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martes, 18 de junio de 2024

FRANCISCO RICO. Caja de las Letras. Tres de sus obras más significativas, unos apuntes manuscritos y su eterna corbata italiana, legado «in memoriam»

• Homenaje del Cervantes al filólogo y académico, uno de los mayores expertos de la historia en El Quijote

• García Montero: «Rico fue un referente fundamental de nuestra cultura que nos enseñó a recibir la herencia del humanismo»

• Para Ernest Urtasun, ministro de Cultura, el homenajeado «forma parte de nuestra memoria colectiva»

 La filósofa y catedrática de la Universidad de Barcelona, Victoria Camps, viuda de Francisco Rico, deja uno de los libros que forman parte del legado de su marido en la caja nº. 1.406. Foto: Instituto Cervantes (Pablo Rojo) 

Francisco Rico (1942-2024), académico

 

            L. M. A.

         https://www.youtube.com/watch?v=ws5IzBSCIPI 

    Madrid, 18 de junio de 2024.- La Caja de las Letras del Cervantes ha recibido esta tarde el legado in memoriam de Francisco Rico (1942-2024), filólogo, historiador de la literatura de la Edad Media al Siglo de Oro y miembro de la Real Academia Española recientemente fallecido, «que representa distintas facetas de mi padre sin pensar qué hubiera elegido él, porque era impredecible», tal y como explicó su hijo, Daniel Rico.

Junto a él, han participado en el legado su madre, la filósofa Victoria Camps, viuda de Rico; el director del Instituto Cervantes, Luis García Montero; el ministro de Cultura, Ernest Urtasun; el director de la Real Academia, Santiago Muñoz Machado; y el catedrático de Literatura y discípulo del eminente filólogo, Jordi Gracia. Como testigos de honor, han actuado la directora General del Libro, María José Gálvez, y las directoras de Cultura y Académica del Instituto Cervantes, Carmen Pastor y Raquel Caleya, respectivamente.

El legado guardado en el cajetín n.º 1406 lo forman dos de sus obras, del principio y del fin de su carrera. La primera, La novela picaresca y el punto de vista (1969), que juega entre la realidad y la ficción y que fue publicada poco antes del nacimiento de su hijo con la dedicatoria: «Para V. a la medida de D.» (Para Victoria, su mujer, a la medida de Daniel, su hijo) cuya fórmula se ha convertido en una dedicatoria ya clásica.

La última, Una larga lealtad. Filólogos y afines, que para Daniel «es el único borrador de memorias que podría haber hecho mi padre, ya que recoge semblanzas de amigos y maestros».  Se añade al legado un tercer libro, Guillermo y los intelectuales, de la escritora inglesa Richmal Crompton, especializada en libros infantiles y narraciones de terror, que fue una de las primeras lecturas de Rico en su niñez.

Con corbata hasta en el gimnasio

A los libros se unen dos objetos personales. Por un lado, ha contado su hijo, una corbata italiana: «mi padre era sumamente presumido, para él la elegancia era vestir ropa italiana y la corbata la usaba para todo, incluso dormía con ella o hacía bici en el gimnasio con ella puesta».

Por otro, una carpeta con pequeñas notas recopiladas y recortes pegados «de las miles de carpetas que tenía ordenadas por temas y que representan su manera tan peculiar y característica de trabajar», según explicó su mujer, Victoria Camps —que también entregó un legado personal en 2020 a la Caja de las Letras —. La carpeta entregada trata sobre El libro del buen amor y tiene hasta título, que no todas lo tienen, en homenaje a su autor: El primer amor de Juan Ruiz.

Tres lecturas fundamentales de Rico

García Montero confesó estar «melancólicamente feliz de homenajear al maestro», ya que se trata de un homenaje repetidamente aplazado por la agenda del filólogo, la pandemia y su enfermedad.

El director del Instituto eligió tres lecturas «que forman parte de mi formación» para recordar a Rico: «Como persona y filólogo, La novela picaresca y el punto de vista; como intelectual, Nebrija frente a los barbaros, que aborda qué sentido tiene la obediencia ante un mundo ignorante que desconoce muchas de las cosas que quiere afirmar. La libertad de imponer una pauta por el conocimiento frente a los bárbaros es también una gran lección».

Como tercera obra García Montero escogió el ensayo El sueño del Humanismo: de Petrarca a Erasmo  y confesó que este libro, de 1993, le descubrió —y son palabras de Rico—que «al humanismo le seguimos debiendo haber descubierto que nuestra dimensión es la historia, que el hombre vive en la historia, en la variación, en la diversidad de entornos y experiencias, en el relativismo, pero por ahí también en la esperanza». Y eso, —continuaba Rico en esa obra—«implica un programa de acción, implica que es posible cambiar la vida, que la restitución de la cultura antigua abre perspectivas nuevas, que el mundo puede corregirse como se corrige un texto o un estilo».

