcides, completamos el repaso a su poesía que difícilmente se podría encasillar bajo la ya agotada etiqueta del conversacionalismo cubano”.

Rafael Alcides llevó a cabo un recital poético en la Casa de América en Madrid, con motivo de su viaje a las Jornadas de Poesía en la Rioja.

De José Luís Arcos señala que “sus versos vienen a enriquecer la tradición poética del veintisiete español, trasladando sus acertijos, mojándolos en la hierba del barroco cubano personalizado en Lezama, e infundiéndoles nueva vida y misterio”.

De Colombia y Argentina

Sobre los poemas de Andrés Trapiello señala Paulino Lorenzo que en ellos “se reúne una mezcla de artesanía y cordura inusual en estos tiempos cuando renegar de la tradición es una de las nuevas modas de la poesía”.

De Darío Jaramillo Agudelo informa el prologuista que pertenece a la “generación sin nombre, nacidos entre 1940 y 1950, según los denominó el crítico Álvaro Burgos, dentro de un país, Colombia, en el que se producen “cíclicos incendios literarios”.

Finalmente del argentino Alejandro Bekes, subraya el libro publicado por la editorial Pre-Textos en España, bajo el título de “Si hoy fuera siempre”, compendio de muchos años de entrega a la poesía, una dedicación que siempre ha sido valiente y a contrapelo de cualquier moda mayoritaria en su país.

El libro se acompaña de un DVD con las voces de los vates que intervinieron en estas undécimas Jornadas de Poesía.

25 de Diciembre, Historia en Roma y en el Cristianismo




Dolores Gallardo  López

El día 25 de diciembre fue una festividad celebrada en Roma sólo en los últimos siglos del Imperio. Para entender correctamente el significado de ese día hay que hacer un poco de historia.

Los días más cortos del año son los que acompañan al solsticio de invierno. A esos días los romanos tradicionalmente los llamaron angusti dies:  “días estrechos, cortos” “días intranquilos”.

La inquietud, la intranquilidad, que en tiempos muy antiguos (y a veces en los actuales) provocaba en el ser humano la continua disminución de la duración de la luz se expresa bien en lengua latina por la raíz *ang-. Esta raíz forma el verbo ango, “estrechar” y también “angustiar”; el substantivo angor, “opresión” o “angustia”; el adjetivo angustus, “angosto” o “estrecho”.

 De acuerdo con todo ello, hay un tiempo en el año -entonces y ahora- en el que la luz es  escasa (angusta según la terminología arriba indicada);  los días en que ello sucede los romanos los llamaban angusti dies y  acompañan al solsticio de invierno. Estos días constituyen una crisis de la naturaleza, crisis que acaba el 21 de diciembre, el día del solsticio de invierno o bruma.
En lengua latina el solsticio de invierno era llamado bruma o bruma dies. Bruma dies es contracción de brevissima dies (brevissima dies, brevima dies, bruma dies).

El 21 de diciembre el calendario romano primitivo celebraba la fiesta llamada Divalia o Angeronalia. Ese día uno de los pontífices ofrecía a la diosa Angerona un sacrificio.

 El nombre de esta  antiquísima diosa  está formado con la misma raíz *ang-, de la que acabamos de hablar;  también está presente esa raíz en angustiae (término  que  en latín  tiene dos acepciones:  en sentido temporal indica un espacio de tiempo breve sentido dolorosamente -“estar angustiado”, “sentir angustia” decimos nosotros todavía- y en sentido local  designa  un espacio  estrecho: un desfiladero, por ejemplo).

 La arcaica diosa Angerona  -de la cual, como de tantas otras deidades autóctonas, ni siquiera conocemos su aspecto pues no se ha conservado ninguna imagen- acabó por desaparecer cuando los romanos adaptaron sus dioses a los del mundo griego y por eso hoy día la interpretación  de la naturaleza de la diosa cuya festividad se celebraba el día del solsticio de invierno se hace difícil. Sin embargo su festividad se mantuvo en el calendario romano antiguo.  Desde G. Dumézil muchos eruditos creen que el oficio de la antiquísima diosa Angerona (algunos la llaman “diosa de la angustia”) sería proteger al sol del peligro que representan los días tristres y oscuros que acompañan al solsticio, pero es difícil mantenerlo.

Objetivamente el solsticio o bruma es sólo un punto en la curva del tiempo, pasa y continúa el ciclo anual del sol.
RENACIMIENTO ANUAL DEL SOL

Una vez finalizados los días más cortos y tristes del año, los angusti dies, pasado el solsticio de invierno, el sol entra en el signo zodiacal de Capricornio y se inicia un nuevo período en el que lentamente los días se van alargando. Ese hecho se puede considerar una especie de renacimiento anual del sol.

Es una de las razones por las cuales a finales del siglo III d.C. (en el 274 d.C). el emperador Aureliano eligió el 25 de diciembre como dies natalis o día de nacimiento del dios llamado Sol Invictus.

CULTOS SOLARES EN ROMA

Además del culto tradicional a Helio, otros cultos solares de origen oriental fueron conocidos en Roma: por ejemplo el dios sirio Helibágalo (introducido en Roma por el emperador que ha pasado la historia con ese mismo nombre) y  Mitra,  dios de una importante religión de origen persa.
Dios Sol Invictus
 Sin embargo fue  el emperador Aureliano (de procedencia iliria, gobernó del 270 al 275) quien introdujo en Roma y en el imperio el culto oficial al dios Sol, con el nombre de Sol Invictus.

 Se dice que lo hizo para agradecer la ayuda que creía que el dios Sol le había prestado para derrotar de los rebeldes de la ciudad de Palmira, que amenazaban en oriente la integridad del imperio. En realidad fue una actuación política:

El emperador con esta actuación -independientemente de que creyera o no que el dios lo había ayudado- buscó establecer una especie de sincretismo religioso que, de alguna manera, pudiera convirtirse en una fuerza integradora que, quizás, diera algo de cohesión a un Imperio cada vez mas expuesto a la desintegración.

Creyó que el culto al dios Sol serviría para este fin pues era practicado por muchos pueblos de la parte oriental del Imperio y, sobretodo, estaba muy extendido entre los diversos ejércitos imperiales (la religión solar de Mitra se había infiltrado con gran éxito entre los soldados de todos los ejércitos del Imperio).

   Sol Invicto se convirtió  desde entonces en protector del Emperador.

    Desde Aureliano -acuñó monedas con la inscripción  “El dios Sol, dueño del Imperio romano”- encontramos con cierta frecuencia en monedas la efigie de Sol Invicto. También en el arco de triunfo del emperador Constantino aparecen representadas estatuillas del Sol Invicto llevadas por portaestandantes.

El emperador Constantino  estableció que  el dies solis -día del sol-  fuera el día de descanso  semanal en el  mundo romano.

El 27 de febrero del 380 el emperador Teodosio con el edicto de Tesalónica acabó con lo que quedaba de la religión romana y proclamó el cristianismo como única religión. Tres años después, en el 383, el dies solis fue rebautizado como dies dominicus, nuestro "domingo".

25 DE DICIEMBRE EN EL CRISTIANISMO

Así pues desde el año 274 d.C. el día 25 de diciembre el Estado y la Religión romana celebraban oficialmente día del nacimiento, o natividad, del dios llamado  Sol Invictus.

 Se cree que después (probablemente en el siglo IV,  ya bien establecida la festividad de Sol invicto)  algunos cristianos comenzaron  por su cuenta a festejar la festividad del 25 de diciembre en su propio contexto religioso: conmemoraban el nacimiento de Jesús considerado "Sol que ilumina el mundo".
Algunos textos avalan la interpretación de Jesús como Sol:

“Nos visitará el Sol que nace de lo alto, para guiar nuestros pasos por el camino de la paz” Lucas,1,78.
“Sol de Justicia que traerá en sus rayos la salvación”, Malaquías,4,2.

Poco a poco la celebración del 25 de diciembre fue entrando en las tradiciones de la Iglesia hasta que finalmente en el siglo V quedó institucionalizada para todos los cristianos.

martes, 22 de diciembre de 2009

Antonio Muñoz Molina novela en "La noche de los tiempos", los momentos anteriores a la Guerra Civil



La noche de los tiempos
Antonio Muñoz Molina
Seix Barral Biblioteca Breve
Barcelona, 2009 (958 pags)




Julia Sáez-Angulo


Miembro de la Real Academia de la Lengua, Antonio Muñoz Molina es un gran escritor. Un narrador ameno con una obra interesante y sucesivamente premiada a sus espaldas, como son el Premio Planeta (1991), el Premio de la Crítica y el Nacional de Literatura, ambos en 1988. Ahora su última novela, con el título de “La noche de los tiempos” fabula una hermosa historia de amor que transcurre en los comienzos y vísperas de la última guerra civil española.

Un arquitecto español, Ignacio Abel, que huye de España en octubre de 1936 llega a Pensilvania, después de dejar atrás a su esposa e hijos en una serie de avatares que pasan por Francia y otros lugares. Sus recuerdos de una historia de amor clandestino con una mujer le llevan a fraguar una nueva historia.

Algunos personajes reales como el Doctor Negrín, José Bergamín o Moreno Villa transitan por el argumento y articulan una trama sugerente y aleccionadora de unas vidas que evocan aquellos días duros y difíciles para España, para muchos españoles que habrían de soportar una contienda de tres años.

UN ESCRITOR ECUÁNIME QUE SABE PLASMAR LAS EMOCIONES

Antonio Muñoz Molina (Úbeda. Jaen, 1956) describe posturas y fanatismos, de los que más de una vez a hablado en sus artículos de prensa. Sabe de la intolerancia que marcaron ciertas ideologías o personajes en un país que para algunos iban directamente al exterminio mutuo. Pensamientos totalitarios que trataban de imponerse en uno u otro bando en paralelo a ideologías fascistas y comunistas que regían las élites del poder.

Pocos escritores como él han sabido denunciar las posiciones autoritarias de unas actitudes políticas que no garantizaban a la ciudadanía las libertades de pensamiento y acción. Desde la izquierda, ha sabido llamar la atención a cierta izquierda reciclada, sobre todo la procedente del comunismo, como partido autoritario y exterminador de libertades y personas.

La novela “La noche de los tiempos” es una bella e intensa historia de amor que se inserta en un tiempo difícil para unos hombres y mujeres de España que se vieron apresados en el fuego de la intolerancia de unos políticos débiles que no sabían ejercer su poder con ecuanimidad ni firmeza y un alzamiento militar que lideró a la derecha y se instaló de lleno a través de un general vencedor.

La buena prosa, la bella escritura de Muñoz Molina lleva de la mano al lector por unas páginas que desbordan datos y emociones, sentimientos y descripciones veraces. Sólo este escritor podría ofrecernos una novela como ésta porque siempre le ha interesado la posición de las dos Españas y la muestra con respeto y equidistancia.


"El color de los dioses" en Alcalá de Henares

J.S.A.



Cuatro tomos de El Quijote del año 1819, un libro de la vida

de Cervantes y otras publicaciones, textos legislativos, manuscritos,

retratos de personalidades de la época y varios paquetes con objetos aún

sin identificar. Y prácticamente todo en un buen estado de conservación.

Es el contenido de la cápsula temporal que los madrileños de 1834

prepararon meticulosamente con motivo de la colocación de la primera

estatua de Cervantes en Madrid (en la Plaza de las Cortes) y que

insertaron en su base a la espera de que generaciones futuras la

encontraran y abrieran.

Esta semana, 175 años después, la Comunidad de Madrid autorizó

la extracción de la caja, que se había detectado recientemente con motivo

de las obras municipales en dicha plaza, y ayer se procedió a su apertura

en el Museo Arqueológico Regional, situado en Alcalá de Henares, cuna

de Cervantes, sacando a la luz este tesoro que ha dormido ajeno al

ajetreo de los madrileños durante cerca de dos siglos.

El vicepresidente y consejero de Cultura y Deporte de la Comunidad

de Madrid, Ignacio González, comprobó hoy en el museo el contenido de

la cápsula, un cofre de plomo herméticamente sellado y que guardaba

objetos relacionados con el homenaje a Cervantes y el contexto histórico

en que fue erigida la estatua.


Inventario singular

Tras realizar un primer análisis del contenido, los arqueólogos de la

Comunidad de Madrid han identificado los siguientes elementos:

- Diario de Aviso de Madrid de 1834, que envuelve un libro calendario

manual y guías de forasteros para el año 1834 (Imprenta Real).

- Cuatro tomos de El Quijote del año 1819 (Edición de la Imprenta Real

y de la Real Academia).

- Estatuto Real para las Cortes del Reino.

- Libro de la vida del General Mina.

- Un manuscrito envuelto en papel de trapo.

- Libro de la vida de Cervantes.

- Ocho pequeños paquetes envueltos en papel.

- Dos libros envueltos y lacrados.

- Papel enrollado con textura de trapo que envuelve seis láminas del

año 1831 con diversos retratos, entre ellos de Isabel II niña y de don

Manuel Martínez Varela, que fue el mecenas que costeó el

monumento.

- Periódicos de la Gaceta de Madrid.

Una caja con un completo sistema de conservación

Los restauradores del Laboratorio del Museo Arqueológico Regional

procedieron, ayer, 17 de diciembre, a las 17:00 horas, a la primera

exploración de la cápsula del tiempo. Tras separar la tapa de la caja

exterior de plomo, se apreció que ésta contenía en su interior otra caja

minuciosamente encajada de vidrio en un óptimo estado de conservación.

A primera vista, y a través de la tapa de cristal de esta segunda

caja, se pudo observar superficialmente algunos de los contenidos: entre

ellos, un envoltorio de papel donde –casualmente- se podía leer la línea

“el jueves a las cinco de la tarde”, dentro de unas recomendaciones de

ocio de un periódico de la época.

Los técnicos procedieron al levantamiento de la caja interior sin

mayor dificultad y a la apertura de la misma mediante un sistema de

bisagra en el lateral. La primera comprobación al abrir la urna fue que los

contenidos de la caja, en su mayoría de papel, habían sido impregnados

originalmente con un químico tóxico en prevención del posible desarrollo

de insectos y microorganismos. Este producto aún impregna los

contenidos de la cápsula, dotándolos de cierta humedad, despidiendo un

fuerte olor e implicando riesgo de toxicidad si fueran objeto de exposición

pública. Sin embargo, tanto la cuidada estructura formada por las cajas de

plomo y vidrio, como la utilización de este químico, han favorecido que los

contenidos de la cápsula se presenten a día de hoy en un excelente

estado de conservación.



Las arcas o cápsulas del tiempo

El acto de instalar un arca que contenga objetos del momento en que se

realiza la inauguración, construcción o instalación de un edificio, escultura,

etc. se ha dado desde la antigüedad. Los romanos, por ejemplo,

colocaban monedas en la cimentación de aljibes, termas, foros… y

pueblos pre-romanos creaban pozos fundacionales (siglo IV-I antes de

Cristo).

Otros ejemplos de cápsulas del tiempo encontradas en Madrid son:

La fundacional del Congreso de los Diputados (con paleta de plata,

constitución y monedas), la fundacional del Asilo de Lavanderas en

Príncipe Pío, y la fundacional de la apertura de la Gran Vía.

