lunes, 26 de junio de 2017

"CASTELAO NO ERA SEPATATISTA” DIJO CARLOS MELLA EN LA DELEGACIÓN DE LA XUNTA EN MADRID/CASA DE GALICIA

El economista, escritor, político y presidente de la Fundación Castelao habló de la "existencia y la presencia política" del emblemático pensador




L.M.A.
 
Madrid, 23 de junio de 2017.- “Castelao no es separatista; para él el separatismo es una idea anacrónica y no puede ser el ideal de ningún gallego”, dijo el presidente de la Fundación Carlos Mella, en la conferencia "Castelao: existencia y presencia política" que pronunció en la Delegación de la Xunta en Madrid/Casa de Galicia. Y añadió que “Castelao reconoce que Galicia es una nación con todos los derechos, pero que está dispuesta a renunciar a esos derechos, en justa correspondencia de los derechos de otros para construir una España más fuerte”. 

En la tribuna estuvieron el delegado de la Xunta en Madrid y director de la Casa de Galicia José Ramón Ónega; el abogado, expresidente del Consejo de Cuentas de Galicia y patrono de la Fundación Castelao, Xesús Palmou además del conferenciante, Carlos Mella.

Para Ónega, Castelao nos enseñó lo que era la emigración y el exilio. Esa Galicia desterrada y profunda, doliente y sentimental. Citando a Castelao señaló que “el verdadero heroísmo consiste en convertir los sueños en realidades y las ideas en hechos”. También expuso una breve reseña sobre Mella.  Carlos Mella (A Estrada, 1930), es economista, escritor y político: es Doctor en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid y Diplomado en Economía Financiera por la Sorbona. Fue director general de Política Financiera en el Gobierno Central, profesor de Economía Política en la Complutense de Madrid, Vicepresidente de la Xunta de Galicia, consejero de Economía y Hacienda y diputado en el Parlamento Gallego en dos legislaturas.  Fue también  presidente de la Asociación de Escritores en Lengua Gallega durante cuatro años.

Por su parte, Mella empezó su disertación leyendo el documento editado por el Gobierno cuando murió Castelao en Buenos Aires. En él se le tildaba de separatista y tenía las indicaciones precisas de cómo había que tratar la noticia en los medios de comunicación (páginas interiores, fotos pequeñas, sin aludir a determinados libros, ni dibujos…). “Castelao dejó todo su pensamiento escrito por lo que no hay ninguna duda, así que está claro que no era separatista como se dice en el documento. En relación a la palabra nación, como es polisémica, puede tener muchas lecturas.  “Castelao al convertirse en dirigente emblemático del galleguismo, incluso del nacionalismo gallego, fue reclamado por todas las tendencias del abanico político y, no pocas veces, su pensamiento se vio vituperado. Por eso es necesario hacer un mínimo resumen de su cosmovisión para comprender mejor su lucha por hacer presente la existencia real de Galicia”.

Mella explicó que “Castelao miró a Galicia e no le gustó lo que vio. Donde otros miraban y veían prados verdes esplendorosos, paisajes embaucadores,  atardeceres rojizos y dorados y demás bellezas poéticas, él vio un país avasallado, pero no se conformó con una queja fácil ya que se impuso la tarea de remediar los atascos luchando con armas democráticas, la palabra, los escritos y el dibujo”.

El ponente señaló que Castelao se preguntaba por qué un país de tan acusada personalidad y de identidad bien definida no fue quién para  convertir su existencia en presencia política. Y analiza insistentemente la discordancia entre lo que es Galicia y lo que pesa en el concierto político”. 

“Cuanto más lo leo más me gusta”, dijo Mella. “Que Galicia existe geográfica y socialmente es un hecho evidente. Que Galicia exista políticamente es una cuestión que merece ser reflexionada. La existencia real está garantizada por el pueblo, pero la presencia política se realiza a través de los representantes y estos no cumplieron. Por eso Castelao pide un estado federal que permitiría que la presencia política de Galicia fuera mucho más efectiva.

“Los partidos nacionalistas no fueron capaces de ilusionar a los gallegos, no consiguieron consolidarse como movimiento de masas. En realidad y para desgracia de Galicia, la historia del nacionalismo parece la historia de un fracaso”.

Tras la exposición se abrió un animado coloquio donde los asistentes pudieron preguntar todas dudas.



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