Pintura de Alberto Reguera
Julia Sáez-Angulo
Los
coleccionistas y mecenas llevan a cabo una gran tarea cultural y social, que en
muchos casos complementa las de las Administraciones públicas, a la hora de
completar el arte de las colecciones igualmente públicas. Esto no quiere decir
que los coleccionistas sean totalmente angélicos y no les muevan intereses de
prestigio personal, acercamiento al poder o de inversión. Estas y otras ideas
sobrevolaron durante la Jornada de Coleccionismo y Mecenazgo que ha tenido
lugar en el CentroCentro Cibeles, que dirige Tono Martínez.
Dos
mesas redondas recorrieron la trayectoria del coleccionismo de arte en España
en el pasado, la primera, y en la actualidad, la segunda, para el coleccionismo
contemporáneo.
Se
habló de coleccionismo seguro cuando se adquieren las obras en galerías, ferias
y subastas, que conocer bien las fuentes de los trabajos artísticos. El
coleccionismo privado viene completar las colecciones públicas, se dijo en otro
momento.
Durante
la jornada se habló de los distintos tipos de coleccionismo en España, desde el
individual al confederado. Se denostó en exceso la colección del antiguo Museo
de Arte Contemporáneo, MEAC, origen del Museo Reina Sofía y se lamentó la
interrupción de adquisición de obras en la Fundación Telefónica, dato que fue
contestado por la representante de la institución.
Pintura de Iluuminada García-Torres
Críticos y Comisarios
Los
coleccionistas vienen a ser críticos y comisarios de arte, señaló Guillermo
Solana, conservador del Museo Thyssen-Bornemisza. Son héroes tardíos en el
circuito del arte del siglo XX. Toman prestados rasgos de la figura del
artista: la creación que les lleva a la auto-creación. Solana prefiere que el
héroe del circuito artístico siga siendo el artista y el creador, frente al
coleccionista y al comisario.
Al
hablar del coleccionismo antiguo, Enrique Gutiérrez Calderón señaló los
momentos clave de ese coleccionismo en España del XIX: la Desamortización de bienes
eclesiástico por Mendizábal y la desaparición del mecenazgo en las leyes. Los
nombres de coleccionistas: marqués de Salamanca, marqués de las Marismas, conde
de Adanero, o pintor Carderera.
En
1909 se crea la Sociedad Española de Amigos del Arte, que dinamiza el
coleccionismo con la duquesa de Parcén, Pablo Bosch, Durán, Cambó, Zuloaga,
Marqués de Valle Inclán, Juan March, Federico Marés, Varez Fisa, Plácido
Arango, Abelló, etc.
El
coleccionismo requiere vocación, gusto y buena relación con el mercado. Se
advirtió contra la habitual ilusión del coleccionista a la hora de situar su colección
en un espacio con su nombre. La lucha denostada de los museos para atrae
público se hace más difícil con una pequeña colección, pues por muy excepcional
que sea una colección, requiere enormes recursos privados o públicos para
sostenerla. Más vale tomar la decisión de donarla o integrarla en un gran museo
como ha hecho recientemente Soledad Lorenzo en el Museo Reina Sofía.
pintura de José Pedro Croft
Faltan nuevos modelos de coleccionismo
Faltan
modelos nuevos de coleccionismo y sobra dispersión de conjuntos desiguales de
obras. Faltan colecciones de seguimiento de un artista. Toda colección requiere
vitalidad; la colección estática está desfasada. Coleccionar y ofrecer a la
sociedad. Los coleccionistas han de tener sensibilidad y atención al mercado.
Han de estar seguros de la procedencia de las obras.
Se
habló también de la dificultad que muchas veces tienen los coleccionistas de
arte antiguo para las atribuciones.
María
Corral dijo que el coleccionismo requiere en primer lugar un gran respeto al
arte y a los artistas. Que no se trata de coleccionar o comprar nombres sino
buenas obras. A vece vale más comprar una buena pieza de un artista no tan en
primera fila, que una pequeña y sin importancia de un nombre reconocido. El
coleccionista ha de sa ver ver el pasado, el presente y el futuro al mismo
tiempo cuando adquiere una obra de arte; ha de tener una mirada constante al
pasado, al presente y viceversa. Ha de arriesgar para no caer en la
mediocridad. Finalmente señaló que no se debe hacer borrón y cuenta nueva
cuando se inicia una colección institucional, esto resulta casi siempre
contraproducente. Jamás hay que comprar una obra de arte sin verla directamente
y no solo por Internet.
Alexandra
Schader, de Sotheby´s subrayó la
tendencia última de los coleccionistas españoles a lo internacional, aunque lso
medios informativos dan bombo a los artistas locales de las regiones
autonómicas. Recomendó que el coleccionista debe adquirir lo que le gusta y le
apasiona y en este sentido no se equivoca.
El
periodista madrileño Miguel Ángel García habló de la noticia que genera el
precio de una obra de arte más que su valor como tal; que las obras se presentan como trofeos; que
hay artistas que se presentan en u listado como un activo de Bolsa; que los
catálogos de las galerías sustituyen a la crítica de arte, que va perdiendo
peso; que los fondos de inversión en arte no han funcionado muy bien y que John
Baldessari decía que hacer una colección a base de obras adquiridas en subasta
era como amar en un prostíbulo. El paseante de galería casi no existe, salvo el
día de la inauguración y las ferias han concertado el interés de los
coleccionistas. También denunció que los programas de cultura y arte en las
televisiones sea a altas horas de la madrugada.
Las
galerías han adquirido grandes espacios para mostrar una información mayor
sobre sus artistas. La Bienales y las Documenta parecen informar mejor que nuestros
museos.
Se
lamentó que desde las instituciones no se hiciera más para promocionar el arte contemporáneo
español, quizás porque genera capacidad crítica. Se lamentó el daño que el alto
IVA ha causado en el arte y el coleccionismo; no está justificada esta
fiscalidad tan elevada.
CentroCentro Cibeles muestra dos colecciónes: Abelló y Barrié.
No hay comentarios:
Publicar un comentario