El mejor editor de El Quijote

Si bien la mayor parte de su trayectoria como investigador Rico la dedicó a Petrarca y al Humanismo italiano, al Siglo de Oro español y a la novela picaresca, pero su interés principal han sido Cervantes y El Quijote. Rico ha sido el responsable de varias ediciones de esta obra, así como de otras obras clásicas de la literatura medieval, renacentista y del Siglo de Oro. Asimismo, dirigió la colección Biblioteca Clásica de la Real Academia Española (BCRAE).

«La mejor colección crítica editada en toda la historia», como la definió el propio Muñoz Machado, que adelantó que «se realizarán ediciones más resumidas para colegios e institutos como Francisco Rico deseo siempre».

Catedrático de Literaturas Hispánicas Medievales en la Universidad Autónoma de Barcelona, Rico está considerado como uno de los mayores expertos de la historia en El Quijote y una figura clave de la historiografía literaria española.

El primer humanista del siglo XX

Para Jordi Gracia, «tendemos a relacionar las humanidades con la seriedad, pero olvidamos el componente lúdico, de placer, ser felices haciendo un trabajo lento y en Francisco Rico se fundían la dimensión del placer y la dimensión del primer humanista del siglo XX y XXI». Gracia concluyó que Rico «introdujo las humanidades en el menú cultural de la sociedad española desde finales del franquismo hasta hace poco».

Por último, Ernest Urtasun destacó que «Francisco Rico forma parte de nuestra memoria colectiva: la edición de El Quijote que yo leí en el colegio era la suya. Nos ayudó a entender mejor nuestra cultura y su memoria seguirá en la sociedad española a través de su inmenso trabajo».

Tras el legado, se celebró una mesa redonda en torno a la figura del académico en la que participaron Luis García Montero, Inés Fernández-Ordóñez, filóloga y académica de la RAE; Gonzalo Pontón, editor y crítico literario; Victoria Camps, filósofa y catedrática, y Daniel Rico, escritor y profesor de Historia del Arte en la Universidad Autónoma de Barcelona; moderada por Jordi Gracia.

También intervinieron en el coloquio el director de cine Manuel Gutiérrez Aragón y el filólogo y académico Pedro Álvarez de Miranda que lo cerró recitando unas divertidas "coplas de pie quebrado" de Rico leídas en un almuerzo de Reyes en la Real Academia Española en las que con mucha ironía retrata a los académicos, "y si mi sabio sermón os pincha, chincha, chirría o hace roncha, cursad la reclamación al señor Víctor García de la Concha", termina.

A lo largo de su carrera Francisco Rico obtuvo diferentes galardones, como el Premio Internacional Menéndez Pelayo (1998), el Premio Nacional de Investigación Ramón Menéndez Pidal (2004), el Premio Alfonso Reyes (2013) o la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes (2015).

lunes, 12 de junio de 2023

JOSÉ LUIS SANPEDRO. Sus manuscritos secretos, un disco y publicaciones singulares, en la Caja de las Letras

• El legado se abrirá dentro de diez años para desvelar el contenido de las dos carpetas con manuscritos donadas por su viuda, Olga Lucas

• Su hija, Isabel Sampedro, depositó un disco y varias publicaciones singulares—un facsímil, un crisolín y ediciones especiales de tres de sus novelas—

 


  

L.M.A. 

        Madrid, 12 de junio de 2023.- La Caja de las Letras recibió hoy el legado «in memoriam» del humanista José Luis Sampedro (Barcelona, 1917-Madrid, 2013), una «figura fundamental en nuestra historia contemporánea, social y política», como destacó el director de Instituto Cervantes, Luis García Montero. Dos carpetas con manuscritos de contenido secreto, una edición facsímil de su revista UNO, las ediciones especiales de tres de sus novelas, un libro miniatura y un disco de música clásica, conforman la donación.

En la presentación de este acto, celebrado con motivo del 10.º aniversario del fallecimiento del pensador, el director del Cervantes retomó una frase Sampedro la cual consideró «inevitable no recordar en este homenaje»: «El tiempo no es oro, el oro no vale nada, el tiempo es vida».

