Antonio Elorza, profesor de Ciencia Política
Julia Sáez-Angulo
25/4/21.- Madrid.- “El sueño de la razón produce monstruos”, como antes lo había hecho la cerrazón oscurantista. Así lo vio Goya y lo reflejó en un magistral grabado, él que com otros españoles había esperado todo de las luces que vendrían de Francia con Napoleón, pero que se tradujeron en rapiña histórico artística (con listas desde París) y menosprecio del corso hacia un país al otro lado de los Pirineos. 1808 fue el estallido de un encuentro, que lejos de ser fructífero fue sangriento, brutal y decepcionante en las esperanzas de los ilustrados. Hasta la monarquía española se le entregó y se apropio al mandatario francés, azote y ladrón de Europa. El Despotismo ilustrado no funcionó. El todo por el pueblo pero sin el pueblo adolece de soberbia y se carga de dinamita social.
“Ilustración y liberalismo en España” es el libro del historiador Antonio Elorza, profesor de Ciencia Política, que ha publicado la editorial Tecnos, en la Biblioteca de Historia y Pensamiento político.
El libro se divide en tres partes: El sueño reformador; El Guadiana de las luces, y, La imagen de una crisis.
“La obra pictórica de Goya ha constituido un punto de referencia a lo largo de mi trayectoria como historiador del siglo XVIII, bajo la superficie en “La Ideología liberal”, donde la dimensión icónica no tenía cabida, hasta la referencia expresada en el título de mi libro de 2011, “Lux ex 1808”, subtitulado “Nación, independencia y libertad en 1808”. Goya expresa en imágenes, con extraordinario rigor, “fantasía” -como el gustaba decir- y dramatismo, , el prolongado tránsito del Despotismo ilustrado a una revolución liberal que apoya sin reservas, incluso después de su aplastamiento por Fernando VII”, explica A. Elorza en la introducción al libro.
Bajo el “infame Godoy”, Jovellanos dixit, la corriente lleva a la guerra de la Independencia de 1808 y el libro “Ilustración y liberalismo en España” incluye un apéndice sobre el tiempo de gobierno de Manuel Godoy. Lleva por título: “l Mayordomo de palacio y los reyes holgazanes”, aplicando la línea interpretativa sugerida por Napoleón. La reinterpretación del fenómeno Godoy era imprescindible, dado que la imagen historiográfica revisionista, elaborada a partir de una bien elaborada biografía, creaba el espejismo de la era de Godoy simple continuadora del absolutismo ilustrado, salpicada de luces y sombras”, añade Elorza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario