LEONORA CARRINGTON. REVELACIÓN
Fechas: Del 11 de febrero al 7 de mayo
Lugar: Sala Recoletos (Paseo de Recoletos, 23. Madrid)
Comisarios: Tere Arcq, Carlos Martín y Stefan van Raay
Exposición organizada por Fundación MAPFRE en colaboración con el ARKEN Museum of Modern Art de Dinamarca.
Leonora Carrington
Artes, 110, 1944
Colección Stanley and Pearl Goodman, NSU Art Museum, Fort Lauderdale, USA
© Estate of Leonora Carrington / VEGAP, Madrid, 2023
L.M.A.
10.02.- 2023.- Madrid.- “Leonora Carrington. Revelación” es la primera exposición antológica consagrada a esta artista que se celebra en España. Autora versátil y ecléctica, continuamente en busca de nuevas formas de expresión, Carrington resulta una figura clave para formar una imagen más completa del arte del siglo XX.
Adelantada a su tiempo en su preocupación por la ecología y los derechos de la mujer, la autora desarrolló un lenguaje con el que evocó «un mundo fascinante de rituales mágicos donde nada es lo que parece y suceden las más increíbles transformaciones», en palabras de Tere Arcq, comisaria de la exposición junto con Carlos Martín y Stefan van Raay, director del Cobra Museum voor Moderne Kunst de Amstelveen, en Países Bajos.
‒Fundación MAPFRE presenta en Madrid la primera retrospectiva de Leonora Carrington en España. ‒La muestra recorre la trayectoria completa de la artista, que aborda toda su personalidad artística: su producción como pintora, escultora, escritora y creadora de tapices. ‒Comprometida con el medioambiente y la situación de la mujer en la sociedad, estos aspectos son tratados a lo largo del recorrido expositivo. ‒
Este proyecto es el resultado de una profunda labor de investigación realizada por el equipo curatorial, que ha permitido sacar a la luz obras nunca expuestas al público y otras que salen por primera vez del país donde se ejecutaron.
NÚMERO DE OBRAS 188 obras (entre pinturas, dibujos, fotografías, esculturas, tapices y documentos).
BIOGRAFÍA
Leonora Carrington (Clayton-le-Woods, Lancashire, 1917-Ciudad de México, 2011) nace en el noroeste de Inglaterra en una familia de clase alta. Con 15 años viaja a Florencia, donde tiene ocasión de contemplar la pintura de los maestros antiguos italianos. Ya de regreso a Reino Unido, en 1936 consigue que sus padres le permitan estudiar arte en Londres, donde en junio visita la primera exposición surrealista en Gran Bretaña y al año siguiente queda prendada de la obra de Max Ernst durante una muestra individual de este, a quien conoce enseguida en una cena e inicia con él una relación que no cuenta con la aprobación de los padres de ella.
Rápidamente la pareja se muda a París, lo que provocó una ruptura entre Leonora y su familia. En la capital francesa, y a pesar de su negativa a entrar en el grupo de manera oficial, Leonora se codea con los surrealistas. Pronto la pareja se muda a la localidad de Saint-Martin-d’Ardèche, en la Provenza, pero su vida allí enseguida se ve condicionada por la llegada del nazismo. Max Ernst es arrestado por su origen alemán y por tanto es considerado enemigo de Francia; Leonora huye a España, donde es ingresada en un hospital psiquiátrico en Santander tras sufrir una crisis nerviosa. Después de un duro y tortuoso tratamiento, la artista recaló en Madrid y luego en Lisboa, donde pudo embarcarse hacia Nueva York con su reciente marido, Renato Leduc.
A finales del año 1942 se establecen en México, donde ella va a desarrollar su obra de madurez. En 1962 recibe el encargo de pintar el mural El mundo mágico de los mayas para el Museo Nacional de Antropología en Chapultepec, Ciudad de México. Debido a las revueltas estudiantiles y a la masacre de Tlatelolco, en 1968 Carrington decide abandonar el país junto con sus hijos.
Durante los veinticinco años siguientes vive en Estados Unidos, primero en Nueva York y más tarde en Chicago. En el año 2000 es nombrada Ciudadana de Honor de México D. F., adonde había regresado en 1990, y en noviembre de este mismo año recibe la condecoración de la Orden del Imperio Británico en la residencia del embajador de Reino Unido en México. En mayo de 2011 la artista fallece de neumonía a la edad de 94 años.