El monumento a Cervantes en la Plaza de las Cortes

La escultura de Cervantes, donde se ha hallado el cofre misterioso, fue la

primera dedicada a un personaje civil que se instaló en Madrid. Se

encargó al prestigioso escultor neoclásico Antonio Sola y su atuendo es de

la época, en la mano derecha porta un rollo de papel (escritor) y en la

izquierda una espada (militar). En el proyecto participaron los más

insignes artistas del momento, poniendo de relieve la importancia histórica

del acontecimiento. Pasados unos años desde su inauguración, la estatua

se desplazó unos metros respecto de su ubicación inicial y, por lo tanto,

también de la base original, basamento que siguió conteniendo el arca

fundacional encontrada ahora durante las obras supervisadas por la

Dirección General de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid.



El color de los dioses llega a España

Tras comprobar el contenido de la cápsula del tiempo de Cervantes,

González, acompañado por el nuevo embajador en España de la

República Federal de Alemania, Reinhard Silberberg, inauguró la

exposición El color de los dioses, que se podrá visitar en el Museo

Arqueológico Regional hasta el próximo 18 de abril de 2010. La muestra

da un giro de 180º a la visión tradicional de la escultura antigua: las

estatuas que representaban a los dioses y héroes clásicos no eran

blancas, sino de ricos y expresivos colores.

Esta exposición, que se exhibe por primera vez en España y está

compuesta por unas 40 reproducciones de famosas esculturas y relieves

clásicos que recrean la policromía reconstruida por los estudios científicos

realizados al respecto, así como por otras tantas piezas originales

prestadas por los principales museos españoles (Arqueológico Nacional,

Nacional de Arte Romano de Mérida, Arqueológicos de Sevilla, Córdoba y

Cádiz, etc.).

Gracias a recientes técnicas, ha sido posible reconstruir las trazas

de color encontradas en las esculturas, lo que ha permitido realizar una

serie de sorprendentes reproducciones de famosas esculturas clásicas

acercándolas a su color original. Estas reproducciones han sido realizadas

por un equipo multidisciplinar dirigido por Vinzenz Brinkmann, profesor de

las universidades de Frankfurt y Bochum, conservador de las colecciones

de escultura clásica de la Liebieghaus Skulpturesammlung de Frankfurt y

miembro de la Junta Directiva de la Stiftung Archäeologie de Alemania,

productora de las reproducciones y promotora de la itinerancia de la

muestra.

En la exposición se entrecruzan dos líneas argumentales. Por un

lado, la idea contemporánea de la escultura en mármol blanco frente al

color de la estatuaria antigua. Y, por otro, la línea comisariada por el

profesor Manuel Bendala, -catedrático de Arqueología de la Universidad

Autónoma de Madrid y comisario de la parte española de la muestra-, que

indaga en los orígenes de la estatuaria hispana coloreada que, desde los

ejemplos orientalizantes de época prerromana, fluye hasta épocas

medievales y modernas, y está relacionado con el uso de areniscas,

estuco, pintura y el gusto orientalizante de enjoyar.

Bendala y Brinkmann, que es comisario de la parte internacional de

la exposición, asistieron a la inauguración de hoy, así como Ulrike Koch-

Brinkmann, restauradora responsable de las reproducciones, y Michael

Albert, presidente de la Stiftung Archäeologie.

La muestra ha visitado, entre otros museos, la Gliptoteca de Munich,

los Museos Vaticanos, la Gliptoteca Ny Carlsberg de Copenhague y el

Museo Nacional de Arqueología de Atenas.


Visitas guiadas, talleres infantiles y publicaciones

Como complemento a la exposición, los fines de semana se han

organizado visitas guiadas (sábados) y talleres infantiles (domingos) a las

12h. Estos segundos están dirigidos a niños de entre 7 y 12 años. Para

ambos casos, es imprescindible la reserva previa en el teléfono 91 879 66

66 hasta cubrir el cupo de 20 personas por grupo y actividad.

También se ha editado un catálogo integrado por diferentes artículos

de investigadores que han trabajado en la reconstrucción de las estatuas,

así como por los textos de especialistas que se han ocupado de la

coloración en la escultura antigua en España.

lunes, 21 de diciembre de 2009

El belén, tradición navideña secular


Dolores Gallardo López


Una de las tradiciones navideñas más enraizadas de estos días es la exposición en iglesias, instituciones y casas particulares del belén. Aunque ha decaído en los últimos años por la invasión de los árboles de Navidad y Papa Noel como elementos decorativos de los hogares, aún sigue siendo una importante seña de identidad de la Navidad española.

Pero ¿cómo surgió el belén? ¿desde cuándo se usa en España? A esas preguntas intentaremos dar respuesta en la líneas que siguen.
En primer lugar hay que decir que el belén es una invención italiana.
Se suele considerar que S. Francisco de Asís montó el primer belén. Dice la historia que San Francisco, tras peregrinar a los Santos Lugares, celebró la Eucaristía en la nochebuena de 1223 en una cueva del pueblo italiano de Greccio, próximo al convento del Santo. Que allí preparó una representación viviente del Nacimiento, donde ya estaban incluídos una mula y un buey. Otra leyenda piadosa añade que, debido al frío, se colocó un muñeco para representar al niño Jesús y que en la hora en que la tradición fija el nacimiento de Jesús el muñeco empezó a llorar.
En todo caso la representación animada del santo de Asis es considerada como el origen del belenismo.

La referencia más antigua que tenemos de belén construido con tallas es el que realizó Arnolfo di Cambio (Florencia 1289), arquitecto de la Catedral de Florencia. Arnolfo di Cambio talló unas figuras en mármol blanco, parte de las cuales han llegado hasta nuestros días y se conservan aún en Santa María la Mayor de Roma.

En el año 1330 en la iglesia de Santa Clara de Nápoles se instaló por primera vez un verdadero belén. Fueron también las monjas clarisas las que propagaron la costumbre de poner al niño Jesús en un pesebre/cuna adornado con ricas vestiduras.
Durante los siglos XIV y XV las iglesias italianas se llenaron de hermosos belenes fijos (los primeros belenes quedaban instalados, no se ponían y quitaban), como los de Andrea della Robia en el Duomo de Valterra.

A partir del Concilio de Trento (1545-1563) el tema de la Navidad tomó un nuevo impulso instalándose paulatinamente en la época navideña belenes en las iglesias, algunos representaban únicamente a la Sagrada Familia, otros añadían a los Magos y pastores y otros gran número de personajes.
El primer belén familiar del que tenemos noticia fue el de la duquesa de Amalfi, en 1567. Constaba de 107 figuras.
El auge de la escultura, la incorporación del espacio escénico y de los detalles introdujeron el belén en las casas señoriales. De estas pasó a las casas de los burgueses y de aquí al pueblo, produciéndose un gran desarrollo en los siglos XVII Y XVIII. Con el barroco se impulsó de forma definitiva la realización de belenes.


NÁPOLES
En el siglo XVIII fue máximo florecimiento del belén. Nápoles se puso en cabeza de todas las ciudades europeas y creó una escuela incomparable en cuanto a belleza, detalle y meticulosidad de las figuras. Comenzaron a construir figuras articuladas, confeccionando figuras tipo maniquíes: se realizan a base de enrollar estopa y tiras de lienzo en un armazón de alambre y la cabeza, manos y pies eran piezas de terracota; el maniquí así construido se vestía después con ricos trajes de la época, confeccionados en seda, terciopelo o raso.
El rey Carlos VII de Nápoles y Sicilia se interesó mucho por el arte y lo impulsó decididamente, la aristocracia secundó la idea y ello hizo que proliferaran extraordinariamente los belenes y que surgieran importantes imagineros belenistas, como Gori, Celebrano, Vaccaro, etc.

Carlos VII de Nápoles y Sicilia era el tercer hijo del rey de España Felipe V y el primero que tuvo su segunda esposa, la culta princesa italiana Isabel Farnesio. Isabel Farnesio consciente de que sus hijos no heredarían el trono de España (había otros dos hijos del rey antes) hizo todo lo posible por recuperar la influencia española en Italia y colocar a sus hijos.
El mayor de sus hijos, Carlos, heredó inicialmente de su madre los ducados de Parma, Piacenza y Toscana (1731); pero más tarde, al conquistar Felipe V el Reino de Nápoles y Sicilia en el curso de la Guerra de Sucesión de Polonia (1733–1735), Carlos pasó a ser rey de aquellos territorios con el nombre de Carlos VII. Contrajo matrimonio en 1737 con María Amalia de Sajonia hija de Federico Augusto II duque de Sajonia, rey de Polonia.
Cuando murió en España su hermano, el rey Fernando VI, segundo hijo de Felipe V (el mayor murió muy pronto, en vida del rey Felipe), Carlos fue nombrado rey de España. Era el año 1759. Dejó Nápoles y se convirtió en nuestro conocido rey Carlos III, al cual la ciudad de Madrid tanto debe.

Las diversas revoluciones europeas afectaron al belenismo: en 1787 en la ciudad Maguncia se prohibió montar los “Pesebres”, en Francia sucedió lo mismo cuando se clausuraron las iglesias.
En el siglo XIX tímidamente las parroquias comenzaron a montar otra vez sus belenes. A partir de entonces figuras creadas en materiales más baratos tales como barro cocido o papel cartón hicieron que el helenismo se popularizara en las clases populares.
Cada país y cada región ofrece sus particularidades y crea sus propios belenes, con figuritas frecuentemente ataviadas con trajes de la zona, en ellos que también encontramos, además de las figuras tradicionales, personajes típicos de la región.

EL BELÉN EN ESPAÑA
En España, el belén fue introducido por la orden franciscana en el siglo XV. Del siglo XVI todavía se conserva un belén en el monasterio de las Descalzas Reales de Madrid: todas las figuras están talladas en coral, plata y bronce; se desconoce su autor o autores.

Fue el rey Carlos III, -que, como ha quedado dicho, siendo rey de Nápoles había hecho del belén una institución nacional- quien introdujo el arte del belenismo en España.
Decidió encargar más de 200 figuras a los artistas valencianos José Estévez Bonet y José Ginés Marín y al imaginero murciano Salzillo, destinadas a su hijo Carlos (futuro Carlos IV): es el famoso "Belén del Príncipe".

Este belén se caracteriza por tener figuras de diferentes tamaños para que, al colocarlas adecuadamente, el belén ofrezca una adecuada perspectiva. Aún se conservan muchas figuras en el Palacio Real, donde este belén se expone actualmente para ser visitado por el público.
Como había ocurrido en Nápoles, el belenismo arraigó en las costumbres españolas.

