Carmen
Valero
Fotos; Jiménez, Zapisek, Alarcón, Herce
09/04/18
.- MALAGA .- El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, ha inaugurado la
exposición “Simpatía con el Expresionismo” del Grupo pro Arte y Cultura en el
Museum Rando, junto a la presidenta de la Fundación Jorge Rando, María Luisa de
Prusia, los pintores Jorge Rando, creador del museo, y Mayte Spínola fundadora
del Grupo pro Arte y Cultura, PAC y la directora del museo Vanesa Díaz.
Estuvieron presentes numerosos artistas participantes en la exposición y otros
miembros del PAC. La muestra permanecerá
abierta hasta el 25 de mayo.
El
alcalde de Málaga, ciudad de arte y museos además de hermoso mar, agradeció a
organizadores y artistas su presencia, después de las intervenciones de los
citados participantes.
En la
exposición figuran 17 artistas del PAC y dos del Atelier Rando: Teresa Ahedo,
Aracely Alarcón, Linda de Sousa, María Jesús de Frutos, Estartús, Rosa Gallego,
Miray Kobayasi, Romeral, Jerónimo López, Marta Maldonado, Rosa Maroto, Victoria
Márquez, Maica Nöis, Manuel Oyonate, Jorge Pedraza, Manuela Pico, Mayte Spínola,
Gloria Vázquez y Adriana Zapisek.
Carmen
Pallarés y Julia Sáez-Angulo, comisarias de la exposición, escriben en el
catálogo el texto titulado “El Puente. El Paso”:
“Fue Antonio Saura quien, en su
momento, bautizó al grupo de pintores informalistas españoles con el nombre de El Paso. Y lo hizo teniendo en la cabeza
y en el ánimo al grupo expresionista alemán Die
Brüeke, es decir, El Puente. Dejó
claro el movimiento de atracción cordial que manifestó el grupo vanguardista
español con el grupo artístico alemán, tan decisivo. El nexo era lo que
compartían en cuanto a ideas, sentimiento y práctica artística.
El paso que dio entonces el grupo español le aproximó asimismo al que Michel Tapié llamó Art Autre, arte distinto o diferenciado, refiriéndose al arte
abstracto no geométrico, el que abrazaba tendencias abruptas, por decirlo así, corrientes
informales, matéricas, gestuales, que compartían características como el
dramatismo, la acción plástica impremeditada, la exaltación de lo individual y
subjetivo, la introspección y la vía despejada para el
afloramiento del magma del carácter y el temperamento del artista, el
alejamiento de lo diseñado y lo compuesto de una manera representativa, el
auto-didactismo, en muchos casos, la búsqueda y la experiencia inmediata del
acto de pintar, la saturación, el brutalismo, la utilización de materiales y
materias que, hasta el momento, eran consideradas extra-artísticas, y la ausencia
de la exigencia de estilo unitario.
En la práctica técnica y estética, tales características conllevaron usos
aperturistas, liberadores, y se utilizaron profusamente el collage objetual o assemblage, el frotagge, el grattage y desde
luego, el predominio de maculaturas: la mancha se adueñaba de las obras como lo
iban haciendo las adicciones y las adherencias y múltiples sustancias y materias
que, hasta entonces, no habían tenido caso en los talleres ni en los estudios
de los pintores. Texturas y sorpresas expresivas, abstractas en su inmensa
mayoría, se hermanaron con el expresionismo, el europeo y el norteamericano, aunque,
en ciertas capas del sustrato, leve y oscuramente, palpitaban aún figuraciones… informales, empecinadamente
tortuosas…
El todopoderoso Informalismo, dijo Aguilera Cerni. Y cierto fue en el caso
de España y en la historia del arte español contemporáneo. Obras de Tapies,
Millares, Saura, Feito, Tarrast, Cuixart… parecían estar en todas partes en
galerías y exposiciones, y cruzando fronteras, tan dionisíaca como
olímpicamente, y obteniendo los primeros premios en las bienales
internacionales, desde la de Alejandría, en el 55, hasta la de Sao Paulo, en el
59, con la importantísima de Venecia, en el 58, destacándose de forma
deslumbrante. Despliegue y expansión para el arte español de vanguardia de
entonces, de la mano segura y sorprendente de Luís González Robles.
Y fue en la Bienal de Alejandría en la que el primer premio lo obtuvo un pintor que no mucho después daría el paso
hacia el expresionismo y se convertiría, sobre todo en el campo del retrato, en
el más ampliamente reputado. Nos referimos a Álvaro Delgado, quien, entonces y
en aquella bienal obtuvo el galardón con una obra, con un bodegón, que era
vecino del todopoderoso informalismo. Paso que traza esta exposición con una
selección de obras de autores españoles, o que viven y muestran su obra aquí
desde hace años, y que integran de forma variada el numeroso Grupo.
Mayte Spínola y María Luisa de Prusia
Foto de grupo con los artistas
Juana Maria Herce y Linda de Sousa
Grupo pro Arte y Cultura
Hemos llamado a la exposición Simpatía
con el expresionismo por cuanto hemos venido relatando. Una avenencia que
los pintores del citado grupo sienten, y cómo no, por la obra del artista Jorge
Rando, obra omnímoda, y en permanencia aquí, en este museum. A vuela pluma, ahora, pinceladas en torno a los artistas y a
las obras que constituyen esta exposición.
Cuadro dramático, enigmático, y tan racionalmente compuesto como radicalmente
alterado el de Rosa Maroto, obra que
distorsiona la figura de forma escenográfica y en la que manifiesta su
inconmovible admiración y su conocimiento de los grandes pintores españoles de
nuestra historia, Velázquez el primero, para esta artista siempre turbadora. Linda de Sousa, por su parte, homenajea
a Goya con su oscuro volumen, en el que a duras penas se abre paso de forma
emocionante el repetido intento de la luz. También en blanco y negro la obra de
Manuela Picó, para que entre ambos extremos
dancen glifos que actúan todavía entre la niebla de la caligrafía de la
historia. Estartús muestra una obra
tachista, organicista y palpitante, cuya simpatía con el expresionismo es
innegable. Igualmente, la obra de Jorge
Pedraza se avecina a las de la
corriente expresionista abstracta, gestual y chorreada en este caso. También el
cuadro de Mayte Spínola se une a
esta corriente con su visión aérea
de salpicaduras y manchas matéricas a las que de manera sorprendente confieren realidad sus sombras tenues. Aracely Alarcón deja libre el ánimo y la
imaginación con una obra en la que el color y el no color establecen un diálogo fecundo. Afirmación, vocación,
dignidad… Términos de orden moral o psicológico intervienen en el criterio
artístico que registra a su vez la calidad de esta obra de Jerónimo López, en la que se reúnen con rigor figuración,
informalismo y expresionismo. Rosa
Gallego entra en el sincretismo creador, pleno de fuerza y expresividad, y todopoderosa en el lenguaje de esta
fotografía. Adriana Zapisek y Mirai Kobayashi nos ofrecen, en las dos
obras que hemos seleccionado, una belleza
otra, un lirismo abstracto y engañoso, una serenidad y un esplendor que
envuelve conmociones y desgarros. Mundear,
ha titulado Manuel Oyonarte a esta
obra en la que trata con un asunto que, por decirlo así, carnavalea en el
lienzo, sin perder la referencia a la figuración. Y por su parte, contrastadamente,
con figuración plena y decidida, único caso en la exposición, María Jesús de Frutos inmoviliza en su
obra personajes que habrán danzado, o que van a danzar… Teresa Ahedo trata a su dibujo con una sabia indefinición y flotan
en su obra línea y mancha, meciéndose entre grises los contornos. Maica Nöis dota a su pincel de unos
cuantos gestos acerados que crean un núcleo lleno de energía, en un instante de
un proceso de transformación. José Luís
Romeral se reúne con la historia en este cuadro de dos maneras, la
arquitectónica y la literaria, con una ejecución plena de confianza en la
expresividad de la materia, extrayendo de ella sus trasuntos. Gloria Vázquez, con autoridad clásica, registra en esta obra el avance oclusivo de las
sombras hacia un fondo aún traslúcido y abierto, el drama, se diría, de un
transcurso que va pautando su composición. Victoria
Márquez logra que veamos y experimentemos un paisaje donde solo hay pintura, pinceladas y una
materia, el óleo en este caso, muy bravamente transformada en mar. Y
finalmente, llegamos ante el cuadro de Marta
Maldonado, una obra que parece desmentir sus medidas modestas, que desborda
sus límites, que se abre, se expande… Hasta que comenzamos a imaginarla, atrevidamente, enorme, agigantada,
coronando un ámbito sagrado y transmitiendo el tenue tegumento de una epifanía genesiaca.
Entre los asistentes: la concejala de Cultura de Málaga, Susana Martín; la directora del Museo de Málaga, María Morente; la coleccionista de arte ruso Dolores Tomás√; el coleccionista Antonio Sánchez de León y Cotoner; la poeta Juana María Herce; el escritor Nino Armundo Jiménez...
Entre los asistentes: la concejala de Cultura de Málaga, Susana Martín; la directora del Museo de Málaga, María Morente; la coleccionista de arte ruso Dolores Tomás√; el coleccionista Antonio Sánchez de León y Cotoner; la poeta Juana María Herce; el escritor Nino Armundo Jiménez...
FICHA DE LA EXPOSICIÓN
TÍTULO: Simpatía con el expresionismo
FECHAS: del 9 de abril de 2015 al 23 de mayo
SEDE:
Museum Jorge Rando
ORGANIZADORES:
Grupo Pro Arte y Cultura y Museum Jorge Rando
COMISARIADO:
Julia Sáez Angulo y Carmen Pallarés
Entrada
libre
Jorge Rando y Jorge Pedraza
Jorge Rando
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