lunes, 10 de enero de 2022

CRÓNICAS ARGENTINAS XXVIII.- Norma D´Ippolito. Escultora del cuerpo humano. Un “Ecce Homo” al Papa Francisco. Libro de artista en mármol sobre Borges y escultura de mujer proa para Pablo Nerudaa

Norma D´Ippolito ante su obra "Conjuros e ilusiones"
Esculturas de Norma D´Ippolito


Julia Sáez-Angulo

Fotos: Adriana Zapisek

10/1/22.- Buenos Aires.-XXVIII

Norma D´Ippolito. Escultora del cuerpo humano. Un “Ecce Homo” al Papa Francisco. Libro de artista en mármol sobre Borges y escultura de “Mujer proa” para Pablo Neruda


Comienza mostrándome una escultura femenina en mármol blanco, que se inclina hacia adelante como un “mascarón de proa”, en homenaje al poeta chileno Pablo Neruda, que coleccionaba mascarones de proa en su residencia chilena de Isla Negra. También me enseña un libro de artista en láminas de mármol en honor de Borges, con pastas fijas y hojas móviles que recoge la afirmación del escritor: “Siempre imaginé el paraíso como una biblioteca”. Antes lo dijo Cicerón.

Norma D´Ippolito (Buenos Aires, 1943), egresada de la Escuela Nacional de Bellas Artes Prilidiano Pueyrredón en las disciplinas: Escultura (1977) y Grabado (1980) y de la Escuela Superior de Bellas Artes de la Nación Ernesto de la Cárcova en la especialidad Escultura (1981), los mejores centros docentes del arte del país y su afán de saber le llevó también, recientemente, a un master de Arquitectura. Inquieta, sostenía una tertulia cultural en su magnífico y amplio estudio/taller en el barrio de Villa Crespo, por el que han pasado numerosos académicos, ingenieros y pensadores a impartir conferencias. La pandemia acabó con todo ello, como ha acabado con tantas cosas, a la espera de tiempos mejores.

“Trabajo sobre todo la piedra, mármol blanco italiano de Carrara, negro de Bélgica, alabastro, granito... de vez en cuando la madera de la pampa y la fundición en bronce”, me explica al tiempo que me muestra la fotografía de una pieza que llegó al papa argentino Francisco, titulada “Ecce Homo”, en bronce y granito”, y que se encuentra en Ciudad del Vaticano. El Papa le envió una cariñosa tarjeta de agradecimiento, que la escultora tiene enmarcada. En otro pequeño cuadro de su estudio, una cita de Santo Tomás de Aquino: “…Prepárame al comenzar, dirígeme al progresar, cólmame al terminar”. Todo un programa.

La porteña escultora se reconoce muy trabajadora en los 50 años de carrera artística. “He realizado más de 400 obras, todas inentariadas. Comencé con el modelado en barro, pero cuando descubrí la piedra todo cambió. Era otra dimensión”, explica Norma.

Reconoce que admira a Henri Moore y que no se perdió la exposición del escultor inglés junto a August Rodin, que tuvo lugar en París en 2013. También admira al francés Antoine Bourdelle y al argentino Alberto Lagos, al que califica de “buen escultor”. Además, cita con afecto al profesor español Ramón Castejón, que era un “aragonés extraordinario. Él nos enseñó a sacar los puntos de la escultura. El hombre no tuvo mucha fortuna en Argentina. Tenía un taller modesto y se le incendió. Se merecía otra suerte”.

Viajera empedernida por toda Europa y Asia, Norma D´Ippolito cuenta que ha estado más de diez veces en España, con su marido y tras quedarse viuda. En el último viaje en 2019, Norma conoció y conversó con el escultor español “Francisco Leiro, un artista interesante”.

Norma d´Ippolito hizo una gran exposición retrospectiva titulada “20 años piedra” (2003), donde daba cuenta de sus curvas, ritmos, escorzos, estilizaciones y juegos visuales, a partir de la prolongación de una obra anterior. Publicó un buen catálogo de la misma y cuenta igualmente, con otro buen libro “Norma D´Ippolito. Esculturas” (2010), que recoge gran parte de su trabajo artístico, a lo largo de su trayectoria profesional. Su obra nutre numerosas colecciones privadas y públicas de ciertos museos de reevancia.

    La escultora se siente orgullosa de su pieza “Conjuros e ilusiones”, una sucesión de siete torsos femeninos diferentes y unidos, que alternan en mármol mate o pulido, y que representa a las mujeres de su sangre, hermanas y primas, a las que, la familia emigrante italiana les estimulaba para “estudiar y trabajar” al mismo tiempo. Todas nosotras cumplimos el objetivo de superación”, concluye orgullosa. 

    "Como verás no copio el desnudo de manera literal, sino que lo fuerzo y lo llevo a una expresividad nueva. También he esculpido desnudo masculino, pero menos, porque me sentía más incómoda con el modelo hombre en el estudio”.

"También está mi obra de homenaje a Raoul Walenberg, el diplomático que salvó vidas de judíos en Budapest, se encuentra en varias embajadas, en el diario La Nación, en Israel, en Los Ángeles, etc ", cuenta la autora.

Norma D´Ippolito ha trabajado también el arte sacro y ha llevado a cabo, entre otras piezas, el Crucificado y el Pelícano eucarístico de la iglesia de San Martín de Tours en el barrio de Palermo de la capital porteña.

Una de sus obras singulares es la denominada “Autorretrato" (1997) dos pies en bronce sobre un almohadón en mármol blanco de Carrara. “La obra original se vendió con rapidez cuando se expuso", explica la escultora.

Buenos Aires, 10 de enero de 2022 

Más información

www.nomadippolito.com.ar

"Ecce Homo", escultura de Norma D´Ippolito. Ciudad del Vaticano

Esculturas de Norma DÍppolito

Norma y Adriana Zapisek


Dibujos a grafito de Norma D´Ippolito






1 comentario:

Juana Mari Herce dijo...

Julia:Gracias por acercar el Arte al pueblo,con tus crónicas ,los que no formamos parte de esa élite cultural,de esa minoría selecta y adinerada,también podemos disfrutar de Las Bellas Artes,que por ahora están en manos de cuatro privilegiados.
La Mirada Actual y el Arte para todos,Arte para el pueblo ,Arte en la escuela y en la calle.
Que exquisita y buenísima labor haces,tu sí que sabes.
Agradecida my friend