ARTISTAS ESPAÑOLES DESTACADOS
Autores como Martínez Montañés en el siglo XVI, Alonso Cano y Luisa Roldán, conocida "La Roldana", en el siglo XVII, son los grandes escultores de esta época. Como anécdota del uso del belén este siglo XVII mencionamos que en el inventario de bienes de Lope de Vega, constan las figuras de un belén que ponía en su casa.

En 1707 nació el murciano Francisco Salcillo, uno de los más grandes imagineros hispanos, Francisco Salcillo, hijo de Nicolás Salcillo, escultor italiano procedente de Capua que se había afincado en Murcia. Heredó de su padre la tradición del belén napolitano.
En 1576 su amigo el Marqués de Riquelme le encargó un belén para decorar su casa. Consta de 556 figuras de 25/30 centímetros, de barro cocido, madera y cartón. Se conserva casi completo en el Museo Salcillo de Murcia.

En España se pueden mencionar la escuela murciana, la escuela de Olot, la escuela granadina y la jerezana.

En época moderna también tenemos muy buenos imagineros, como el maestro toledano José Luís Mayo Lebrija (Toledo 1941), Martín Castells y Martí, los murcianos José Nicolás Almansa, los hermanos Griñán, Serrano, Amo, Guillén, Galán y otros; en Granada tenemos a José Miranda y Jesús Jiménez continuador de la escuela barroca granadina de su abuelo Rada, y Jerez con Pedro Ramírez Pazos.
En Madrid el maestro belenista José Luis Mayo Lebrija ha creado un belén creado en el que las figuras aparecen ataviadas con los trajes de chulapas y manolas, apareciendo los personajes típicos del Madrid "castizo" como son la castañera, el sereno, el barquillero, ... enmarcados en una corrala o en el Madrid de los Austrias. Como curiosidad hemos de decir que en estos momentos existe una página web –además de la página web del propio autor- en la que un particular vende figuras originales de 30 y 35 ctm. salidas de la mano de Mayo Lebrija.

La afición por los belenes ha dado lugar a la creación de Asociaciones, con un deseo de perfeccionamiento en la construcción de los nacimientos.
La primera Asociación en el mundo nació en 1855.

En España la primera se fundó en Barcelona en 1863, aunque desapareció poco después, para resurgir en 1912.
Posteriormente se han ido fundando en prácticamente todas las capitales de provincia. La de Madrid se fundó en 1942.

María Huidobro publica un bello poemario sobre los Niños



ninos timidos y extrovertidos

Niños, la más pura expresión de lo adorable
María Huidobro
Madrid, 2009




Julia Sáez-Angulo

Escritora fecunda y poeta versátil, María Huidobro (Burgos) nos sorprende ahora con un libro de poemas insólito titulado “Niños, la más pura expresión de lo adorable”, un homenaje a los más pequeños por la vía del verso, del asombro, de la admiración y del amor a los más pequeños.

“Un niño es un amor hecho visible” decía Novalis. María Huidobro, profesora de lenguas, suscribe los versos de Luzmaría Jiménez Faro: “Niño, sueño perfecto/ de todo lo creado”, que abre el poemario. El libro lo escribió durante una convalecencia y es una reflexión sobre un período muy concreto del hombre, el de su inicio.

Los poemas de Huidobro son una mirada a la infancia desde la atalaya de madurez, una exaltación de la pureza y la espontaneidad de los primeros años de la vida donde está todo por hacer y marcar. La mirada de la poeta es de inmensa ternura y conocimiento al mismo tiempo.

Los tiempos fabulosos de la vida

El libro se estructura en nueve partes: “Niños, alada levedad de vuelo angélico”; “El maravilloso mundo de los niños; “Infancia, mágica palabra”; “Ojos que ven lo invisible”; “El corazón del niño es un tesoro”, “Tierno jazmín, el alma de los niños”; “La condición humana de los niños”; “El sueño de los niños tiene magia” y “Desvelo”.

“Entre ángeles y niños” titula la presentación del poemario el editor Basilio Rodríguez Cañada, que lo describe como “un homenaje a los tiempos fabulosos de la vida, como los definía Leopardi, una exaltación de la pureza y autenticidad de los primeros años de nuestra existencia. Una obra que transmite el inmenso amor que profesa su autora a quienes tienen el divino poder de sumergirnos en las ilusiones”.

“Todos los niños llevan en los ojos/ una huella de Dios, inconfundible, / un reflejo divino de lo excelso,/ y la luz celestial del brillo eterno”, dice en uno de sus poemas. Después de los bellos haikus escritos en libros anteriores, sorprende esta visión y atención a la infancia.


Gonzalo Hidalgo Bayal, Escritor extremeño brillante y cervantino

“El espíritu áspero”
Gonzalo Hidalgo Bayal
Tusquets Editores. Colección Andanzas
Madrid, 2009 (556 pags)

“Campo de amapolas”
Gonzalo Hidalgo Bayal (2008)

“Paradoja de interventor”
Gonzalo Hidalgo Bayal (2006)


Julia Sáez-Angulo

Uno se alegra cuando descubre que no toda la literatura es marketing, es más, que la buena literatura reposa en la discreción y el silencio para que las alharacas del mercado no destruya una obra que requiere admiración y silencio para leerla y disfrutarla, sin el eco mediático del autor famoso o el ruido de su venta pública. Es el caso de la obra escrita por Gonzalo Hidalgo Bayal: tres novelas con una narrativa escrita con sabiduría, precisión y amenidad.

