viernes, 1 de diciembre de 2023

CAROLINA ANDRADA, soprano, cumpleaños en medio del bosque encantado y canto del “O mio babbino caro” de Puccini

Carolina Andrada con orquidea de cumpleaños

Cuadro de Carolina Andrade



C.V.E.

Fotos: Lola R. de Casanova

1/12/23 .- Madrid.- “Carolina Andrada es una criatura nacida para la belleza”, dice Nilda Scalise (1962), compositora musical, española y norteamericana, asistente al cumpleaños de la soprano Carolina Andrade, el loft de pintura más grande que he conocido, el antiguo estudio de pintura del donostiarra Darío Villalba. Carolina Andrada, además de soprano, es también pintora y sus cuadros de gran formato, se despliegan en un bosque continuo y misterioso, con figuras esbozadas entre luces y sombras.

El mundo de Carolina es de hadas, elfos, gnomos, sílfides, ondinas, brujas y príncipes encantados, como en las ilustraciones de los cuentos infantiles. Nilda Scalise continua: “Ella es como un canario, que nació dotada, con un don, con esa garganta y voz, como un canario. A partir de ahí solo es cuestión de aprender a respirar, a modular la voz, a entonar… Aristóteles Onassis llamaba “mi canario” a María Callas. Cuando el magnate se estaba muriendo, ella volvió a él y le dijo: “Soy María, tu canario”… A mi amiga la soprano cubana Alina Sánchez se le murió su canario, ante el que ensayaba todos los días, y fue una tragedia. Lo enterró en una bonita tumba del parque del Retiro…

Mientras Nilda me contaba historias, los invitados al cumpleaños de Carolina disfrutaban de la conversación, del cava, del jamón, los quesos, las nueces, las uvas, las moras y zarzamoras, todo servido en amplias y generosas bandejas… Entre los invitados, la cónsul de Egipto, Amira Gamal; la embajadora Carola de Grandes, la profesora de canto Ana Fernaud; la comunicadora Lola Rodríguez de Casanova, que acaba de recibir el premio ANDE a los mejores emprendedores; Yolanda Gaviño, que fue primera bailarina del Ballet Nacional de España (de flamenco); Jaime Albo, de  conservas Albo y Gonzalo Caputto Barbadillo, de Bodegas Barbadillo de Sevilla. El vino blanco que se sirvió era de sus bodegas. También estaba Carmen Bescos de la Galería de arte Occo Art Gallery, situada detrás del Museo del Parado en Madrid.…Se echó de menos a Mayte Spínola, pero se encuentra en Viena, su ciudad ideal de preciosos bosques. También a Mario Saslovsky y Adriana Zapisek.

    Y llegó la hora de escuchar a Carolina, que interpretó “O mio babbino caro” (1918) (Oh!, mi querido papá), de Puccini, con Alberto Álvarez al piano. Muchos aplausos. Carolina tiene una voz suave cuando habla y potente cuando canta. Es un misterio.

    Y seguido, la tarta de mil hojas de hojaldre, crema, nata y frambuesas con "Cumpleaños feliz". Letizia del Valle, la mamá argentina, supervisaba todo con eficacia.

    Nilda Scalise me contaba que, aunque nació en los Estados Unidos, su ciudad es Madrid, además vive en el castizo barrio de la Arganzuela. Allí compone música para los versos de distintos poetas, entre ellos el argentino Alejandro Roësmer, que le prometió editar sus composiciones.

    El papá de Nilda era ingeniero informático de la NASA y trabajó en la estación de Rodrigo de Chavela en España, donde conoció a su mamá, una bella señorita de Mondejar (Guadalajara). Toda la familia fue recorriendo estaciones de satélites por el mundo: Nueva Zelanda, California, Italia... Eran cuatro hermanos.

    Mientras escuchaba a Nilda, yo seguía con la mirada a Carolina, que posaba con todos y cada uno de los invitados para las fotos. El número de infinitos regalos, dentro de distintas bolsas de colores, se  amontonaba en la escalera.

    Fue una velada muy grata.

Más información

https://lamiradaactual.blogspot.com/search?q=Carolina+Andrada

Carolina Andrada, autorretrato
Carolina y mamá Letizia

Invitados al cumpleaños
Pedro García Molano, Juan y Luciano Moreno
Nilda Scalise, compositora musical

Lola Rguez, Carolina y Carmen Valero
Carolina y Carmen Valero Espinosa

1 comentario:

Raúl dijo...

Queridos amigos
No soy entendedor en pintura; solo disfruto de ella. Me han parecido muy bellas las obras. Y una presentación en Madrid... ¡mucho mejor!
Muchos saludos,
Raúl