Julia Sáez-Angulo
Fotos: Saslovsky, Reviriego, Zapisek, L. Rodríguez
27/2/23.- Madrid.- Glenda Gaby, cantante salvadoreña residente en Madrid, ha impartido una conferencia en la Tertulia Ilustrada de Madrid, bajo el título de “Gospel, Jazz y Blues. Una pequeña historia”, ilustrada con canciones a capella. La cantante llegó acompañada de su esposo, Luis Pérez Cobos.
Glenda Gaby, nacida Dina Esmeralda (El Salvador, 1950), comenzó a cantar a los 5 años, ganaba todos los concursos y, desde muy pronto, recorrió diversos escenarios internacionales. Tiene tres hermanos Alirio, Sandra Leticia y Ana Glenda, dos de ellos dedicados a la música, él con el nombre de Alirio Guerra. Su mamá, Doña Edelmira, fue clave en la formación musical de infancia de Glenda. Está casada con empresario español Luis Pérez Cobos.
Cantante de gospel, jazz, blues, boleros y rancheras, Glenda Gaby ha publicado 15 discos, ha sido nombrada Noble Hija de El Salvador y uno de los Cien Latinos más importantes en España, ha recibido numerosos galardones, entre ellos la reciente de Medalla de Oro Mayte Spínola. Con motivo del Bicentenario de la Independencia de Centroamérica, llevó a cabo un homenaje a la hispanidad en la Real Academia de España en Roma. Sus actuaciones en solidaridad con distintas causas, entre ellas Mensajeros de la Paz del padre Ángel, dan fe de su generosidad.
En la conferencia, Glenda recordó el origen del gospel en la esclavitud africana de los campos algodonales de Estados Unidos, en los que manifestaban su dolor y su inspiración en los salmos de la Biblia. Había un líder que proponía un salmo u otra frase y los demás le seguían, repitiendo la misma o de otra manera. Cantar les servía a los esclavos para gritar y desahogarse, “liberaban adrenalina”. Señaló que el primer esclavo, bautizado en Virginia, data de 1629.
Del gospel se fue llegando al jazz, sobre todo en los años 30 y 40, cuando todavía los negros no podían viajar en autobús con los blancos, y se formaban solistas u orquestas magníficas, cuyos integrantes debían entrar por la puerta de atrás de los lugares donde actuaban. Paulatinamente el jazz -algunos dicen que viene de la palabra “jazmín”, por el fuerte aroma a colonia que llevaban las intérpretes -consideradas muchas veces como prostitutas-, entró en sitios elegantes y dejó de ser considerada “música de burdel”.
Glenda Gaby fue citando distintos intérpretes como Ella Fitzgerald, Mille Davis, Billie Holliday… y describió los distintos estilos de jazz con sus interpretaciones y matices: free jazz, black jazz, latín jazz…, cada uno con sus matices de languidez, ternura, sueños, percusión, ritmos…La cantante salvadoreña actuó seis meses en el Casino de Ibiza con Xavier Cugat, del que aprendió mucho, desde técnica musical a dicción y disciplina de horario. “Me aconsejó estudios de gospel y de jazz", dijo.
La cantante también recibió siete clases en exclusiva de la soprano María Callas, quien le insistió en que “lo importante es el alma a la hora de cantar”.
Después del blues, llegó el rock, que tiene su base en el soul. Elvis Prestley en los años 50, con su “música del demonio, fue un prototipo, que trajo la alegría de bailar, de electrizar el cuerpo". Toda la influencia norteamericana de esta música fue llegando a todos los países, entre ellos a El Salvador.
Más tarde vino el bolero en Cuba con ritmos de jazz, y se hizo serenata en ocasiones.
La cantante concluyó diciendo que “no se puede vivir sin música y que el canto es siempre curativo”. Glenda Gaby interpretó a capella el “Summer time” de la película “Porgy and Bess” y la ranchera “con dinero y sin dinero” con los presentes… Fue muy bien escuchada y aplaudida.
La Tertulia Ilustrada está presidida por María Eugenia Martínez.
Más información
https://www.youtube.com/watch?v=yhwZe3bCgsI&ab_channel=El-Salvador-King503
Glenda Gaby con Xavier Cugat en Ibiza, 1979Glenda Gaby, cantante
3 comentarios:
Romseneí Jose Miguel
Muchas gracias por enviarnos con aires de jazz el matinal artículo, curativo de la cantante Glenda Gaby. Que tanto nos alegró esta mañana a Pilar y a mí.
Ayer Glenda dió una charla estupenda, nos fascinó a todos con su voz tan preciosa y su historia de vida tan interesante. La nota de Glenda está fantástica, seguro estará refeliz con élla.
ADRIANA
Magnífica e interesante tarde.
Muchas gracias, Glenda por habérnosla proporcionado con tus relatos, con tus anécdotas, con tu ESPLÉNDIDA VOZ. Un placer haberte escuchado.
Y gracias por traerme a la memoria, con una de tus canciones, a la olvida adolescente que una vez fui. Y por plantearme qué pensaría aquella jovencita ilusionada, como tantas otras, de la mujer madura/vieja que hoy soy.
Publicar un comentario