Julia Sáez-Angulo
Joven, desenvuelta y fresca en la
escritura, Ainhoa Rebolledo (Santiago de Compostela, 1987) es la autora de la
novela Tricot, que publica la
editorial Principal de los Libros. El libro lleva un prólogo de Naco Vigalondo
y un epílogo de Didac Alcaraz. La divertida ilustración de Portada es de
Violeta Hernando.
Ainhoa Rebolledo ya es autora de otros
dos libros: Mari Klinski y ¡Maldita sea!
(antropología de la noche madrileña), en los que cuenta de manera graciosa
y directa, cándida en ocasiones, lo que pasa y sucede alrededor, con una
ingenuidad aplastante incluso en los casos más tremendos. Mari Klinski ya lleva tres ediciones.
Leopoldina Roble, Crisis Carballo y
Elena Rebollo, divertidas y desenfadadas hablan de todo en sus vidas, sin
tapujos, al tiempo que les gusta la
literatura y el tricot, como manera de relajarse, algo que hacían las abuelas y
no las madres, algo a lo que quizás obliga la crisis y la necesidad de reciclar
y ahorrar.
El libro Tricot se va desarrollando en diferentes tonos y ritmos musicales: allegro, scherzo, lento, más rápido, rondó…
“La conspiración y la isoginia son dos
maneras de eximirse de toda responsabilidad a costa de culpar a una realidad
tan grande que no hay manera de luchar contra ella. Así es legítimo quedarse en
el parloteo entre amigos”, escribe Nacho Vigalondo en el prólogo.
El epílogo es un texto titulado “Por
qué es necesario odiar a las mujeres”, en el que Didac Alcarac se despacha con humor, amor e
ironía sobre su experiencia sobre las mujeres, porque en el libro se habla, se
divierte y se juzga como personajes femeninos, ante quienes los hombres se
queda a la mitad.
La misoginia global es un hecho en el
planeta y tratada con humor es más llevadera, algo que sucede en este libro,
donde las protagonistas quieren vivir o sobrevivir con decoro, como las
Tejedoras de la Vida, las erinias más que las Parcas, si nos atenemos a la
diferencia de la mitología greco-romana. No en balde son tres los personajes
las Tejedoras del Metal que aman a su vez la literatura y la vida.
Tricotar es una forma de calmar la
angustia. El tricot es una actividad que relaja. Tricot es un libro que se lee por su gracia y gracejo, a la vez que
lleva a ciertas reflexiones si no seria, al menos interesantes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario