Villedieu-les- Poêles,
ciudad normanda de las artesanías del cobre y los encajes
Julia Sáez-Angulo
Los
bronces, los cobres, el estaño y los encajes son las grandes artesanías del pintoresco
pueblo normando Villedieu-les Poêles que se muestran en talleres y museos, a
las que se suma un singular Museo del Mueble Normando, como grandes atractivos
de los numerosos visitantes que conocen los atractivos del lugar. La ciudad es cita periódica de los Caballeros de la Orden de Malta, que tienen su gran procesión el primer domingo de julio de cada año, desde la iglesia parroquial.
El
municipio de Villedieu-les Poêles se ha ocupado de articular los cuatro museos
para dotar a la ciudad de un atractivo seguro. El Museo de la Poelesrie (de los
utensilios culinarios) acoge numerosos cacharros de cobre, estaño y latón,
especialmente para la cocina, con amplia documentación histórica sobre el
proceso de su fabricación a mano.
El orfebre de cobre Marc Legros, que muestra orgulloso la
actividad de su taller abierto al público, habla de las excelencias del cobre
como resistente a bacterias y hongos respecto a otros materiales. En su taller
se han llevado a cabo, además de baterías de cocina con toda clase de tipologías,
bañeras y lavabos, así como esculturas y cuadros y artes aplicadas. El martillado
–martelé- es una parte del proceso de
numerosos recipientes. “Para un bote de mermelada se pueden llevar a cabo más
de tres mil martillazos para lograr los efectos buscados”, explica el señor
Legros.
Museos
del Encaje y del Mueble
El Museo del Encaje es otro despliegue de explicación
histórica a base de paneles, fotos y objetos, sobre todo bolillos de madera que
da lugar a puntillas y encajes singulares, parientes de los cercanos de
Alençon, con dibujos diferenciados, como corresponde a cada uno de los pueblos
normandos que llevan a cabo esta artesanía. Pequeños patinillos al aire donde
se reunían las encajeras son de lo más pintoresco y los fotógrafos del siglo
XXI se aprestan a enfocarlos como en su día hicieron los de primeros del XX,
según las fotos que se contemplan en el Museo.
El Museo del Mueble Normando presenta una colección
excepcional de 145 muebles típicos y referentes del buen saber hacer de los
cinco departamentos de Normandía. Hay conjuntos muy completos de piezas, como
el del interior dieciochesco de Coutances, que ofrece una alhajada estancia
rural. La sucesión de grandes armarios tallados en madera son una maravilla,
junto a ellos, camas, cunas, sillas, escaños, mesas, relojes de pared, mesillas
y otros.
La fundición de campanas es otra gran actividad de
Villedieu-des-poêles, por lo que la venta de campanas para las puertas o
jardines es una constante en las numerosas tiendas que venden bronces, cobres,
estaño o metales. Durante este año se están fundiendo nuevas campanas para la
catedral de Notre Dame de París y se exponen al público durante este verano.
La fundición de campanas se remonta al Medioevo de
Villedieu. La Fundición Cornille-Havard perpetúa ese saber hasta nuestros días
en un taller que se fundó en 1865. De su creación han salido campanas para los
Estados Unidos, Canadá, Malta, Africa, además de para Francia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario