Julia Sáez-Angulo
26/11/21.- Madrid.- Nacida en Buenos Aires y afincada en Madrid desde 1976, Clara obligado, hoy argentino/española o española/argentina, es licenciada en Literatura, acaba de publicar el libro “Todo lo que crece”. Naturaleza y Escritura, un híbrido hermoso entre ensayo y memorias, con la naturaleza como pretexto y recorrido. El índice tiene dos apartados: Sur, y Norte. El libro ha sido publicado por la editorial Páginas de Espuma.
La autora recuerda que “Emily Dickinson era, además de poeta, botánica, su herbario contiene cuatrocientas veinticuatro especies de flores silvestres y está organizado por el sistema de Linneo Imagino a la poeta concentrada, tiene apenas 14 años y estamos en 1845, en la zona rural de Massachussetts. Con la elegante caligrafía de Dickinson, los nombres de las plantas están escritos en latín; el herbario comienza con un jazmín blanco común y termina con un racimo de romeros azules. Qué sencillez.”
En su vida, en sus paseos, a Clara Obligado no se le escapa la flora, especialmente árboles y flores y las denomina con su nombre castellano y argentino, cuando ambos no coinciden. Mira, contempla, queda absorta, reflexiona. Juega con la etimología. La Naturaleza es madre de tantas sugerencias para las artes plásticas, literarias, musicales…
Habla de los bosques y los personajes que crea en la imaginación de los cuentos, del Jardín del Edén, de la Madre y madera, de las casas y las historias que las habitan. Cita a Borges, a Fray Luis, a Durrell, a Malika Mokedem, habla de Chernobil, por supuesto, de Buenos Aires, de la mitología greco-romana. En suma, un despliegue de buena escritura, donde la cultura y la erudición afloran por necesidad.
Clara Obligado fue una de las personas exiliadas por la dictadura militar y que recabó en España para beneficio nuestro (como los españoles exiliados enriquecieron México). Ella ha sido la primera en dirigir los talleres de Escritura Creativa en numerosas universidades y otras instituciones que reclaman su magisterio. Ha escrito muchos cuentos y relatos breves, géneros en los que es maestra. Los galardones no le han hecho esperar como el Femenino Lumen por su novela “La hija de Marx” (2015) o el de novela breve por su libro “Petrarca para viajeros” y otros.
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