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Julia Sáez-Angulo
26/12/18 .- MADRID .- Cristóbal
Serra es un sabio que “habita el secreto, con la misma naturalidad que otros
nadan en el ruido”, al decir de Octavio Paz. Su libro Nótulas, publicado por la
editorial Árdora Exprés, da fe de ello. Sesenta páginas de aforismos o
reflexiones que nos transmiten luminarias sobre un pensamiento.
“Un país literario llamado Cristóbal
Serra”, por Adolfo Montejo, cuenta con acierto sobre el autor y dice: “El
estilo de Serra siempre fue el de enveredar por la frontera de la literatura,
por la escritura salteada, a vida del cortocircuito poético. Así, para componer
una nótula –es invención serriana que procede del latín nothus: bastardo, híbrido, cruzado- a menudo presente dos o tre
reflexiones poéticas juntas, en aleación. Su escritura se basa en la
germinación de las palabras, en el cuidado de sus semillas.”
Cristóbal Serra (Palma de Mallorca, 1922) es escritor polígrafo y erudito. Ha escrito varios libros, entre ellos Diario de signos (1980).
Cristóbal Serra (Palma de Mallorca, 1922) es escritor polígrafo y erudito. Ha escrito varios libros, entre ellos Diario de signos (1980).
El propio autor, Cristóbal Serra,
explica que la nótula se toca con la nota y linda con el aforismo. Tiene de la
primera el gusto desenfrenado por la autonomía y la libertad. Se confunde con
el aforismo en lo que este tiene de aeorolito, de caída irremisible. La nótula
pretende ser típicamente literaria y veladamente expresiva, apensa deja
entrever lo que va a decir. Al lector incumbe darle remate, comenzarla de nuevo
considerarla lograda...”
Tomemos algunas de la nótulas más
breves: “Un hombre que pretende tener una filosofía personal, ha de empezar por vivirla”, o ésta
tan desalentadora: “Los hombres somos unas sombras que algunas veces nos
mezclamos con la luz de un crepúsculo. Nada más”.
Octavio Paz en Corriente alterna, define el fragmento como una partícula errante,
meteórica que solo se define frente a otras partículas. NO es nada, afirma
salomónico, si no es una relación. “Esclarecedoras palabras, que parecen
dictadas para mis nótulas, que guardan relación con mis más queridas o
acariciadas ideas, señala Serra.
“El¡talento colecciona pequeñas
moscas. El genio vuela con las águilas”, dice otra de la nótulas. “Se admite a la Razón, que tenga cadenas. Se reprocha a
la Imaginación que no las tenga”. Y para terminar: “La forma es lo finito, no
lo infinito. La forma es la cárcel, la geometría del espíritu”.
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