L.M.A.
28.08.19 .- Madrid .- Galería Orfila inicia la temporada 2019/2020 con una exposición que merece, quizá más que otras que también la merecieron, la calificación de singular. Tras algunos años en los que ha estado ausente de Madrid, el pintor Abel Cuerda celebra con esta muestra el cincuenta aniversario de su primera exposición individual.
El historial que precede a esta conmemoración, exposiciones en galerías y espacios de arte de Madrid, Bilbao, Zaragoza, Albacete, Toledo, Segovia, Sevilla, Gijón, Granada, Cartagena, Murcia, Zamora… y alguna incursión en Bruselas, Sao Paulo o La Habana, desde que en la muy prestigiada galería Macarrón de Madrid realizara la primera, avala una profesionalidad de quien fue Profesor Asociado en la Escuela de Bellas Artes de la Universidad Complutense y en la Felipe II de Aranjuez hasta su jubilación. Más relevancia tienen aún los premios y galardones que ha merecido su obra. Entre otros, cuya relación completa figura en el catálogo de esta exposición, destacaremos el Primer Premio y la Medalla de Oro en la Bienal de Bilbao de 1970, el Primer Premio de las Bienales del Deporte en las Bellas Artes de 1971 y 1977 y, como colofón, la Medalla de Honor y el Primer Premio BMW de Pintura en 1987.
El crítico Juan Antonio Moreno, autor de un libro sobre su obra, destaca de la que ahora presenta en Galería Orfila, realizada en su retiro toledano de Valdeverdeja, cómo la mancha se diluye y se hace más fluida y cómo el maestro del color busca la composición perfecta y logra un relato equilibrado desde la racionalidad y el silencio.
Inaugurará la exposición el lunes, 9 de septiembre, a las 20 horas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario