Carmen
Valero
23/08/17
.- Toda España se conmocionó tras la muerte del concejal vasco Miguel Ángel
Blanco en 1997, a manos asesinas del grupo terrorista ETA, que ha dejado tras
de sí casi un millar de víctimas mortales y varios miles de heridos, huérfanos,
padres y hermanos llenos de sufrimiento por esas ausencia. La pintora madrileña
Mónica Mittendorfer de origen austriaco se sintió conmocionada el día que ETA mató
sin piedad al concejal Miguel Ángel Blanco y la artista sintió la necesidad de
plasmar esa muerte del inocente en un cuadro de grandes dimensiones (181 x 100 cm en técnica mixta de óleo y acrílico) con la
estética expresionista que le caracteriza como estilo y que tan bien se avenía
con el hecho de su martirio por bestias humanas.
Con motivo de la conmemoración de este acto de barbarie, a los veinte años de la muerte del concejal de Érmua, la pintora ha querido poner de manifiesto su pintura.
Con motivo de la conmemoración de este acto de barbarie, a los veinte años de la muerte del concejal de Érmua, la pintora ha querido poner de manifiesto su pintura.
A
partir de este exterminio criminal, pese a la solicitud de miles de manos
blancas en España pidiendo la liberación de su secuestro, ETA perdió bastantes
apoyos y comenzó el “espíritu de Ermua”, aunaba a distintas fuerzas políticas
contra los encapuchados terroristas de la boina.
La
pintora Mónica Mittendorfer Valero (Madrid, 1976) quiso representar a Miguel Ángel
Blanco como un ser humano doliente en una cruz, con el cuerpo maltrecho en el
que se adivinan las costillas, junto a otros personajes laterales en grises
negros y blancos, a modo de acompañantes de su propio calvario.
La
pintora Mittendorfer estudió Bellas Artes en la Facultad de la Universidad
Complutense, es una gran dibujante y comenzó a exponer a partir de 2000 con la
Comunidad Itinerante de Arte Joven de la Comunidad de Madrid. Trabaja el óleo,
el acrílico, el dibujo, grabado y fotografía. Ha llevado a cabo diversas
exposiciones individuales y colectivas.
El
cuadro “La muerte de Miguel Ángel Blanco” es un testimonio de dolor, ante un
ser humano que es asesinado como simple motivo político de intereses políticos
antidemocráticos de una banda asesina. Lasociead civil supo reaccionar y
también algunos artistas como Mónica Mittendorfer que plasmó un gran cuadro,
que perpetuará la memoria de un inocente. “Fue un cuadro que salió de mi propio
dolor, de mi espíritu. Era lo único que yo podía y sabía hacer ante tamaña
salvajada de ETA”.
El
grupo terrorista ETA, que dividió la sociedad vasca en cobardes y valientes,
según se atrevieran o no a hacerles frente con valentía con palabras y hechos,
todavía no ha entregado las armas, pese a que suspendían la orden de matar,
después de lustros haciéndolo sin haber conseguido ninguno de sus malditos
objetivos, sino dejar un rastro doloroso de sangre con el tiro en la nuca y
masacres de colectivos humanos de distinto orden. Aparte queda lo de que los
asesinos de ETA movían las ramas y otros, políticos vecinos, se beneficiaban de
recoger las nueces.
-->
No hay comentarios:
Publicar un comentario