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martes, 17 de junio de 2014

Pilar Sahagún, presenta su libro “El Signo del Infinito” en la Gran Peña de Madrid


Pilar Sahagún


Julia Sáez-Angulo

           
            Los editores Manuel Pimentel y Javier Ortega presentaron la novela El Signo del Infinito de Pilar Sahagún (Madrid, 1944) en la hermosa biblioteca de la Gran Peña de Madrid. El libro, que ha sido editado por la editorial Arco Press, “plantea las grandes cuestiones que nos inquietan desde los albores de los tiempos”,  al decir del primer editor citado.

            “Es un libro que se recordará por mucho tiempo, porque El Signo del Infinito es una novela trascendente donde la autora no ha tenido pudor para plantear las grandes cuestiones del hombre”.




La novela narra la historia de dos amigas, Alda y Casilda, una del norte y una andaluza, que confluyen en Madrid, llegan a un pacto y ofrecen sus distintos registros a la hora de afrontar la vida. La escritora evoca más que cuenta. El libro destila un pozo de sabiduría frente al simple conocimiento. “Las grandes obras evocan más allá de lo que escriben” subrayó Manuel Pimentel.

“Los libros hablan desde lejos”, dijo el editor en otro momento. “La novela de Pilar Sahagún es una obra de libertad, de luz dentro del dolor y de la incitación al amor y a la felicidad”. “El libro evoluciona desde el desasosiego, el desconcierto y el dolor difuso, a la luz, serenidad, estabilidad y plenitud”, se dijo en la presentación, que llenaba el espacio de la Biblioteca de la Gran Peña.

Pilar Sahagún desveló que en la sala se encontraba la amiga Dorita Briones que le contó la historia que ella ha fabulado en su novela. “Las casualidades no existen, son causalidades que desconocen nuestra ignorancia o ceguera”, porque ambas se han reencontrado para la presentación de esta novela.

“Hay cosas que merecen la pena: nunca pensemos en el por qué ocurre el dolor, sino el para qué del mismo”, dijo Sahagún para finalizar. “Todo consiste en aceptar lo que la vida nos ofrece y lo que importa es lo que dejemos a la humanidad”.

El acto de presentación terminó con una lectura de tres poemas de Pilar Sahagún, recitados por Pilar Barrera y un poema cantado por Ángel Mora. Seguidamente la cantante María Villarroya cantó algunas canciones propias, entre ellas un bolero que dedicó de modo especial a Pilar Sahagún y Joaquín.

Pilar Sahagún estudió Derecho y publicó su primera novela titulada Las siete miradas en 2007 y seguidamente Cuentos para despertar.


El Signo del Infinito
ISBN: 978-84-16002-03-0
280 páginas
Rústica . 14,5 x 22 cm


miércoles, 30 de abril de 2014

Pilar Sahagún, Poeta invitada por “La Mirada Actual”




Pilar Sahagún



L.M.A.


          “A los cuatro años dije a mi padre que quería ser escribidora como el Quijote; no conocía la existencia de Cervantes, solo un libro que se llamaba así, del que mi madre me leía frases cuando yo le preguntaba por qué se reía.

     Mi forma natural de expresarme ha sido siempre en negro sobre blancor: escribía  a mi madre cuando  murió siendo yo muy joven, al perro que se fue y quería como al  hijo que nunca tuve…. Esta necesidad aumento abarcando a la humanidad al descubrir  que la vida  no era lo que parecía y terminaba, aparentemente,  en lo que el mundo llama muerte y no es sino  un despertar.

      Desde esa convicción surgieron mis primeros relatos relacionados con el mundo de lo invisible que para mi era tan real como el de la materia.

   Cuentos para despertar  pretendía provocar en el lector lo que el título ya indicaba. En 2007 salió a la luz Las siete miradas que trataba de la vida continuada, que conlleva la reencarnación, diferenciándola de la existencia que termina con la muerte.

     El místico salvaje, Un milano de invierno, La protección, El hombre que creció después de morir y muchos relatos más, hablaban de esos parámetros que son los pilares de mi camino, incluido el literario.

