Julia
Sáez-Angulo
El profesor Matías
Díaz-Padrón ha impartido una conferencia sobre el pintor José Ribera en la
Asociación Racionalista para la Gastronomía y el Ocio, ARGO, de Madrid. “Ribera
fue un pintor español nacido en Xativa (Valencia) e italiano en cuanto a su estética en la pintura”, dijo el
conferenciante.
José
Ribera (1596 – 1652), también denominado Jusepe de Ribera fue un gran pintor de
composición sobria, que elimina todo lo necesario en el cuadro. Sus elementos
ornamentales son mínimos, casi siempre con una mirada hacia la escultura o
arquitectura clásica. Su colorido lo acerca a la escuela veneciana.
La
pintura de Rivera no es tan lisa como la de Caravaggio, sino que presenta
materia en su superficie, porque trabaja
“a toda pasta”; frente a la tradición de la belleza en el arte, el pintor de
Xativa se sitúa en un realismo de claroscuro, capaz de representar temas como
“El niño cojo” o “La Barbosa de Abruzzos”, conocida como “la mujer barbuda”,
cuadro que se encuentra en el Hospital de Afuera de Toledo.
Frente
a los principios jesuíticos de conmover dramáticamente al creyente espectador
del cuadro, Ribera es contenido en la expresión, con ausencia del llanto, al
que tan aficionado iba a ser el Barroco. No trataba de contentar al espectador. Interesante
su serie de apóstoles y mártires, así como el retrato ecuestre de Don Juan de
Austria, tipología nacida en España y que aquí está en sus inicios. Ribera fue
uno de los pintores que representó a los modelos con amplia risa o carcajada en
la mejor tradición de los flamencos.
El
pintor de Xativa residió en Roma y Nápoles fundamentalmente. Gozó de prestigio
y fama en vida. “Los tres pintores que gozaron de fama y celebridad en vida han
sido Ribera, Zuloaga y Picasso”, dijo Díaz Padrón. El prestigio de Ribera hizo que la Corona de España
le comprara ciertas obras que hoy figuran en el Museo del Prado, como la espléndida “Magdalena
penitente” o “El sueño de Jacob”.
Julia Sáez-Angulo y Matías Díaz-Padrón
No hay comentarios:
Publicar un comentario