Julia Sáez-Angulo
Hijo y nieto de pintores,
Alejandro Aguilar Soria será objeto de un homenaje en la Tertulia Peñaltar que
se celebra en la Casa de Ávila en Madrid por su trayectoria artística. El acto
tendrá lugar el jueves 30 de enero y en él estará presente el director de la Casa
de Ávila, Agapito Rodríguez Añel, la directora de la tertulia, Rosa María
Rodríguez Manzanares. El comentario de la pintura de Aguilar Soria correrá a
cargo de la crítica de arte Julia Sáez-Angulo. A la tertulia acuden numerosos
escritores y artistas.
La obra de Alejandro Aguilar
Soria (Madrid, 1962), licenciado en Bellas Artes, tiene un rico registro que va
desde la pintura al óleo a la poesía visual, donde ha sido altamente reconocido,
además del dibujo y el grabado. Tiene buena cocina y le gusta la
experimentación en el arte con las nuevas tecnologías y la docencia la ejerce
como disciplina en la que acaba disfrutando. Actualmente es vicepresidente de
la Asociación Española de Pintores y Escultores, AEPE.
En su pintura se aprecia su
gusto por los pictogramas que devienen símbolos y se acaban manifestando como
icono clave de su figuración suelta e imaginativa, donde con frecuencia se hace
presente el mundo de los marcianos y otros personajes de claras raíces en el
cómic, donde reina la ironía. El farol es uno de los iconos más presentes en su
pintura como catalizador y difusor de la luz; en algunos casos el farol cobra
el protagonismo único del cuadro.
Entusiasta del color –su
abuelo era profesor del color en Bellas Artes.- la pintura de Aguilar Soria se
alimenta de colores fríos y calientes a partes iguales en una composición que
van desde el gran formato, hasta tres metros hasta el pequeño formato. Le gusta
el formato cuadrado y los tondos, algunos de los cuales figuran en su última
serie Cuadros estelares aún no
expuestos.
Otras series pictóricas de
Aguilar Soria son Píxeles, Juegos… Damas nobles es una serie de cien piezas
de pequeño formato, a modo de cajas cornelianas en la que Aguilar Soria juega
con viejos iconos de la historia de la pintura que él manipula con objetos y
transforma en damas singulares con alusiones irónica o humorísticas llenas de
ingenio. La serie fue muy bien acogida y se vendió prácticamente entera.
La poesía visual es un campo
en el que el autor se recrea, sabe que tiene un gran alcance y buen recorrido
entre el público. Es una excusa con el material de las imágenes en las que se
apoya la labor creativa.