sábado, 10 de julio de 2010

Paco Sáinz, escultor y dinamizador de la Comunidad de Artistas en Ahíllas




Julia Sáez-Angulo


El escultor Paco Sainz (Portugalete. Bilbao, 1964) reside en la localidad valenciana de Ahillas, aldea de Chelva, situada en los montes fronterizos a Terual, donde se ha creado una importante comunidad de artistas desde que él se instalara junto al primer habitante del lugar abandonado por sus antiguos moradores. Las casas de Ahillas se han ido rehabilitando paulatinamente y hoy es un sitio que convoca a numerosos curiosos y amantes del arte todos los fines de semana y en especial el de Pascua de Resurrección cuando tiene lugar la gran exposición de arte de todos ellos.


- ¿Que definición o comentario sobre la escultura le ha convencido más?

R.-Querida Julia: Invariablemente desde hace unos treinta años leo cada año la obra de Hermann Hesse, "Narciso y Goldmundo" y cada año sin excepción renuevo mis argumentos para dedicarme a la escultura a la vez que no puedo evitar que aflore una lágrima. Hay muchos comentarios, de escritores, pensadores, historiadores, críticos y demás entendidos que me llegan y me convencen de algunos porqués, pero siempre recurro a mi fuente preferida a la hora de sentirme un trabajador del Arte, un escultor, y es "Narzzis y Goldmund".
. . .Debo despedirme de tí, y como despedida he de decírtelo todo. Escúchame un instante más. Quisiera hablarte de la madre, decirte que sigue apretándome el corazón con sus dedos. Ha sido durante muchos años mi sueño más querido y anhelado al hacer una imagen de la Madre, que sería para mí la más sagrada de todas las imágenes, siempre la llevo a mi lado: una figura llena de amor y llena de misterio. Hace poco todavía me hubiera sido enteramente insoportable pensar que iba a morir sin haber logrado su figura; mi vida me hubiera parecido inútil. Y mira que cosa tan singular me ha ocurrido con ella: en vez de que mis manos la formen y modelen, es ella la que me forma y modela a mí. Tiene sus dedos en mi corazón, y si los suelta me siento vacío; me ha seducido para que muera, y conmigo morirá también mi sueño, esta bella figura, la imagen de la gran Eva-Madre. Todavía la estoy viendo, y si tuviera fuerza en las manos, podría tallarla. Pero ella no quiere esto, no quiere que haga patente su
misterio. . .

-¿Qué conceptos o ideas atraviesan su escultura?

R.- No hay una "tabla maestra" a la que asirse en el navegar cotidiano por mi escultura. Es un trabajo con una parte maravillosa y una parte arrebatadora. La escultura te deja espacios para ejercitar tus pensamientos, tus ideas y, analizar las fuerzas que te rodean: naturaleza, sociedad,...y en esta cotidianeidad navega mi escultura, mi creación. Esta sensación a veces es dolorosa; pues no siempre se goza con el proceso mental de creación. Mareo y vértigo nacen ante el vacío de ideas, y para que este vacío no se produzca hago de la escultura mi vida.

- ¿Cuales han sido sus maestros en la práctica escultórica?

R.-A lo largo de mis estudios en la facultad de San Carlos de Valencia, he tenido muchos profesores, tantos como asignaturas y de todos he cogido lo máximo que me ha sido posible, sobre todo en lo referente a "técnicas". He de decir que no todos se han vaciado en enseñar lo que saben (realmente han sido muy pocos). Mi principal maestro ha sido la calle. La escuela de Bellas Artes y la práctica me han enseñado a mirar y a ver y a solucionar los problemas que se plantean cuando pretendo realizar la imagen vista, la idea que mora en mi cabeza.

- ¿Quienes sus maestros en la Historia del Arte?

R.-En nuestra Historia -la de Occidente- Miguel Angel es mi principal referente. Giacometti, Moore, Brancusi, Oteiza, Nestor Basterretxea ocupan un lugar preferente. Isamo Noguchi -aunque oriental- su amor por los materiales y la naturaleza hacen que me atraiga su trabajo.

Aunque no sólo escultores me "regalan", también pintores como: Memling, Modigliani, El Bosco, Goya,... y escritores que hacen que fluyan imágenes mientras penetro en su lectura como Goethe, Hesse, García Lorca y ...más.

- ¿Qué materiales utiliza y por qué?

R.-Piedra, madera, bronce y recientemente he incorporado el cristal. Estos son los materiales más habituales en mi trabajo y con los que gozo mientras los doy forma. Son materiales naturalmente nobles, siento en ellos la fuerza de la naturaleza, el poder de la historia. Técnicamente muy diferentes entre sí, llenos de retos; a los que sacar una sonrisa supone un arduo e interesante trabajo. Son materiales con los que puedes dialogar, te pueden contar desde las más antiguas historias a los más recientes cotilleos. Son la prensa impresa de la vida.

- ¿De qué depende que elija un tema u otro para su escultura?

R.- No suele haber una razón, es más normal que exista una sensación a la que seguir. Es como una presencia sutil que se sugiere y hace que la sigas y la persigas hasta que se muestra. Entonces se desvanece y comienza otra historia, otra sensación. Casi todas las sensaciones consciente o inconscientemente tienen relación con el mundo cotidiano que te rodea.


El árbol de las mariposas en el Jardín

- ¿Por qué la figura persistente de la mariposa en sus últimos trabajos?

R.-En un jardín de casa hay un árbol que en Julio florece y se llena de racimos de pequeñas flores rosáceas, que por alguna razón atrae a las mariposas, y las atrae por miles y de muy diferentes especies, cada una con sus colores característicos. Este árbol con su habitat lleva mucho tiempo conmigo y como he dicho antes, crea una sensación que intento atrapar en las últimas obras que estoy realizando. Las mariposas tienen diferentes connotaciones para las diferentes civilizaciones. La mitología las ha hecho acompañantes de las animas. Sus transformaciones, sus metamorfosis, siémpre han intrigado.También técnicamente son un reto. Ya que como transportadoras o acompañantes de almas, y que estas son variadas, numerosas y diferentes; el reto es que todas las mariposas han de ser diferentes, piezas únicas, nunca repetidas, para lo cual he de realizar multitud de moldes que al ser para "cera perdida" se han de romper al final del proceso de fundición. También pátinas y pavonados han de ser únicos.

-¿Qué cree que valoran los coleccionistas de su obra?

R.-Diré que normalmente el que compra una de mis esculturas, repite. Saben que vivo unicamente de la escultura y para la escultura, que genero pocas obras al cabo del año, ya que yo, y sólo yo, realizo todos los procesos escultóricos; la cera, los moldes y la fundición del bronce; elijo las piedras en las canteras y la madera en el bosque. En fin,los coleccionistas acaban conociéndome y sabiendo que pongo el "alma en cada piedra".

- ¿Cómo nacieron los encuentros de Ahillas?

R.-Ahillas es una aldea que pertenece a Chelva, en la serranía valenciana. Aldea con un sólo vecino cuando llegué, y aldea que ha ido creciendo y poblándose en los últimos años. Entre los nuevos colonos han llegado artistas en varias disciplinas (pintura, escultura, grabado, dibujo, fotografía...) y de varias nacionalidades. Algunos nuevos colonos (no del mundo del Arte) han trabajado para que Ahillas y sus artistas, unos días al año, -por Pascua-, junten sus últimas obras y las muestren al público. Desde el principio ha sido una exposición internacional y multicultural. Siempre engrandecida por la presencia de artistas invitados de fuera de la aldea.

- ¿Qué trae esta presencia conjunta de artistas?

R.-Posiblemente, un lugar paradisíaco, tranquilo, sano y barato (bueno, en los primeros años) y sobre todo un lugar en el que es muy difícil molestar a alguien con el ruido o el polvo de nuestro trabajo.

- ¿Qué le ha aportado vivir en Ahillas para su arte?

R.-Años de tranquilidad para dedicar todas las horas del día al trabajo. En un lugar como Ahillas es muy difícil que algo te distraiga, por lo tanto lo mejor para divertirse es crear. En un campo tan exuberante y tan bello, los sentidos, -aún sin percatarte-, están llenándose de energía, y ésta es necesaria en este oficio.

- ¿Es buena la convivencia de los artistas en la aldea?

R.-Los diferentes artistas que vivimos en Ahillas tenemos en común nuestra profesión, nuestra dedicación. En algunas ocasiones compartimos nuestras experiencias artísticas pero lo normal es que hagamos nuestra vida sin mayor contacto con los demás. La convivencia es muy buena. Todos sabemos que los otros están ahí para lo que haga falta. Nuestra independencia en la vida y el trabajo no es indiferencia.

- ¿Cuales son sus proyectos?

R.-Trabajar, trabajar y trabajar y espero que como fruto de esto, exponer, exponer y vivir.

- ¿Qué opinión le merece el circuito artístico en España?


R.-No puedo opinar, aún no he entrado en ningún circuito. Hasta este momento, nunca me ha hecho falta buscar donde mostrar mis obras, de una forma u otra siempre he tenido alguna exposición en cartera. Estos momentos de crisis -eso dicen- son iguales que los anteriores sin crisis y será similar a los siguientes. Nosotros los escultores que no comulgamos con ningún grupo, estamos en crisis permanente. "Benditas crisis" si nos permiten seguir adelante, "benditas crisis" si nos permiten pensar y crear como individuos y no generar series y lindezas para sociedades acomodadas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Interesante el reportaje,un escultor... es un crisol de bellas cosas.Creativo, sensible con todo lo que le rodea, árboles, las plantas, los animales...dichosos sus amigos/as que disfrutan de su amistad.