“El espíritu áspero” es el título de la novela publicada este año y narra la vida de un profesor de lenguas clásicas ante su jubilación, con toda clase de detalles de infancia, estudios, profesor bisoño y finalmente venerable. Todo ello da lugar a una serie de juegos entre los folios memorialísticos del profesor junto a la opinión de los alumnos y el juego con la lengua castellana a que se prestó siempre el ilustre filólogo biografiado en la novela.

“Campo de amapolas” transcurre, al igual que el anterior en Murania, lugar mítico para la literatura de Hidalgo Bayal. Dos amigos de infancia llevan a cabo un encuentro posterior y se ponen de manifiesto las vidas divergentes de uno y otro, refugiado en el arte o viajero rebelde respectivamente. Ambos buscan la articulación de sus vidas en distintos ampos y emociones. Una novela hermosa y poética, de contrastes y reflexiones sobre la vida misma.

“Paradoja del interventor” finalmente es la historia de un hombre que pierde el tren en una de sus bajadas, con todo el equipaje dentro, por lo que ha de enfrentarse sin identidad ni medios a una nueva realidad donde se encuentra con personajes extraños o marginales al tiempo que ve degradarse su vida. El desaparecido crítico Rafael Conte escribió: “he aquí la novela española más importante que he podido leer en los últimos años, no sé si diez, quizá veinte”.

Un profesor de Literatura en Plasencia

Ante esta producción nos encontramos con que Gonzalo Hidalgo Bayal es un narrador de primera, uno de los más singulares en el panorama literario español, que bien merece un premio Nacional de Narrativa. Nacido en Higuera de Albalat (Cáceres), 1950, es licenciado en filología románica y ciencias de la Imagen por la Universidad Complutense.

Profesor de Literatura en un instituto de Plasencia , Hidalgo Bayal es autor de una obra que se traduce en dos ensayos literarios, “Camino de Jotán” (1994) y “Equidistancias” (1997). Como novelista, es autor de otros títulos como “Mísera fue, señora, la osadía” (1988), “El cerco oblicuo” (1993) y “Amad a la dama” (2002).

Gonzalo Hidalgo Bayal ha sido el descubrimiento literario español más cervantino y brillante de panorama de las letras españolas. Los elogios al autor por parte de los más exigentes críticos literarios no se han hecho esperar. Hidalgo Bayal es un nombre a seguir, a tener en cuenta. Sus novelas son un deleite de la buena escritura y un placer para los lectores. Buena literatura en suma ante un buen saber narrar con inteligencia y amenidad, con dominio de la lengua castellana en su visión cervantina de observación puntual y sagacidad sobre la vida.

domingo, 20 de diciembre de 2009

Tradiciones Navideñas a lo largo de la Historia



Dolores Gallardo López

Ya están a punto de llegar los días del año que para unos son los más entrañables y para otros son días cargados de melancolía y recuerdos de sucesos pasados que –indefectiblemente- al llegar estas fechas nos asaltan de nuevo. Pero todos, o casi todos, practicamos estos días unas costumbres que vienen avaladas por una larga tradición. Tradiciones que nuestros padres nos enseñaron y cuyo testigo trasladamos a nuestra vez a las generaciones que nos siguen. Hablo de las tradiciones navideñas.
 Bueno resulta plantarse por qué en el mundo occidental cumplimos estos días determinados ritos y de dónde proceden.
Nuestro mundo, el mundo occidental en el que vivimos, y nuestra cultura, la cultura occidental -que los europeos exportaron a América, tanto la del norte como la del sur- son producto de una larga evolución cultural. En esa larga evolución confluyen, fundamentalmente, dos ejes bien diferenciados:

a) La cultura clásica. Nació en Grecia, fue absorbida por Roma y trasladada después por los romanos a todas las regiones no griegas donde se extendió su Imperio, es decir a las actuales naciones de Europa occidental y a una de Europa oriental (Rumanía). También al norte de África.
b) La judeo- cristiana.

No es posible entender nuestra cultura europea sin tener en cuenta ambos ejes culturales.

Con más frecuencia de lo que en principio parece esos dos ejes confluyen. Así sucede en los casos que estos días expondremos en este blog: la festividad de las Navidades y las tradiciones que este hecho conlleva.
Hoy nos vamos a ocupar de algunas tradiciones navideñas.
¿Desde cuándo las familias o los amigos se reunen para comer juntos? ¿Desde cuándo se envían regalos de comida o bebida a personas que -si se nos ocurriera en otras épocas del año- a lo mejor nos las tiraban a la cabeza? ¿Desde cuando sorprendemos a nuestros familiares y amigos más allegados con ese objeto que sabemos que deseaban tener o que pensamos que les hará ilusión?

¿De dónde vienen estas costumbres que consideramos tan nuestras?
Estas líneas sólo pretenden mostrar al lector que aquí –una vez más- las dos líneas maestras de la estructura europea que hemos indicado más arriba confluyen.

