martes, 15 de octubre de 2024

DÍA DE SANTA TERESA Y OTRAS ESCRITORAS Y ARTISTAS MUJERES

Santa Teresa de Jesús, escritora y santa. Patrona de Europa (1515-1582).


Julia Sáez-Angulo

15/10/24 .- Madrid.- Cuius regio, eius religio es una frase latina que significa, que la confesión religiosa del príncipe se aplica a todos los ciudadanos del territorio. Esto mismo, como en tiempos pretéritos de la Historia, lo aplican los políticos actuales con sus ideas y creencias, al decir de Ortega y Gasset. ¿Qué no me van las corridas de toros?, pues retiro el Premio Nacional de Tauromaquia y miro al torero El Juli con ostensible distancia, para que se note mi posición dogmática. Eso es lo que ha hecho Urtasun, ministro de Cultura de España.

¿Cuándo aprenderán estos políticos a dejar más libertad de opinión y actuación a los ciudadanos, más allá de sus ideas y creencias? ¡Un poco más de liberalismo, por favor! El exceso de legislación puede arruinar la vida, que como dice el viejo aforismo jurídico, “la vida es más rica que la norma”.

Pero yo iba a hablar de las mujeres escritoras, el día de su santa Teresa de Jesús, mujer audaz y maravillosa que tuvo también que enfrentarse a ciertas fuerzas vivas de su momento.

Vengo observado que muchos de los premios nacionales se otorgan a solo a mujeres desde hace un tiempo, y se adquieren más obras de pintoras o escultoras como Luisa Roldán, La Roldana, para los museos españoles, haciendo notar el Gobierno en su comunicación institucional que así se convertirá “en una de las más importantes novedades que se presentarán al público próximamente en la exposición monográfica ‘Luisa Roldán. Escultora Real’, que celebrará el Museo Nacional de Escultura, en su sede del Palacio de Villena, entre el 28 de noviembre de 2024 y el 9 de marzo de 2025. La muestra se podrá visitar gratuitamente y busca reivindicar la figura de la genial artista sevillana. Será la primera exposición monográfica que esta institución dedica a una mujer artista”. ¡Gran escultora esta Roldana!

A mí esta nueva atención sobre las mujeres escritoras o artistas me parece un tanto compensador del trabajo literario o artístico de las mujeres en el pasado, por el solo hecho de ser mujeres. Ahí están los casos sangrantes de doña Emilia Pardo Bazán ante su posible ingreso en la Real Academia de la Lengua (Clarín, buen escritor, pero opositor cínico a su entrada, debiera estar sepultado bajo siete llaves, como se dijo del sepulcro del Cid); Fernán Caballero, que tuvo que recurrir al pseudónimo masculino; María de Lejarraga, con su literatura escrita y firmada por su marido para que se abriera mejor camino… y tantos otros ejemplos.

Ahora son los hombres literatos o artistas los que se ponen nerviosos e indignados ante la repetición de nombres femeninos en la palestra oficial o institucional, lo que debe llevarles a meditar en la rabia e impotencia que debieron sentir muchas mujeres en el pasado, ante el muro masculino.

Lo malo es que esta atención a las mujeres no siempre hace caso a su valía específica, sino al sectarismo ideológico y/o estético de la mujer seleccionada, en aras de atender a la hegemonía de un feminismo radical, que se cuela con fuerza política en los partidos, más que con criterio artístico. Véase si no la calidad de alguna obra de las féminas premiadas, que me parece un bodrio, como la del reciente Premio Nacional de Poesía. Solo faltaba que los hombres piensen que se dan premio a las mujeres para equilibrar pasado o equilibrar la cuota, cuando solo se cuida la clientela votante.

En resumen: atención a las escritoras y a las artistas, ¡sí!; feminismo cuantitativo y no cualitativo, ¡no! Hay muy buen caladero de autoras en la literatura y en las artes para elegir, no solo por su sexo. Pero ¿qué vamos a esperar del sectarismo antidemocrático de quienes cancelan y censuran a José María Pemán y toleran sin reservas al autor de la “Oda a Stalin”, Rafael Alberti, que abandonó, en su día, a Miguel Hernández. Sectarismo puro y duro. Un poco más de tolerancia para todos, en lo público, por favor. “El ciudadano tiene derecho a equivocarse”, decía Juan Benet.

3 comentarios:

José Elgarresta dijo...

Espléndido y valiente artículo escrito por una mujer que sí demuestra la igualdad de ambos géneros con su obra. Ojalá se la tenga más en cuenta.

Emilio Porta dijo...

Buen artículo, Julia, con alguna precisión, además, importante por tu parte, que alabo, igual que alabo tu labor como creadora y difusora de la cultura. Pocos han defendido a la mujer, en todas sus vertientes y capacidades, y han luchado por la igualdad profesional y de derechos de hombres y mujeres como yo. Así que puedo, desde ese campo de actuación y valoración, no desde el contrario, hablar con libertad. Lo del Premio Nacional de Poesía a Chus Pato no hay por donde cogerlo. Ni siquiera es un premio al feminismo. Es un premio al sectarismo, el amiguismo y la ignorancia. Que es lo que impera en este país hoy y desde hace siglos. Pero que Quevedo y Góngora fueran amigos (a pesar de sus disputas) o que la generación del 27 estuviera unida por amistades e intereses comunes, tenía un pase: la calidad de las obras y la cultura de los autores. Lo que está ocurriendo ahora es de vergüenza ajena. Doña Emilia Pardo Bazán, Ana María Matute, Carmen Martín Gaite, Carmen Conde, María Zambrano y muchas predecesoras del valor de la mujer en la Literatura, saltarían de sus asientos indignadas. Y no te digo nada Teresa de Cepeda y Ahumada.

Julia Saez Angulo y Dolores Gallardo dijo...

TOMÁS PAREDES: Julia, valiente veraz. Gracias. Tomás Paredes