Óscar, el protagonista, sufre
cierto tipo de amnesia. Su memoria a largo plazo está intacta pero sus
recuerdos más inmediatos son muy limitados y, cada cinco minutos, Óscar no sabe
con certeza qué es lo que está pasando.
Julia
Sáez-Angulo
19/03/18.-
MADRID .- Así es: el que domina el relato, quien maneja la narratividad con maestría
podrá lograr su objetivo de salir indemne, de derivar la culpabilidad y
reservarse la inocencias. Los jurados se mueven por la lógica, no por la verdad.
Y la lógica, aunque parezca aplastante, puede no serlo, no responder a la
realidad de los hechos. Esto se da en la vida y en la política y lo manejan los
más audaces o astutos.
El diálogo
sucesivo entre una doctora psicóloga y un paciente por amnesia va lanzando información
y documentación al espectador sobre un suceso confuso, un accidente con pérdida
de memoria parcial, que repite diálogos para cerciorarnos de esa pérdida, necesario y algo
tedioso a la vez para el oyente.
Todo
es un artefacto que descubre al final de lo que se trata, con Edgard Alan Poe,
uno de los padres de la narrativa negra, por medio. Todo parece encajar en
medio de alguna ligera confusión para el oyente. Al final se dice que el nombre
de Reynolds no se ha dicho y sí se dijo al principio.
La obra tiene algo del "Huis clos" de Sartre. Un a puerta cerrada, que condensa la acción en la palabra y agobia a los encerrados.
Se
trata de un juego, una trampa, una sucesión de la misma pregunta para hacer
caer en un error… También cae el espectador en aquel. Los actores lo hacen
bien, el paciente resulta más convincente. La obra estará en cartel hasta fin
de mes.
Sinopsis
Óscar Almeida, abogado criminalista, despierta una mañana en la habitación de un hospital sin saber cómo ha llegado allí. Alicia entra en la habitación con una carpeta, un ordenador portátil, documentos y varias fotografías. Información acerca de un terrible accidente en el que Óscar se ha visto involucrado, pero del que no recuerda nada. Alicia debe trabajar rápido para unir las piezas del puzzle de un misterioso incidente antes de que él vuelva a olvidar todo. Óscar no recordará en qué habitación se encuentra, cómo ha llegado hasta ella, ni la conversación que está manteniendo con la mujer que tiene a su lado. En cada conversación entre ambos crecerán las dudas sobre qué es verdad, qué es mentira… y qué le ha pasado realmente a Óscar.
Óscar Almeida, abogado criminalista, despierta una mañana en la habitación de un hospital sin saber cómo ha llegado allí. Alicia entra en la habitación con una carpeta, un ordenador portátil, documentos y varias fotografías. Información acerca de un terrible accidente en el que Óscar se ha visto involucrado, pero del que no recuerda nada. Alicia debe trabajar rápido para unir las piezas del puzzle de un misterioso incidente antes de que él vuelva a olvidar todo. Óscar no recordará en qué habitación se encuentra, cómo ha llegado hasta ella, ni la conversación que está manteniendo con la mujer que tiene a su lado. En cada conversación entre ambos crecerán las dudas sobre qué es verdad, qué es mentira… y qué le ha pasado realmente a Óscar.
Equipo
artístico
Reparto: Verónica
Ronda y Fran Calvo
Autor: Aidan Fennessy
Dirección: Fernando Soto
Escenografía: Javier Ruiz de Alegría (AAPEE)
Iluminación: Javier Ruiz de Alegría (AAPEE)
Vestuario: Marianne Roland
Espacio Sonoro: Fernando Soto / Mariano Marín
Diseño gráfico y foto de escena: David Ruiz
Fotografía del cartel: Laura Ortega
Traducción: Fran Calvo
Comunicación: Josi Cortes Comunicación
Producción ejecutiva: Jesús Sala
Autor: Aidan Fennessy
Dirección: Fernando Soto
Escenografía: Javier Ruiz de Alegría (AAPEE)
Iluminación: Javier Ruiz de Alegría (AAPEE)
Vestuario: Marianne Roland
Espacio Sonoro: Fernando Soto / Mariano Marín
Diseño gráfico y foto de escena: David Ruiz
Fotografía del cartel: Laura Ortega
Traducción: Fran Calvo
Comunicación: Josi Cortes Comunicación
Producción ejecutiva: Jesús Sala
Es
una producción de FCLT Productions bajo licencia de Creative
Representation Sydney.
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