Asimismo, García Montero empleó dos citas del propio autor y premio Nacional de las Letras para definir su labor como economista y escritor. «Hay dos tipos de economistas, los que trabajan para hacer más ricos a los ricos y los que trabajamos para hacer menos pobres a los pobres» indicó sobre sí mismo, Sampedro, fiel a su defensa de la justicia social. El humanista también consideró que «la libertad es como un cometa, vuela porque está atada a la responsabilidad del que l amaneja», en consonancia con la ética que marcó su vida.

El conjunto de los objetos legados por Isabel Sampedro Pellicer, hija del autor y la poeta Olga Lucas, su viuda, pasan a formar parte de la Biblioteca patrimonial del Instituto Cervantes. Guardados en la caja nº 943, esta se abrirá dentro de diez años y descubrirá los objetos en detalle.

El legado, un puente entre generaciones

Con este depósito Isabel Sampedro manifestó su deseo de generar «un encuentro entre mis nietos y su bisabuelo que no llegaron a conocer. Conectar un modo de hacer las cosas que no compartirán pero que conllevará respeto, sorpresa y asombro; algo que a mi padre le hubiera encantado».

Las publicaciones singulares guardadas son una edición facsímil del primer y único número de la revista UNO (1937) compuesta por cinco cuadernillos ; tres ediciones encuadernadas en cuero de sus libros: «Congreso en Estocolmo» (1952), «El río que nos lleva» (1961) y de «La sonrisa etrusca» (1985); y un volumen crisolín —libro en miniatura realizado en papel muy fino— titulado «Fronteras» que contiene su discurso de ingreso a la Real Academia Española y un texto escrito durante una hospitalización, que complementa la creación literaria con contenidos autobiográficos y más reflexivos.

Además, Isabel Sampedro incluyó la donación de un objeto personal, el disco de la Sonata nº28 de Morzart, una referencia al amor de su padre por la música clásica y el jazz. «He escogido este vinilo porque lo escuchábamos juntos cuando era pequeña», señaló.

Dos carpetas con manuscritos secretos

Emocionada y agradecida por la celebración de este homenaje, Olga Lucas, compartió cómo «cuando la persona con quien tienes estructurada tu vida es tan querido, y también odiado por una minoría, te enfrentas a un duelo interminable, vives toda la vida con Sampedro, aunque no esté».

Por su parte, la poeta incluyó en el legado dos carpetas con textos manuscritos, uno dedicado y otro en una fase de redacción muy inicial, de los cuales no desveló más información. Su contenido se hará público cuando la caja se abra dentro de diez años, «cuando previsiblemente yo ya no esté», indicó.

Para cerrar el acto, Olga Lucas recitó el credo personal de José Luis Sampedro, a modo de síntesis de su pensamiento: «Creo en la humanidad siempre ascendente, creo en la vida perdurable. Amén».

Al evento, también asistieron como testigos los representantes de la Asociación Amigos de José Luis Sampedro, Amaya Delgado, su presidenta y José Manuel Lucía Megías, secretario de la asociación, entidad promotora del homenaje y a la que la poeta Olga Lucas agradeció especialmente «su esfuerzo sin regateos» en dar a conocer y preservar la obra y pensamiento de Sampedro.

sábado, 6 de mayo de 2023

LEONARDO TORRES QUEVEDO El documento que lo reconoce como precursor del control remoto entra en la Caja de las Letras

• Cartas manuscritas, una docena de publicaciones y referencias de sus inventos como el transbordador de las cataratas del Niágara o el husillo sin fin, también conforman el legado

• García Montero: «Mirar a la ciencia es un empeño del Instituto Cervantes»

Foto SER


        L.M.A.

https://www.youtube.com/watch?v=wp_zUgyEDEo&ab_channel=InstitutoCervantes

        Madrid, 5 de mayo de 2023.- La Caja de las Letras atesora desde hoy un amplio legado que representa las numerosas aportaciones del ingeniero e inventor Leonardo Torres Quevedo. Entre los objetos depositados, cartas y manuscritos; una docena de publicaciones, con libros, monografías o catálogos; postales y un calendario del transbordador de las cataratas del Niágara proyectado por él; y el «Milestone» otorgado por el Instituto de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos que reconoce la primicia del ingeniero en el desarrollo del control remoto, por sus trabajos realizados 1901 con la creación del telekino.

    El director del Instituto Cervantes, Luis García Montero, celebró cómo el legado de esta figura inspiradora y pionera en el desarrollo de las nuevas tecnologías pone de manifiesto que «la ciencia y las humanidades van de la mano si lo que queremos es que la cultura esté al servicio de los seres humanos y del compromiso con el futuro». En el contexto de un momento «significativo, ahora que dialogamos con las máquinas», añadió.