LEONORA CARRINGTON. REVELACIÓN CLAVES
Huida a España Tras los arrestos de Max Ernst y en su huida de la guerra europea, en 1940 Leonora llega a Madrid en un delicado estado de salud. Sufre una crisis nerviosa y en agosto es ingresada en un sanatorio de Santander. El último día del año regresa a Madrid. En la capital tendrá la oportunidad de visitar el Museo del Prado, donde confirma su amor por la pintura italiana florentina aparte de contemplar las obras de el Bosco, Brueghel el Viejo o Patinir que tanto le impactan y que son determinantes para su obra posterior.
Es frecuente encontrar en sus lienzos pequeños seres híbridos que recuerdan a los del Jardín de las delicias del Bosco, por poner un ejemplo, así como fondos con paisajes extraños y poblados por elementos que parecen haber sido extraídos de los sueños. Leonora escritora Desde muy pequeña, Leonora muestra un gran interés por los cuentos, intensificado, sin duda, a partir de su encuentro con Max Ernst, que sentía, como el resto de los surrealistas, fascinación por Lewis Carroll y los hermanos Grimm.
El mundo de la Alicia de Carroll ofrece a Carrington la oportunidad de profundizar en temas que especialmente le interesan: la alquimia, la cábala, los mitos ancestrales o la dislocación de la relación espacio-tiempo, elementos todos ellos que se encuentran en su producción artística. Se dice que el primer cuento que escribió Carrington fue dictado a su madre a una edad tan temprana que aún no escribía bien.
Desde entonces, nunca dejó de hacerlo y muchas de sus pinturas encuentran correlato e incluso el mismo título que sus escritos. Casi todos son autobiográficos, y de ellos destaca el relato de su paso por el sanatorio del doctor Morales en Santander que ella narra en Memorias de abajo.
En una gran mayoría aparecen seres híbridos, hadas y brujas poderosas, los animales hablan y los humanos se convierten en animales y la fantasía se torna realidad en «La debutante», «La dama oval» o en la novela La trompetilla acústica, así como en sus obras de teatro Penélope y Opus Siniestrus. Los autorretratos/Los alter ego En sus obras, Carrington se autorretrata frecuentemente a través de otros personajes o animales que hacen las veces de la propia artista.
Sus alter ego ‒ «el otro yo»‒ suelen ser hienas, árboles o caballos, sin duda alguna este último el más reiterado, pero también diosas ‒como la Diosa Blanca‒ o hilanderas y tejedoras que se representan en ocasiones por medio de la rueca. La rueca y las hilanderas son alusiones a las diosas y al poder femenino. El hilado se asocia con la condición femenina, mujeres sabias, brujas, etc. En este sentido la propia artista se dedica durante años a la elaboración de tapices, en colaboración con la familia Rosales, tejedores mexicanos.
LEONORA CARRINGTON. REVELACIÓN
Pinturas como joyas A mediados de la década de 1940, Leonora Carrington comienza a trabajar con temple al huevo y en formatos horizontales tipo predela. El temple al huevo es una receta de yema de huevo, agua, aglutinante y pigmento, y se distingue por su durabilidad y rapidez de secado. Se trata de una técnica muy utilizada y con una larga historia que se remonta a la Edad Media.
Leonora no solo hacía así un homenaje al huevo, símbolo de fertilidad en muchas culturas, también recordaba las enseñanzas de su juventud en Italia y los frescos florentinos. Para Carrington el método es además una extensión directa de los experimentos alquímicos que realiza y que ella asocia con la cocina, refiriéndose a la técnica como «receta de pintar».
A propósito de su primera exposición individual en la Pierre Matisse Gallery de Nueva York en 1948, su amigo y mecenas Edward James llama la atención sobre un aspecto relacionado con el uso de esta técnica: «La inauguración de tu muestra fue un éxito tremendo. Nunca he visto más entusiasmo en ningún vernisagge entre el público [...], tus cuadros brillaron como joyas en la pared».
1 comentario:
Muy interesante esta exposición. Ire a verla. Gracias, Julia.
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