Julia
Sáez-Angulo
Sor
Juana Inés de la Cruz es una de las dos grandes Juanas, poetas de la América
hispana, junto a Juana Ibarbourou, de la que ahora vemos publicado Un amar ardiente. Poemas a la virreina, en
compilación y con una introducción de Sergio Telléz-Pon. El prólogo es de Ramón
Martínez, la portada de Nieves Guerra y la publicación de la editorial Flores
Raras.
El
poeta mexicano premio Nobel escribió: “Sor Juana Inés sobresale en la expresión
del sentimiento amoroso y de sus trances: encuentros, despedidas, celos,
llantos, risa, soledad. Poesía no del amor divino, sino del humano y que solo
puede compararse a la de Lope de Vega y a la de Quevedo. No es un torrente como
la delprimero, ni un abismo como la del segundo: es un remanso de agua en laque
el enamorado, a un tiempo se retrata y anula”.
La
virreina era María Luisa Gonzaga Manrique de Lara, condesa de Paredes, a la que
la monja mexicana Sor Juana Inés de Asuaje y Ramírez (México 1651 – 1695)
profesó un ardiente afecto. Es la gran poeta de las letras hispano-americanas
del siglo XVII. Mujer intelectual de gran apertura, que brilló en la corte
virreinal de Nueva España. Una feminista antes de tiempo al defender el derecho
que las mujeres tenía al conocimiento y la cultura. En sus versos arremetió
directamente contra los hombres que cercenaban la expresión de las mujeres.
Sergio
Téllez-Pon (Ciudad de México, 1981) es poeta, crítico literario y editor. Entre
sus libros: No recuerdo el amor sino el
deseo (2008) y La síntesis rara de un siglo loco (2016).
Los
versos de sor Juana Inés de la Cruz dicen:
La estrella con que naciste/ tiene
imperio en mí, y la estoy/ tan sujeto, que o soy / máser del ser que mediste /
que al no conocer los dos que hay dos / que hay Dios, para más ejemplo / te
hiciera labrar un templo 7 y te adorara por Dios.
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