Invitación
al Federalismo
España
y sus razones para un Estado plurinacional
José
Antonio Pérez Tapias
Editorial
Trotta; Madrid 2013 (172 pags.)
Los partidarios del federalismo en
España vienen como un ariete, principalmente por parte del Partidos Socialista
Obrero Español, PSOE, que lleva en sus entrañas el Estado Federado y la
República, por más que estratégicamente lo dosifiquen.
José Antonio Pérez Tapias (Sevilla, 1955) ha publicado el libro Invitación al Federalismo. España y sus
razones para un Estado plurinacional, editado por Trotta. En este volumen
se habla, a veces parece con cierto candor de creer que “toó er mundo é bueno”
de que “es necesario que el debate público se abra a la desmitificación de la
soberanía y al replanteamiento de lo que supone la pluralidad de las naciones
para su realidad jurídico-política”.
Da por hecho que “un pacto político federal ha de acompañar
a la reforma constitucional que aparece como necesaria”. En España abrir el melón
de la Constitución parece siempre el remedio para dar contento a opiniones
contrarias a la Carta Magna que han sido alimentadas por una educación de
programa caciquil de Historia inventada.
El socialismo español no parece conectar bien con la idea
del hombre y del ciudadano universal sino que lo fragmenta en nacionalidades
cada vez más diminutas a las que azuza un nacionalismo manipulador y lleno de
intereses sectarios más que políticos.
“La complejidad del estado Español reclama la voluntad de
hacer viable, reformando el Estado autonómico, su futuro como Estado federal en
el que la solidaria redistribución de cargas y beneficios y el reconocimiento
de las legítimas diferencias puedan verse eficaz y justamente logrados”, se
dice en el libro que nos ocupa.
Los carlistas siempre han hablado de las Españas y poco se
les ha escuchado porque se les ha considerado románticos y desfasados del XIX.
Ahora el nuevo romanticismo nacido en redomas de manipulación de mitos y
leyendas más que de historia, aparece en el XXI por dejadez de la educación del
Estado jacobino, todo por unos intereses puntuales de gobernanza.
El debate del federalismo es una espada de Damocles sobre
los españoles en una Europa, Comunidad Europea, que no desea la fragmentación
territorial de facto, en un continente que sería debilitado por ella. Los
interesados en el federalismo no pueden imponen a los demás sus tesis por más
que griten su falsa panacea.
El nacionalismo cabalga de modo indefectible al independentismo
en manos de manipuladores termocéfalos con los medio informativos monopolísticos
en su poder. Así lo estamos viendo en Cataluña, donde se margina social y
políticamente a quien piense lo contrario, donde el agotamiento de los no
nacionalistas es atroz, porque el establishment de la política está en el
nacionalismo impuesto. Lo mismo pasará con el debate del federalismo, cuando
los profesionales de la política 24 sobre 24 horas, lo impongan a los ciudadanos
que han de trabajar para su dura subsistencia. (Léanse las páginas Web de los
nacionalistas catalanes)
La política la siguen haciendo y sosteniendo las élites políticas
que tienen medios y no los ciudadanos que sólo pueden votar los dilemas
cerrados que se le imponen en las urnas. Es peligroso romper viejos consensos
con nuevos que vienen de laboratorios de brujos. El libro de Pérez Tapias cabalga en este sentido.