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martes, 14 de febrero de 2023

LOURDES VENTURA en el ciclo "Escritoras hoy", coordinado por María Antonia García de León en la Casa Castilla-La Mancha


Lourdes Ventura (izda) y M. Antonia G. de León



Julia Sáez-Angulo

15/2/23.- Madrid.- La escritora Lourdes Ventura ha sido la protagonista en el ciclo “Escritoras hoy”, coordinado por la escritora y socióloga María Antonia García de León en la Casa Castilla-La Mancha de Madrid. El acto lo abrió el director de la entidad, José Fernando Sánchez Ruiz, quien expuso la programación cultural de la Casa y elogió a la autora presentada, en especial por su ensayo “La tiranía de la belleza”.
En el auditorio estuvieron presentes numerosas escritoras y artistas visuales, que participaron en el coloquio final, entre ellas: Inmaculada de la Fuente, Ana Ortega, Aurelia de Duarte, Asunción...
Lourdes Ventura (Palencia, 1956), residente en Madrid es periodista, ensayista, novelista, crítica literaria, Doctora en Literatura por la Universidad de Pau (Francia), ha sido galardonada por su labor en las Letras y tiene en su haber una decena de libros publicados.
La conversación entre las dos escritoras transcurrió animadamente, conversando sobre la novela y su situación actual, que goza de muy buena salud, incluida la edición en papel. Ventura habló de los narradores narcisos y los esquizofrénicos, poniendo algunos ejemplos: los que  cultivan la ficción del “yo” y los que se desdoblan en otros personajes, que también contienen algo del “yo”.
También habló de las corrientes en la novela de hoy y señaló fundamentalmente dos: la corriente sórdida del realismo sucio y la autoficción o escritura del yo, ilustrándola con algunos nombres femeninos y ejemplos.
Lourdes Ventura elogió el rigor de la revista británica GRANTA en la crítica literaria y lamentó no encontrar con frecuencia esa fidelidad en la crítica literaria española. También resaltó la diversidad de criterio en los premios literarios y subrayó: “Es difícil que en uno de los grandes galardones literarios franceses se premie una novela mala o mediocre, mientras que en España sí ha sucedido”.
La autora declaró que estima “la poesía como un género sagrado y se es poeta o no se es”. Comentó someramente como se crean los cánones literarios en la actualidad, donde no falta la propaganda o publicidad excesiva de algunas editoriales, como lo demuestra una novela de 900 páginas muy publicitada en los últimos días
En el coloquio, Lourdes Ventura elogió la aportación de la narrativa hispanoamericana a la literatura en España y se mostró lectora y admiradora del escritor argentino Borges.
        La próxima escritora que intervendrá en el ciclo será la hispanista francesa Bénédicte de Buron-Brun.






jueves, 14 de mayo de 2020

Lourdes Ventura: Una vuelta de tuerca a una nueva novela

Lourdes Ventura en la lectura de su reciente tesis doctoral en Pau. Francia

 Lourdes Ventura, escritora


 Julia Sáez-Angulo

     15.5.20 .- Madrid .- Lourdes Ventura es novelista, ensayista y crítica literaria. Es Doctora en Literatura y Licenciada en Ciencias de la Información. Ha vivido en Londres, París y Los Ángeles. Es autora de las novelas Fuera de temporada (Planeta, 1994), Dónde nadie nos encuentre (Planeta, 1997), Casa de amantes ( Plaza & Janés, 2000), El poeta sin párpados (Destino, 2002), La cantante de Hotel (La Esfera de los Libros, 2003). De los ensayos, La tiranía de la belleza (Plaza&Janés, 2000) y La mujer placer. Hacia un nuevo hedonismo femenino (Belacqua, 2004). Es coautora de libros colectivos de relatos, entre ellos, Fobias, Diez escritores cuentan sus miedos (La Esfera Literaria, 2002), Frankenstein (451 Editores, 2008), 5X2=9. Diez miradas contra la violencia de género (Peninsula, 2009).
     Ha participado en numerosos congresos y libros universitarios de ensayo y ha escrito los prólogos a varias novelas.  Fue coganadora del Premio Nacional de Urbanismo, por la redacción del Plan de Ordenación Urbana de Madrid, y coganadora del Premio Nacional de Fomento a la Lectura, por el programa radiofónico, Autor, Autor, donde realizaba la crítica literaria. Sus obras han sido traducidas al francés y al inglés. Fue finalista del Premio Jeann Monet de Literatura Europea por Le poète sans paupières (Buchet Chastel, 2005), y ha sido escritora europea invitada en la Villa Yourcenar. Jurado de  premios literarios en España y Francia, en la actualidad es crítica de “El cultural” del diario El Mundo, y de “Nueva Revista”.

1.- ¿Qué le ha supuesto el periodismo en la vida?
 En realidad, desde muy joven me decanté por el periodismo cultural, pensando en dedicarme más tarde a la creación literaria. Eso me permitió, mientas estudiaba la carrera, trabajar en un periódico ya a los 20 años y estar cerca de escritoras, filósofos, pintores, creadores en general. He sido una privilegiada al entrevistar y conocer a Jorge Luis Borges, a Cela, a Rosa Chacel, a Carmen Martín Gaite, que fue una buena amiga, o a Alberti, por ejemplo. Aprendí cerca de grandes artistas y periodistas a explorar y degustar la literatura, la pintura,  la música, el buen cine. Siempre quise ser escritora, pero la base cultural la adquirí en el periodismo, junto a amigos de mi primer trabajo en la Sección de Cultura de Diario 16; personas queridas, que ya no están, que fueron fundamentales en mi aprendizaje cultural: Juby Bustamante, Ángel Fernández-Santos, Carmen Martín Gaite, Miguel Logroño. Me dieron alas, para más tarde atreverme yo misma a ser novelista.

2.Ud. ha hecho mucha crítica literaria. ¿Cuál es el secreto de una     buena crítica?
Hay muchos estilos de crítica, y ninguno es mejor que otro.  Si tuviera ese secreto, se lo diría y lo aplicaría. Pero no lo tengo. Lo que humildemente trato de hacer es dejar que brille en la reseña lo que creo que quiso hacer la autora o autor del libro, al menos lo mejor de ese intento, de ese modo no se engaña al público lector. Me interesa que las futuras lectoras o lectores sepan con qué tipo de novela o ensayo se van a encontrar. Para eso hay que contagiarse un poco del espíritu del autor de la obra. Y en esa medida, como crítica trato de quedar escondida, para que se adivine más a quién ha escrito el libro que a la persona que lo juzga.

3.¿De donde le vino ese interés por la literatura femenina?
  En mi familia eran grandes lectores, tanto mi madre, hija y nieta de directores de periódicos, como mi padre, y también mis  hermanos varones.  En casa había una excelente biblioteca para jóvenes y adultos. Desde muy niña leía los libros de  aventuras de Salgari, Julio Verne, Defoe, Kipling, hasta que un día descubrí en los volúmenes pequeños de Aguilar, los llamados crisolines, tres novelas que me impactaron, escritas por tres mujeres inglesas: Jane Eyre, de Charlotte Brontë, El doctor Frankenstein, de Mary Shelley, y Cumbres borrascosas, de Emily Brontë. Encontré una escritura que me emocionaba, intensa y muy  afinada en las descripciones psicológicas. Desde entonces me volví una buscadora de buena literatura escrita por mujeres. 

4.Virginia Woolf sería la cristalización de lo mejor en narrativa de mujeres?
Woolf consiguió que las obras literarias de las mujeres se juzgasen al mismo nivel que las de los hombres. Y además fue pionera en teorizar sobre la literatura escrita por mujeres; fue editora, diarista y también crítica literaria. Con ella la profesión de escritora, que hasta unos años antes era juzgada como algo de diletantes y “marisabidillas”, se convirtió en una profesión respetable.

5.La narrativa inglesa femenina ¿es la mejor?
Nunca diría eso. Es una costumbre muy masculina establecer categorías en el “canon” literario y hacer listados de quién es el mejor, o quién va por delante de quién.  Hay épocas doradas en un determinado país; en el caso de las mujeres, las victorianas dejaron una herencia colosal; pero las mujeres de la generación del 27 en España, Teresa León, Rosa Chacel, María Zambrano y muchas otras, alcanzaron niveles que sólo en estos años se empiezan a vislumbrar y a valorar. O el tiempo, muy creativo, del nouveau roman francés con Sarraute, Marguerite Duras. Y así podríamos seguir por épocas y por países.

6.    ¿Cuál destacaría de la literatura femenina española?
La obra  Nada, de Carmen Laforet, fue la mejor novela española, entre hombres y mujeres, de su generación. Carmen Martín Gaite ha sido un caso de “escritora total”, novelista, gran ensayista, crítica, memorialista. Por otra parte, las mujeres del 27 ya citadas, y todavía por conocer sus obras por el gran público. Destacaría a la generación de catalanas de finales de los 70.  Esther Tusquets cambió el paradigma de la escritura de mujeres en España, y en ese grupo estarían Montserrat Roig, Ana María Moix, y otras menos conocidas. Abrieron caminos a estupendas escritoras de los 80 como Soledad Puértolas o Cristina Fernández Cubas.

7.Su tesis doctoral en la Universidad de Pau ha sido sobre  las escritoras de la Generación del 27.  ¿Qué resaltaría de ella?
Mi tesis doctoral se centró en la Generación del 27 y en demostrar  la pertenencia a ese grupo literario de un puñado de mujeres escritoras, entre las que había filósofas, novelistas, poetas y memorialistas. Lo que resaltaría es lo mucho que me queda por trabajar en ese campo, pese a haberme doctorado con felicitaciones del Tribunal.

8.La pintura ha estado muy cerca de Ud. por su marido el pintor Fernando Verdugo. ¿Qué destacaría del lenguaje pictórico respecto al literario?
Aquí hablo por experiencia personal, porque, lógicamente, cada creador tiene su dosis de placer y sufrimiento. Creo que los pintores o escultores, al ser el suyo un trabajo corporal, en el que se movilizan las manos y todo el cuerpo, y la obra suele ser más física, disfrutan más; es un acto más espontáneo, o al menos se olvidan más de ellos mismos mientras trabajan y se manchan las manos de pintura o mueven los lienzos de un lugar a otro. Los escritores somos más autoconscientes, porque cada palabra resuena en nosotros y puede ser más torturante la corrección o la sensación de que no conseguimos lo que querríamos expresar con palabras. Mi marido sale iluminado de su estudio, y yo acabo de una jornada de trabajo como si hubiera estado con un arado labrando la tierra.

9.Cada autor tiene y ha tenido una pléyade amigos en su trayectoria. ¿Cuáles han sido y son los suyos?
Aunque estoy muy cerca de muchos amigos y compañeras novelistas y ensayistas, voy a citar sólo a tres mujeres, para seguir en esta línea de escritoras. He hablado de Carmiña Martín Gaite porque fue mi primera amiga escritora, y una suerte de faro en mi trayectoria. Tengo dos cómplices literarias a quiénes quiero y admiro por su impresionante escritura y por su estatura como personas y artistas, Irene Gracia, las dos iniciamos nuestra andadura  juntas en la misma colección, y la escritora franco-española, Mercedes Deambrosis. Tuve la gran suerte de que fuera mi editora en Francia y más tarde mi amiga.

10.¿Qué libro está leyendo actualmente?
Tengo en mis manos las galeradas, está a punto de salir a la venta, de Niña, mujer, otras, de Alianza, una novela de  la  británica Bernardine Evaristo, que ganó el Booker Prize en 2019.

11.¿Qué tres libros de autoras recomendaría?
Los errantes ( Anagrama, 2019) , de la Premio Nobel polaca, Olga Tokarczuk; Cuentos completos (Seix Barral, 2011), de Lydia Davis; y Un debut en la vida (Libros del Asteroide, 2018), de Anita Brookner.

13.¿Que proyectos literarios se trae entre manos?
Mi ritmo de trabajo se ha visto afectado por la pandemia. El confinamiento, pese a vivir cerca de la naturaleza, lo estoy pasando con preocupación por amigos y familia, y con la incertidumbre ante el futuro. Me esfuerzo también por conservar la esperanza porque no podemos bajar la guardia. Con tranquilidad intento
darle otra vuelta de tuerca a una nueva novela. Los proyectos a más largo plazo, dos libros de ensayo futuros, me invitan a ir leyendo sin prisas y a tomar notas. Pero hay que buscar momentos de silencio y concentración y, también, dejar otros espacios para compartir con las personas queridas, para saber cómo están, aunque sea virtualmente, mientras todavía no podemos reencontrarnos.  En esta época de confinamiento la comunicación por whatsapp, que es directa y rápida, se ha convertido en algo que nos ayuda a mantenernos con ánimos.
Lourdes Ventura y Carmen Martín Gayte

"Crisolines" de lectura juvenil

domingo, 17 de febrero de 2019

RETRATOS Lourdes Ventura, periodista, novelista, ensayista, crítica literaria y doctora con magnífica tesis doctoral en Francia


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 Lourdes Ventura

Lourdes Ventura


Julia Sáez-Angulo


            17/2/19 .- MADRID .- A principios de los 90, me recibió junto a mi hija pequeña en su casa de Wimbledom, durante un fin de semana de un verano, en que ambas descansábamos en las islas británicas. Se lo agradecí enormemente y no lo olvido nunca, porque fue un consuelo, cuando yo entonces andaba como una garza malferida

       Lourdes Ventura me siguió invitando en Madrid y recibiendo más adelante, junto a otras escritoras –Ana Bikandi, Carmen Santamaría, Julia Arroyo...- en su casa de Las Vistillas, desde la que se veía la mejor iglesia de la Villa y Corte: san Francisco el Grande. Allí tomábamos el té sobre manteles de hilo y porcelana primorosa de la anfitriona.

            Trabajé con Lourdes Fernández-Ventura Álvarez (Palencia, 1956) –Lourdes Ventura para la Literatura, que es como entrar en religión- en el gabinete de prensa del Ministerio de Cultura, donde hicimos tareas juntas, hablamos mucho de libros y arte e incluso tuvimos unas diferencias puntuales por colisión, a la hora de disfrutar de unos días libres que llamábamos moscosos. La tensión duró apenas dos días.

            Como nos hemos tratado mucho, sé que ella fue “la niña del milagro”. Me va a matar por contarles esto, pero fue así. En su casa solo nacían niños y, entre tanto varón, su madre ansiaba una hembra. Viajó al santuario de Lourdes, imploró a la Virgen y en su siguiente parto alumbró una niña bonica y lista, que apuntaba maneras desde la cuna: “la niña del notario” José Fernández-Ventura, según supo toda Palencia. Su nombre, naturalmente, no podía ser otro que el de Lourdes. Le vino bien jugar y bregar entre hermanos varones en la pinada (no se dice pineda en ciertos puntos de la geografía peninsular) de Guardamar del Segura (Alicante), donde veraneaba toda la familia. Lourdes sabe hablar con precisión, placar y llamar a las cosas por su nombre llegado el caso.

            Siempre me atrajo la inteligencia y por tanto la mente de esta mujer periodista, narradora, ensayista, crítica literaria, novelista... escritora en suma. Hay que estar y tratar con gente inteligente, porque la estulticia es contagiosa. Y ella, además de lista, guapa. La vida, ya se sabe, no es equitativa.

            He vivido con emoción todos sus alumbramientos literarios, porque su escritura es cuidada y hermosa. Tiene lenguaje y voluntad de estilo. Pule cada frase y cada párrafo, porque es perfeccionista.  Yo la he visto auscultar mis libros con pensamiento crítico. Entre los títulos de sus libros figuran: Fuera de temporada (1994), Donde nadie nos encuentre (1997), Casa de amantes (2000) y El poeta sin párpados (2002) sobre Gustavo Adolfo Becquer y la época romántica en España. También tiene el ensayo La tiranía de la belleza (2000), expresión que hizo fortuna por doquier.

            Su amistad con el filósofo y sociólogo francés Gilles Lipovestki es harto conocida. Le hemos visto en actos culturales conjuntos y a la hora de las fotos, el galo, asombrosamente, echaba su brazo a los hombros, como si estuviéramos en una verbena.  A Lourdes también la he visto coordinar un diálogo sabroso con el escritor chileno Jorge Edward en la Fundación Telefónica. Ella fue la escritora europea invitada a la Villa Marguerite Yourcenar en 2007.

            Siempre me pareció anglófila, y lo es, porque vivió largos meses en Inglaterra y ha escrito números artículos y críticas literarias sobre escritoras anglosajonas con Virginia Woolf a la cabeza, mayormente en el diario El Mundo, pero de pronto en Francia prestaron atención a su literatura y le tradujeron algunos de sus libros. Ha impartido conferencias en universidades galas y obtenido el doctorado en la de Pau (ciudad dos veces real, por doble cuna dinástica) con una tesis sobresaliente cum laude sobre una escritora del 27, de la que va a extraer lo necesario para un libro.

            Es experta en literatura escrita por mujeres y sus estudios apreciaciones comparadas son de gran sagacidad y riqueza, tanto en conferencias, prólogos o artículos. Lourdes se defiende muy bien en inglés y francés, lo que le ayuda a entrar con holgura y suficiencia en la literatura de ambas lenguas europeas. Es una mujer observadora, además de inteligente y eso le honra.

            Tuvo la suerte al casarse con Fernando Verdugo, un sevillano gentil y excelente persona, amén de un sensible pintor con carrera en Holanda y España, principalmente, y que ha expuesto hace poco en Marsella. Yo vi las fotos de ese matrimonio en Sitges, en las que Lourdes estaba preciosa con un  sombrero blanco de pico hacia la frente y velo sobre media cara. Ella explicaba, que ciertos protocolos, incluidos los nupciales, hay que guardarlos, no en balde es uno de los hitos fundamentales de la Antropología (nacimiento, cópula y muerte), que requieren sus propios rituales y ceremonias en todas las culturas.

            Hace un par de años, Lourdes y Fernando se fueron a vivir a una casa en Villa del Prado (Madrid), que afronta una gran pinada desde la terraza y sus ventanas, algo así como un eco de la de  Guardamar. Allí se escribe y pinta divinamente, según Lourdes, al tiempo que la tenemos a un tiro de coche de la capital.

            Prepara una novela de la que, como las folklóricas, no suelta prenda y hace bien, porque luego se cuenta todo. Yo misma lo hubiera hecho de haberlo sabido, para eso soy periodista y me debo a mi publico, también como las folklóricas. Me muero de ganas por leerla. Las novelas de Lourdes Ventura son dignas de ser llevadas al cine.

Más información
http://revistas.educa.jcyl.es/revista_digital/index.php/lectura/entrevistas/3158-presentamos-a-lourdes-fernandez-ventura




 Lourdes Ventura

viernes, 22 de mayo de 2015

Lourdes Ventura, Exposición bibliográfica en las bibliotecas de Palencia




 Lourdes Ventura


L.M.A.

         La escritora Lourdes Ventura es la protagonista de la exposición que llevan a cabo la Biblioteca Pública de Palencia, su ciudad natal, durante el mes de mayo de 2015. El hecho es un reconocimiento a la trayectoria literaria de la autora.

Lourdes Ventura (Palencia, 1956) es novelista, ensayista y crítica literaria. Autora de las novelas Fuera de temporada (Planeta, 1994) ; Donde nadie nos encuentre (Planeta, 1997); Casa de amantes (Plaza &Janés, 2000); El poeta sin párpados (Destino, 2002) ,  y La cantante de hotel (La Esfera, 2003). Y de los ensayos La tiranía de la belleza (Plaza &Janés, 2000), con prólogo del filósofo José Antonio Marina, y La mujer placer. Hacia un nuevo hedonismo femenino (Belacqua, 2004),con prólogo del filósofo francés Gilles Lipovetsky, ambos ensayos han generado interesantes debates. Es autora de relatos en numerosos libros colectivos: Frankestein (451 Editores,  ); Otro final (451 editores) ; 5X2 = 9. Diez miradas contra la violencia de Género (Península, 2009) , un texto-documento contra la violencia machista que recibió en 2010 el Premio Violeta al Compromiso Cultural. Varias de sus obras han sido traducidas en Francia. Con la edición francesa de El poeta sin párpados  ( Le poéte  sans paupières. Buchet Chastel, 2005) fue finalista en 2006 del Premio Jean Monnet de Literatura Europea.

Lourdes Ventura tiene una reconocida trayectoria como estudiosa de la literatura escrita por mujeres. Ha dictado conferencias en diversos países, escrito críticas, ensayos y prólogos sobre Edith Warton, Virginia Woolf, Marguerite Duras, Marguerite Yourcenar, Colette, Margaret Atwood, Jane Austen, Sylvia Plath, Djuna Barnes, las hermanas Brontë, Mary Shelley, Doris Lessing, Alice Munro, Martín Gaite, Esther Tusquets, María Teresa León, Rosa Chacel, Laura Esquivel, Madame de Stäel, Simone de Beauvoir, entre otras muchas autoras.

L. Ventura

Licenciada en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid y en Literatura Hispánica por la Universidad francesa de Pau, donde en la actualidad cursa el doctorado, fue en 2007 escritora europea invitada en la prestigiosa Villa Marguerite Yourcenar, Centro Internacional de Literatura Europea, donde ha formado parte del jurado de selección de autores. Conferenciante en universidades de Europa y Latinoamérica sus ensayos sobre literatura han sido publicados en numerosas publicaciones universitarias y revistas de España y Francia.


El Premio Nacional de Promoción de la Lectura fue otorgado en 2008 al programa radiofónico "Autor, Autor”, en el que Ventura realizaba la asesoría literaria y la crítica de libros. Recibió en 1983 el Premio Nacional de Urbanismo, como Miembro del Equipo Redactor del Plan General de Ordenación Urbana de Madrid.


miércoles, 14 de mayo de 2014

Elvira González Fraga, autora argentina de la novela “La ofrenda” presentada en Madrid



Elvira González Fraga



Julia Sáez-Angulo


            La novelista argentina Elvira González Fraga es la autora de la novela La ofrenda, publicada por la editorial Losada y que ha sido presentada en la Casa del Lector de Madrid, por los escritores Lourdes Ventura y Juan Cruz. En la presentación estuvieron presentes, entre otros, Cesar Antonio Molina, director de la citada institución, la poeta argentina Noni Benegas y la escritora Fanny Rubio.

         La novela se puede adquirir en la madrileña librería Pasajes.

            Elvira González Fraga (Buenos Aires, 1942), esposa de Ernesto Sábato, es socióloga por la Universidad de Buenos Aires, donde fue profesora hasta 1976. Trabajó junto al P. Carlos Mugica en la zona de Retiro y con Augusto Roa Bastos en la jerarquización de los mitos y costumbres de los pueblos originarios.

            La ofrenda es la primera novela de Elvira González y versa sobre una mujer que se entrega, como "lugar para el otro". “Martina, mi protagonista no es feminista”, dice la autora; se trata de una mujer apasionada que ama, “una mujer en el límite, en el vértigo del amor”, señaló Lourdes Ventura. “La belleza del lenguaje de este libro araña como la arena”, añadió.

            “Martina es un personaje con la fuerza final. Ella ve que es un ser para el otro, un lugar para el otro”, se dijo en la presentación de la novela de la que la autora leyó algunos pasajes a los asistentes.

            Juan Cruz aludió a la diversidad de tonos de la novela en la que  “hombre y mujer se enzarzan corporalmente”, en la que “el hombre cava con pasión a la mujer”. También “la singular transición de la primera a la tercera persona en la narrativa, y su uso peculiar de las preposiciones”, se puso de manifiesto que “la protagonista siente señales de su infancia” y la autora explicó que había tomado muchos datos de su infancia y adolescencia para esta novela,  que no era en absoluto autobiográfica.

            Ventura destacó “la bajada a los infiernos por el alcohol, magistralmente contada con fuertes descripciones y capacidad de síntesis”. Elvira González Fraga dijo que había tomado el tema de “la experiencia de ser infiel a los propósitos tomados”.

            La autora señaló a Dostoievsky, a Bergman, y a Tennessee Williams como autores que le han influido notablemente, así como Pedro Páramo. “Me gusta la mezcla de lo real y lo irreal”, añadió.

            La fuerza de la naturaleza, la pampa en el comienzo y el mar en el final de la novela, fueron algunos de los aspectos que subrayó la presentadora. “El asfalto ha sustituido a los árboles”, dijo la autora.