Además, García Montero recordó que «mirar a la ciencia es un empeño del Instituto Cervantes», el cual custodia los legados de figuras como Margarita Salas, Santiago Ramón y Cajal, Severo Ochoa o María Vallet-Regí.

    El presidente de la Real Academia de Ingeniería y patrono del Instituto Cervantes, Antonio Colino, destacó el perfil académico de Torres Quevedo (Cantabria 1852 - Madrid, 1936), miembro de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de Madrid, de la que fue presidente en 1901; y de la Real Academia Española, en 1920. Colino aventuró que el pionero en los campos de la robótica, la cibernética y la informática «hoy habría sido uno de los más distinguidos representantes de nuestra academia», fundada con posterioridad a su fallecimiento.

    El patrono del Cervantes recordó que «la tecnología no es solo cultura, sino que la modifica y la transforma para mejorar el bienestar de la sociedad», por lo que consideró «muy adecuado que los ingenieros entren en la Caja de las Letras».

    En el legado también participaron la nieta del investigador, Mercedes Torres Quevedo y González Camino, quien agradeció «esta celebración tan emotiva en nombre de nuestro abuelo Leonardo»; el ingeniero y académico Francisco González de Posadas y el profesor de Historia de la Ciencia de Universidad Complutense de Madrid, Francisco González Redondo. Todos ellos introdujeron en la caja nº 1275 los diversos objetos que conforman el depósito.

Invenciones sin fin de Torres Quevedo

        El legado contiene varias piezas manuscritas de principios del siglo XX, dos cartas autógrafas originales firmadas de Torres Quevedo, con sus sobres y matasellos, enviadas a su sobrina Ana Torres-Quevedo Allsop (1924 y 1928, respectivamente); y varios calcos originales de cartas remitidas por el ingeniero a diferentes personalidades e instituciones desde el Centro de Ensayos de Aeronáutica-Laboratorio de Automática (1918).

    El Transbordador Spanish Aerocar, invención del ingeniero que aún se encuentra en funcionamiento, también entró en la Caja de las Letras representado por varios objetos, tres tarjetas postales de 2007 y un calendario del año 2009, de la tienda de recuerdos de la Cataratas del Niágara. Otro objeto de gran volumen que entró a la caja acorazada es el husillo sin fin, una máquina para resolver ecuaciones algebraicas, representado por una lámina de la obra de Sorolla.

    Entre las publicaciones, sobresale el «Milestone», una distinción otorgada por el Instituto de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos (IEEE) que destacar los hitos más representativos de la historia de la ingeniería eléctrica y electrónica. En 2006 reconoció la primicia del ingeniero en el desarrollo del control remoto gracias a la creación del telekino en 1901, el antecesor del mando a distancia actual.

    Además, siete libros, publicados entre 1994 y 2022, sobre la figura del inventor y sus patentes, entre los que se encuentran las ediciones numeradas trilingües (español-francés-inglés) de los «Ensayos sobre Automática y el Aritmómetro electromecánico» (1996) o sobre las patentes del Transbordador (2006), ambas preparadas por Francisco González de Posada.

    Al legado se incorporan, además, un amplio conjunto de publicaciones: dos monografías publicadas en 1938 y 1985, la última con motivo del 50.º aniversario de su muerte; dos catálogos, publicados en 1985 y en 1989 de las exposiciones celebradas en Santillana del Mar y San Sebastián; y dos revistas, un ejemplar de «Los Cántabros» (2017) y el número dedicado a la figura de Torres Quevedo por la «Revista de la Asociación Española de Ensayos no Destructivos» (2019).

«El ingeniero total»

    La gran capacidad creativa de Torres Quevedo se manifestó en numerosos ámbitos de la ciencia. En la aeronáutica y transporte patentó la binave, creó el sistema autorrígido para los dirigibles y desarrolló transbordadores y funiculares, entre ellos el Spanish Aerocar de las cataratas del Niágara (Canadá), aún en funcionamiento. En radiocontrol estableció, con el telekino —primer mando a distancia de la historia—, los principios de los sistemas de control inalámbricos; además de concebir máquinas de cálculo analógicas y electromecánicas o un robot ajedrecista, considerado primer videojuego.

    En un homenaje posterior participaron el rector de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), Guillermo Cisneros Pérez; el director de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos (ETSICCP) de la UPM, José Miguel Atienza Riera; El decano del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, Ezequiel San Emeterio; y el presidente del Instituto de la Ingeniería de España, José Trigueros Rodrigo.

    A continuación, el profesor Francisco González Redondo, especialista en la figura del inventor y autor del libro «La obra de Leonardo Torres Quevedo» (2022) dictó la conferencia «El ingeniero total... y académico de la Española».