Julia Sáez-Angulo
El escultor José María Casanova Martínez-Pardo (Burgos, 1956) ha expuesto recientemente sus últimas obras en la galería Artraum de Alemania. El artista, que reside en Torrelodones tiene su estudio en el Espacio Fa de la localidad de Arganda del Rey.
“Mis últimos años han estado centrados tanto en hacer obra pública como en la investigación de nuevas formas de expresión. He escogido las obras que mejor me representan como mi mundo expresivo para la exposición en Alemania”, explica J. M. Casanova.
Casanova que se centra fundamentalmente en la figura humana en las más diversas situaciones, trabaja en bronce, piedra, yesos, poliéster y otros materiales. Sus piezas se crean monumentales para el espacio urbano, plazas, parques o jardines, y para espacios interiores.
Hombres y mujeres en situaciones de ensimismamiento
“En mis esculturas se retrata tanto al personaje como al espacio que lo rodea, capturado a veces por simples diedros de hierro o por fondos dibujados, a veces por ausencias o por abismos de aire”, dice el escultor.
Los hombrecillos y mujeres se instalan en laberintos, espirales, columnas, repisas, muros, lechos, pupitres, púlpitos, escaleras... Un mundo interminable de situaciones y contrastes; atmósferas de soledad o de ensimismamiento.
“La persona como eje de espacios físicos y metafísicos, retratos intemporales de sentimientos, de situaciones cotidianas, síntesis de relaciones humanas, emociones, o simplemente anécdotas, conforman los argumentos de mi escultura en treinta y tres años de profesión”, aclara el autor.
En su taller llaman la atención las figuras junto a libros, en las que los cambios o tensión de escala producen cierto desasosiego y admiración al mismo tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario