lunes, 20 de septiembre de 2021

EL MONASTERIO DE PRESTADO, MONUMENTO HISTÓRICO CASI "INVISIBLE" Y MEDIO ABANDONADO EN EL ESCORIAL

* En manos de los evangelistas, la CAM les ha concedido una subvención de treinta mil euros, pero no se sabe cuando empiezan las obras




Monasterio de Prestado. s. XVI. El Escorial


"Post fata resurgo" escrito en el en el dintel


Julia Sáez-Angulo

20/9/2021.- Madrid.- El Monasterio de Prestado del siglo XVI, del que se conserva el edificio del Castillo, la casa  y chimenea del horno, forma parte importante de la historia de la villa de El  Escorial. Pese a ser un monumento histórico artístico emblemático, importante en la Historia, apenas resulta visible el interior a los ciudadanos o visitantes de forma periódica. 

    Ni el timbre suena, ni el supuesto teléfono fijo o el móvil dan respuesta al interés periodístico que deja mensajes. ¡Un muro! Solo habla con esperanza la inscripción latina del dintel de la puerta de entrada: Post fata resurgo. Rehacerse tras la desgracia.

    El Monasterio de Prestado fue residencia conventual de los monjes jerónimos entre 1562 y 1571, además de aposento de Felipe II durante las obras del Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, pero el Ayuntamiento de la Villa donde se encuentra, no se ocupa de dar sonoridad ni visibilidad permanente a este edificio histórico singular, como sí hace el municipio de San Lorenzo de El Escorial con el célebre monasterio filipino. 

    Siempre que se consulta a los funcionarios municipales, se escudan en que es propiedad privada, cuando los monumentos histórico artísticos están obligados a mostrarse al público de manera periódica, como por ejemplo lo hace el Palacio de Liria de Madrid y otros muchos. Después de insistir en distintos departamentos, el Archivo del municipio, informó tan solo de que era un “edificio a proteger", según la normativa de 1997 en actuaciones arquitectónicas. Nada se sabía de la subvención de la Comunidad de Madrid, CAM.

La CAM sí fue más explícita, porque en junio de 2021 "el Consejo de Gobierno en funciones aprobó destinar 30.000 euros para rehabilitar el edificio protegido El Castillo del antiguo monasterio de Prestado, situado en El Escorial, con el objetivo de preservar, recuperar y conservar el patrimonio histórico y cultural". Los trabajos de rehabilitación consistirán fundamentalmente en desmontar y retirar las actuales cubiertas e instalar unas nuevas. Los que hemos vistos crecer y acumulase la maleza de plantas sobre el tejado del monasterio de Prestado durante años, nos indignaba aquella dejadez y abandono, que más parecía esperar una interesada ruina o una suculenta subvención.

    (Los escurialenses de arriba pueden presumir de tener el monasterio más fascinante del mundo, pero los de abajo tenemos uno más recoleto, entrañable y antiguo, aunque -para vergüenza nuestra- no lo ponemos en valor. Y estaría llamado a ser BIC, es decir Bien de Interés Cultural)

    "El Ejecutivo regional ha autorizado la celebración de un convenio para colaborar en estas obras, por medio de una subvención directa al Consejo Evangélico de Madrid y sus entidades asociadas. La Fundación Federico Fliedner, entidad asociada al Consejo Evangélico de Madrid, es la propietaria del edificio protegido objeto de la rehabilitación. El Consejo Evangélico de Madrid reconoce la función social y el valor patrimonial de El Castillo y se compromete a conservarlo y mejorarlo, así como facilitar su contemplación y estudio", dice la información de la CAM. 

Situado en pleno centro, en la plaza junto al Ayuntamiento entre dos aésculos (encinas), el Monasterio de Prestado de la Villa de El Escorial tendría que ser el monumento más querido y representativo de los escurialenses y estaría llamado a ser, como mínimo un centro de interpretación de su historia que es también la historia del lugar y de España, pero no parece haber intención ni ánimo para hacerlo. 

    El hecho de que no quede mucho del antiguo monasterio no es óbice, pues ahí están la Casa de Cervantes en Alcalá de Henares o la de El Greco en Toledo, verdaderos modelos de recreación histórica, que ilustran con creces a los visitantes. A los que tenemos casa en El Escorial, nos duele el desinterés, desidia y displicencia, que hemos encontrado en las instituciones municipales y propietarias privadas. 

    Las asociaciones de amigos culturales del lugar parecen ocuparse más por la protección de la Naturaleza (algo loable) que por los vestigios de la historia escurialense local. Inclúyase aquí las importantes y desconocidas bóvedas de conducción hídrica, del tiempo de Felipe II, situadas bajo el terreno de la urbanización Parque Real, en concreto bajo el Salón del Reino de los Testigos de Jehova, hoy cerrado a cal y canto. Algún día se derrumbarán y nos lamentaremos todos a menos que se esconda el hecho. Falta una figura clave que reclame, no solo La Granjilla de los Aguirre, sino ese patrimonio que está inmerso en pleno centro del Villa.

Cierto que en algunas ocasiones se han llevado a cabo alguna exposición en la sede del Monasterio de Prestado, pero pasadas las mismas, una enorme opacidad se posa en el monumento, con el que no es fácil, más bien imposible, entrar en contacto La Fundación Fieldner, alemana, ha utilizado en ocasiones el monasterio como alojamiento rural o como centro de reuniones de evangelistas.

    Entre 1576 y 1579, el Monasterio de Prestado -muchos ciudadanos de la villa no saben siquiera cual es- sirvió como hospital social para los más desfavorecidos de la zona. En 1607 pasó a ser taller artesano de vidrio y desde 1880 pasó a propiedad privada y pertenece a la familia Fliedner y se restauró en parte el edificio  destruido tras la Guerra de la Afrancesada en 1808, gran azote del patrimonio histórico artístico en El Escorial, que lo conmemora con una fuente monumento en la que el águila napoleónica se presenta sujeta y presa.  

    La construcción originaria del Monasterio de Prestado era de piedra y ladrillo. El conjunto arquitectónico constaba de capilla, sacristía, accesos independientes para las habitaciones del rey y de los monjes. Esto se completaba con las caballerizas, casa de los servicios del rey y un patio donde se localizaba un pozo. 

    El monarca subía al lugar que se denomina como "Silla de Felipe II", en los montes de la Herrería para contemplar la marcha de la construcción de su espléndido monasterio en San Lorenzo y cuando descendía, se alojaba en el modesto monasterio de Prestado.

    En la CAM no se sabe cuando comenzarán las obras de rehabilitación del tejado, abandonado con la desidia de hierbajos durante años que llamaba la atención de los paseantes. No hay forma de entrar en contacto con el monasterio de Prestado ni con la Comunidad Evangélica propietaria. Quizás se pretenda sepultar el pasado y la memoria de Felipe II en el Monasterio de Prestado. La damnatio memoriae -condena de la memoria- está muy de moda y se practica desde los romanos. Confío en el lema del dintel de Monasterio de Prestado: Posta fata resurgo. Que resurja después de los avatares, como un Ave Foenix. Así sea.

Chimenea de Monasterio de Prestado

9 comentarios:

Emilio Porta dijo...

De gran interés. Quizás ayude a que se restaure más a fondo. Cuando he pasado por delante nunca pensé que era una parte tan importante de nuestra historia. Espero que lean el artículo aquellos que, teóricamente, se ocupan de la cultura y el patrimonio. Y se de a Prestado algo que más que un préstamo de 30.000 euros a fondo perdido :) Yo, que, en la memoria, también soy de El Escorial de abajo - y siempre en el tiempo de El Escorial de arriba - no olvido tantas noches subiendo la cuesta hacia las estrellas en la noche de San Lorenzo para ver las Perseidas sobre las rocas cercanas al antiguo Hotel Felipe II. Porque El Escorial es uno de los lugares más cercanos al cielo en la Tierra.

José María dijo...

Mi más cordial enhorabuena por el artículo. Estoy muy de acuerdo y lo apoyo. No sé si la solución propuesta es la más adecuada; alguien sabrá más que yo de derechos, pero pienso que, como otras entidades de estos pueblos y de otros que por circunstancias "extrañas" son propiedades particulares deberían pasar a ser de dominio público, del pueblo. Tampoco sé la manera si sería con indemnizaciones o por otros medios. Va siendo hora de que lo que fue púbico, vuelva a serlo.

Julia Saez Angulo y Dolores Gallardo dijo...


Felipe Bárcena:


Me gustó tu artículo sobre el monasterio de Prestado. Abrazos.

Julia Saez Angulo y Dolores Gallardo dijo...

Isabel Diez Serrano:

Es una lástima desamparar estos patrimonios que otros cuidarían con el esfuerzo y cariño que se merecen para nuestra Historia

Isabel

Julia Saez Angulo y Dolores Gallardo dijo...


Lucrecio Pérez Blanco


Después de años en El ESCORIAL YO NO CONOCÍA ESTE EDIFICIO. EL GRAN MONASTERIO ME LLENABA SOBRADAMENTE. DE ESTE CONOCÍA HASTA LOS SÓTANOS Y ALTURAS QUE VISITÁBAMOS DE VEZ EN VEZ.
GRACIAS Y SALUDOS,
LUCRECIO

Julia Saez Angulo y Dolores Gallardo dijo...

Rosaura cueva


Querida Julia muy encomiable y de agradecer este alegato a favor del monasterio de Prestado.
Que con tanta sensibilidad describes y defiendes.

Uno más de los innumerables edificios monumentos y vestigios españoles abandonados en manos de la desidia por nosotros mismos.

Cualquier otro pueblo cualquier otra nación valora el más mínimo vestigio antiguo que tenga en su suelo.

Pero los españoles no lamentablemente así somos.

Unknown dijo...

puedo publicar esta foto con vuestro permiso para un libro que estoy escribiendo sobre el escorial, antes de pegarla me gusta consultar para evitar problemas legales, mi correo es jmarotoramiro@gmail. com, espero respuesta, ya casi terminando y solo me faltan las fotos, muchas gracias.

Julia Saez Angulo y Dolores Gallardo dijo...

por mi parte
no hay inconvemiente en publicar las fotos

Anónimo dijo...

He leído tu artículo sobre el monasterio de prestado. Aunque me ha parecido muy interesante tu alegato a la conservación del patrimonio histórico, quier añadir que después de los Flandes compraran toda la manzana y restaurará los edificios nunca han estado abandonado ni deteriorado. En el hubo un colegio, el jardín lo hizo mi padre, en la casa de la chimenea vivió mi abuela y después de ella vivió mi familia. Ha sido un lugar cuidado, mimado y sobretodo disfrutado