        La poesía broto de la misma fuente impulsada, como no podía ser de otra manera por el motor de la vida. Divino o humano, al fin amor.

   Acaba de salir, editado por Arcopres, mi último libro. En  “el signo del infinito”, los protagonistas se desenvuelven en ambientes de lujo, pero el camino que transitan es abrupto. La soledad acecha a sus personajes y el desamor da dentelladas al aire donde siempre hay una sinfonía que a menudo se convierte en un Réquiem.

 Mientras  a la protagonista, le es mas fácil descubrir que no existe la muerte que encontrar  el amor, aunque conozca la amistad y tenga una ética que ya no admite el sufrimiento.

 Esta  historia que puede ser la de cualquiera de nosotros- sin ser la de nadie- esta escrita desde el deseo de compartir con el lector la aventura que es nacer en la tierra”.
           
            Pilar Sahagún




Los idus de mayo

Nos conocimos en mayo.
Tú ibas vestido de beige y yo de blanco.
La emoción flotaba en el aire
cuando tu negra mirada buceo en la mía clara.

Tus palabras trajeron
el aroma de otra dimensión;
un escalofrío recorrió mi espalda
 y la lógica negó lo que el alma recordaba. 

Nuestras vidas eran paralelas,
tu vivías en España
yo, casi siempre, fuera.

No nos unía nada,
salvo la misma estética,
el mismo sol, la misma luna
destilando nostalgia de amor.

 Pasaron los años
Y te encontré de nuevo… en mayo.

Repicaron las campanas,
se abrió el firmamento
al comunicarnos
 más que con palabras, con silencios.

Supe que te amaba
mas allá de las nubes,
del espacio. Del tiempo.
En algún lugar remoto del universo.

Eras el amor que,
sin conocer, conocemos.
La unidad perdida.
 El relleno de  mi hueco.

Solo te superaba en amor,
tú a mí en todo lo demás.
Eras con quien soñaba
 desde que empecé a soñar.

En verano aumentó el fuego
y creció con cada mes nuevo
hasta que al desbordarse
 apareció el miedo.

La razón proclamaba
 lo imposible de lo nuestro
aunque no puede serlo
 lo que no pretende nada.

Solo quería ser tu sueño hecho realidad,
la cueva donde encontraras
 el reposo del guerrero,
donde no entrase la rutina ni la mediocridad.

Una gruta que no diferenciara
la belleza de la verdad.

Te esperaré allí
en el mes
 más florido del año.

Si un día faltara a la cita
sabrás que me he ido.

 Antes de mayo. 

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Una dosis de locura
Te falta la dosis de locura
que conocerte me suscitó.
Sin padecerla no es posible
cerrar la puerta a la razón.
Un amor
que te convierte
 en el único habitante de la tierra
en el río que anhelo vadear
en la cima de mi montaña.
Un amor
con la impronta
 que corresponde a la unidad
Un amor
que nunca conocerás conmigo;
no te queda hueco ni a mi tiempo.
Si algún día
lo sientes por otra
¡¡¡ámala!!!
Como yo te he querido.

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Es poesía lo que dices,
lo que siento cuando miras.
Tus manos entre las mías.
Tu olor a hombre cabal.
Esa frase atrevida
 que en otro seria vulgar.
El hueco que dejas cuando te vas.
Tu mirada libando en la mía
 como el insecto en la flor
 como la ola en el mar.

Las  tortugas desovando
en  las dunas.
El Sahara amaneciendo.
  Venecia bajo la luna.

 La arqueología.
 La palabra medida.
La música callada.
 La mirada perdida.
El tiempo, el espacio.

El arriba y abajo
de un mundo que
o no será
o será poesía.
 


La Duda
La duda es una serpiente
que se desliza en la mente
con sigilo de ladrón.

Devora el sosiego
despertando mil recelos a su paso
venenoso, silencioso, traicionero.

Interpretar los hechos la alimenta
Pero muere de inanición
si se ama con la mente
y se piensa con el corazón.