En efecto, bastantes tradiciones que repetimos cada año son muy parecidas a las que los romanos cumplían en otras fiestas que celebraban más o menos por los mismos días: las Saturnales, es decir las fiestas en honor del dios Saturno. 
Originariamente las fiestas duraban tres días: el 17, 18 y 19 de diciembre. Estaban ubicadas en el calendario romano cerca del solsticio de invierno, cuando el Sol entra en el signo de Capricornio. Después se ampliaron algunos días más, hasta el 23 de diciembre. Durante las Saturnales se suspendían numerosas actividades públicas.

Desde siempre fueron unas fiestas muy bulliciosas y populares: se reunían a comer parientes y amigos; los esclavos gozaban de una libertad inusitada el resto del año e incluso en algunas familias confraternizaban con los dueños.
Los amigos y parientes se enviaban regalos de comida y bebida.
En los banquetes familiares se solían hacer regalos muy diversos, según el bolsillo de cada cual: un atril, un aguamanil, una parrilla para asar, una bufanda, un tinte para el pelo…. o, los pudientes, platos incrustados con oro, copas antiguas, una cama hecha de limonero, una silla de montar, etc. No crean que me estoy inventando los ejemplos, los estoy sacando del poeta Marcial.

Sí, nuestro compatriota, el poeta Marcial, escribió dos libritos en dísticos para acompañar los más diversos regalos: el libro XIII de sus obras, llamado Xenia eran dísticos para acompañar regalos de comida y bebida; el XIV, llamado Apophoreta, contenía dísticos para acompañar los otros regalos.
Marcial, nació en Bílbilis, cerca de Calatayud, un 1 de marzo entre los años 30/41 d.C. Con poco más de 20 años estaba ya Roma, la capital del mundo.

En aquel momento, en torno a los años 60, el emperador era Nerón y la colonia hispana muy floreciente: entre sus miembros estaban el filósofo cordobés Séneca, preceptor y brazo derecho del emperador, su sobrino el gran poeta épico Lucano, nacido también en Hispania, etc.

El epigrama a su cumbre

Los acontecimientos se precipitaron, tras la conspiración de Pisón contra el emperador, Nerón tomó represalias. Entre los afectados por ellas Lucano tuvo que suicidarse, también Séneca –que voluntariamente había dimitido de todos sus cargos hacía algún tiempo y vivía retirado, fuera de la ciudad- fue obligado a suicidarse.
Los buenos tiempos de la colonia hispana acabaron. El poeta Marcial -ya de por sí bohemio- malvivió y aunque unos años después -en época de los emperadores Flavios (Vespasiano y después sucesivamente sus dos hijos, Tito y Domiciano)- su situación mejoró sensiblemente, siempre tuvo estrecheces económicas. Pero él llevó el género epigramático latino a su más alta cumbre.

El epigrama era una composición irónica breve, generalmente de 6/8 versos, muy rara vez sobrepasa los 20 versos. El último verso es como el flechazo o un agudo dardo y da sentido a la composición. El epigrama fue comparado con “el picotazo de la abeja ática, que causa ampollas”. Marcial es el autor de epigramas más importante de la Literatura latina y uno de los grandes de la poesía satírica universal.

Casi al final de sus días, otro escritor –mucho más rico, pero menos importante- conocido en la Literatura como Plinio el Joven pagó a marcial el viaje de regreso a Calatayud, donde murió en los primeros años del siglo II d.C., entorno al 104 d.C.

Volviendo a las Saturnales, estas fiestas como su propio nombre indica y ha quedado ya dicho, eran las fiestas dedicadas al dios Saturno, antigua divinidad itálica, que muchos consideran que tuvo carácter agrícola. Las características que pudiera haber tenido el primitivo Saturno itálico desaparecieron pues que muy pronto fue asimilado al dios griego Crono y todo lo que de Saturno romano sabemos está pasado por el tamiz griego.

El titán Crono en la Mitología griega era el primitivo dios del Cielo y fue padre de Zeus (que tras rebelarse contra Crono y vencerlo se convirtió en el dios máximo del mundo griego y señor del Olimpo).

Dicho esto se entiende bien que las Saturnales romanas, si bien con sus características propias, fueran una adaptación de las Kronia griegas, las fiestas dedicadas al dios Crono.

Ha quedado dicho que las Saturnales, una vez ampliadas, acababan el 23 de diciembre.
En el siglo IV d.C. el erudito Macrobio, tomando como marco escénico las tradicionales fiestas, escribió su obra llamada Saturnales, indispensable para el estudioso del mundo romano: El autor finge que un grupo de doctos amigos -entre los cuales está el gramático Servio, el mejor comentarista de Virgilio que hubo en la antigüedad- con motivo de celebrar las tradicionales fiestas Saturnales como era habitual con reuniones para comer, se reune en sucesivos banquetes y en ellos mantienen eruditas conversaciones sobre múltiples temas literarios y científicos.

Las antiquísimas y bulliciosas fiestas Saturnales siguieron celebrándose en el mundo romano hasta que el 27 de febrero del 380 el emperador Teodosio con el edicto de Tesalónica acabó con lo que quedaba de la religión tradicional romana y quedó proclamado el cristianismo como única región. Pero las tradiciones romanas subsistieron y han llegado hasta nosotros.