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Atlante

No tengo pruebas que acrediten
que has sido atlante en otra vida.

Pero, quien conozca tu talante
y sepa algo de esa tierra sumergida,
no se sorprenderá.

Tienes la sabiduría
que se atribuye a esa raza
y un no sé qué de especial
que no encaja en la actual.

Dotado como pocos en la tierra,
ni compartes sus criterios
ni caminas por sus sendas.

Con alma de poeta
y entrañas de empresario,
sigues el camino
que recorro yo.

Por eso me pregunto,
si no será la Atlántida
el lugar que, sin recordar, añoro.

Sin embargo
es más importante averiguar,
si lo nuestro tiene ahora
la jerarquía de entonces.

O la perdió.



viernes, 11 de abril de 2014

Pilar Sahagún, autora de la novela "El signo del infinito", editado por Arcopres




Una novela en la que se indaga qué hay más allá de la muerte


Pilar Sahagún 


L.M.A.

El signo del infinito es el título de la nueva novela editada por Arcopress, obra de Pilar Sahagún, quien mediante un envoltorio lujoso que remite al canon del más puro best seller, plantea sin embargo en sus páginas cuestiones de gran calado y ámbito universal: ¿es posible evitar el dolor, ser inmunes al sufrimiento? ¿Somos culpables desde el mismo hecho de nacer? O lo que es lo mismo, ¿debemos pagar un precio por los errores de nuestros antepasados, por haber nacido en un determinado lugar y en una familia concreta? Y, sobre todo, ¿vivimos una sola vida... o muchas?

Los personajes que habitan su trama son en su mayoría personas de posición acomodada, cuya vida discurre en ambientes de marcada opulencia... pero las pulsiones que les asaltan dejan ver que los oropeles no son la esencia de la vida. Su búsqueda, la de la protagonista de la novela en particular, refleja el anhelo del ser humano por conocer, por saber qué se esconde al otro lado de este mundo material, tan bello y tan injusto al mismo tiempo.

Una búsqueda que la llevará a los lugares más distantes del orbe, desde el México de la Ribera Maya al Bombay de la India, y en la que se verán reflejados lectores del más variado perfil, pues conecta con la esencia del ser humano y con sus inquietudes más ancestrales.

La historia comienza con cuando Alda San Facundo pierde a sus padres en un accidente de aviación a los cuatro años de edad y se tiene que trasladar con Madmua, la persona que la ha criado y a la que considera su madre, a la finca de sus abuelos, lugar en el que habita la magia y rige la armonía de la naturaleza, y que marcará de manera indeleble su existencia.



En Madrid, donde acudirá más tarde a estudiar medicina, conoce a Casilda Alcaiz, que ha tenido una vida en muchos aspectos similar a la suya. Su extremada afinidad hará que lo compartan todo y que suscriban un pacto: el que las comprometerá a que la primera que muera comunique a la otra si hay vida después de la muerte.
La música será un personaje más en esta novela de emociones y sentimientos inefables, donde se concitan el amor, la amistad y una ética que no admite el sufrimiento. Los protagonistas de esta novela singular se desenvuelven en ambientes de lujo y ostentación, pero el sendero interior que transitan es abrupto. La dificultad de ese recorrido iluminará, a la postre, el signo del infinito.

A los cuatro años Pilar Sahagún dijo a su padre que quería ser escritor, vocación que mantuvo inquebrantable en la intimidad hasta que le pudo la necesidad de contar a los demás lo que había descubierto en la vida. Tras cursar estudios de Derecho y Arte escribe su primera novela, Las siete miradas, que vio la luz en 2007. Mas tarde llegaría Cuentos para despertar en la que contaba experiencias personales que la lógica no podía explicar, pero ella lo hacía desde esa fina línea que separa lo invisible de la materia. El signo del infinito, sinfonía entre dos mundos, nace en esa zona fronteriza donde todo es posible y que el hombre conquistará algún día.

ISBN: 978-84-16002-03-0
280 páginas
Rústica . 14,5 x 22 cm